SEGUNDA TEMPORADA- CAPITULO FINAL

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Definitivamente navidad es mi fecha favorita del año. Pero esta es infinitamente mejor y me refería a la persona que ahora estaba en mi vida. Lauren simplemente lo hacía todo aún mejor de lo que ya era. Desde que llegó a casa con aquel vestido corto negro y su abrigo de leopardo me dejo muerta.

Nos habíamos reunido familiares y por supuesto mis padres y Lauren en mi casa. Mamá preparo el típico pavo y bueno, yo le ayudé en lo que pude la cocina no es mi fuerte. Aunque hubiera querido presentarles a todos a Lauren como mi novia sabía que no podría hacerlo, no en una fecha cómo está donde no quería para nada ser el centro de la atención. Y, Lauren la entendió y hasta estuvo de acuerdo.

Después de comer todos teníamos una amena conversación; los demás porque mi mundo solo se centraba en Lauren. No podía dejar de pensar en las horas que nos quedaban juntas. Aunque debería de ser una fecha especial y lo era definitivamente lo era cuando se va de mi mente la partida de Lauren. No pude más con esos pensamientos y me excusé para ir al baño, huí como pocas veces lo hacía pero me quería centrar en solo disfrutar sin pensar. Pero mi maldita cabeza no me quiere obedecer mis pensamientos no me dejan, yo quiero apagar mi mente pero no se como hacerlo y me frustra demasiado. Como si el refrescarme ayudará tras mojarme las manos con el agua que sale del grifo las pasó por mi cuello y logró suspirar un poco en alivio.

Concéntrate Camila, no arruinarás las horas que les quedan juntas solo por tu tristeza y melancolía, solo déjate llevar y no pienses más. Pensé

Cierro los ojos y doy una gran bocanada de aire, inhalo y exhalo tratando de alejar todo pensamiento negativo de mi. Tras secarme las manos con la toalla que está a un lado de mi ajustó mi maquillaje y sonrío al recordar a Lauren que me espera afuera, notó el brillo en mis ojos que está ahí desde que Lauren volvió. Suspiro y salgo del tocador. Suspiro hasta la sala de estar pero para mi sorpresa Lauren no se encontraba donde la deje minutos atrás. No puede ser. Volteo mirando a todos lados y no hay señales de ella.
Sonrío a mis tíos que me miraron con ese espíritu navideño reflejado en sus rostros. Doy la vuelta hasta llegar al comedor en donde veo a mi madre conversar animada con mi tía Catalina, su hermana mayor quien a diferencia de mi madre ella tiene el cabello negro largo cayéndole por la hombros.

–Mamá, ¿Has visto a Lauren?–Pregunte en tono bajo en cuanto llegue a un lado de ella.

–Claro, salió con tu padre al patio trasero.–Contesto de manera despreocupada y continuó con su conversación.

–¡¿QUE?!

–Déjala por un segundo, hija.–Replicó mi madre pero yo iba en camino a la parte trasera.

No sabía que pensar el saber que estaban a solas hablando. ¿Qué pasa si a mi padre no le agrada Lauren?
Aunque es algo ilógico ya que le a dirigido muy bien la palabra en todo este tiempo que ella lleva en México. Sin más que pensar deslizó la puerta corrediza que da acceso al patio y me quedé helada en cuanto los vi.

Estaban de pie uno al lado del otro con la mirada en las estrellas del cielo. Mi padre tenía ambas manos en los bolsillos de aquel pantalón gris de pinza y Lauren simplemente admiraba las estrellas, eso era demasiado bizarro de ver pero en cuanto los escuche lo fue aún más.

Señor Cabello, yo se que quizás jamás se lo imagino, pero debo decirle que lo comprendería, no es algo fácil de asimilar de la noche a la mañana.–La voz de Lauren se escucho demasiado educada al hablar con mi padre.

–Mmm... No del todo Lauren. No me mal entiendas.–Dijo rápidamente tratando de explicarse.– Ella jamás dio indicios de tener otras preferencias, pero tampoco es que me importe yo estoy a favor del amor y nada más.–Se aclaró la garganta.– Aunque si es un poco difícil de asimilar como dijiste.

A kilómetros de ti.  (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora