Destinados

Capítulo 15

Malena

Miércoles a la mañana

Posiblemente ésta sea la clase más aburrida de todas. Y lo peor es que no podemos hablar. Porque hay clases, o profesores mejor dicho, que no tienen problema con que no prestemos atención, si no hacemos mucho ruido está bien, pero este no es el caso. Así que eso la hace la peor clase. Tampoco podemos usar el celular, en serio, ¿es que nos quiere matar de aburrimiento? Garabateo al costado de mi hoja pero al rato ya está el margen lleno así que dejo la lapicera. Observo que hacen los demás, nada, lo mismo que yo, fingen escuchar al profesor. De repente hay algo que llama mi atención, puede que todos tengamos la mente en otro mundo en estos momentos pero hay una persona que parece que no es consciente de estar acá, parece a punto de llorar. ¿Será por la pelea que tuvimos? ¿Por qué otra cosa estará mal Olivia? Ayer faltó a clases así que muchas cosas podrían haber pasado.
Como si la vida me quisiera decir algo, entra uno de los preceptores y le dice al profesor que lo requieren en dirección. El preceptor se queda con nosotros, y para mi fortuna es buena onda y nos deja charlar. Antes que las demás puedan decirme algo me apresuro y me siento en uno de los asientos desocupados del banco que está delante del de ella.

Apenas me siento levanta su mirada, veo que intenta ponerse seria, o mejor dicho poner cara de enojada, pero falla. Es ahí cuando noto que debe de ser algo todavía más grande que nuestra pelea.

- Hey, ya sé que está todo mal, pero sabes que siempre me podés contar lo que sea - no soy buena consolando, así que estas palabras suenan raras en mi boca.

- Creo que sos la última persona que imaginé que se iba a acercar - suelta con una voz algo quebrada

- ¿Tan mal concepto tenés de mi? Ya sé que no soy cariñosa, ni nada por el estilo, pero no quiero dejar sola si estás mal.

- ¿Culpa? - esta vez sí tiene una muy mala mirada.

- No vine a pelear Olivia. Sí, me siento mal por lo que dijimos, y por lo que no hicimos. Pero en nuestra defensa, nunca lo hicimos con malas intenciones, te consideramos nuestra amiga, y sinceramente nunca entendimos bien tu relación con él. Cortaban, volvían, hasta donde nosotras sabíamos en esos tiempos que se daban podían estar con otras personas.

- Pero ustedes dijeron que me engañó. Así que no hablaban de cuando estábamos separados.

- Es cierto, pero como ya dije, él lo hacía bastante púbico, sólo lo asumimos, además te veíamos a vos hablar con otros chicos y bueno, malinterpretamos todo. Te pedimos perdón Oli.

- No hables por ellas, ya son lo bastantes grandes. Si lo sintieran así se me hubiesen acercado. Hablá por vos.

- Tenés razón, entonces te pido perdón. Nunca fue mi intención hacerte mal. Aunque no somos muy unidas sabes lo que te aprecio, y si a veces no te doy la atención que mereces es porque... Bueno, soy así, es mi forma de ser. No me sale ser cercana a nadie, ni contar mis cosas, ni preguntar. Pero nunca lo hago con mala intención, no quiero que pienses que me sos indiferente - quizá eso sea lo más cursi que le dije alguna vez a alguien. Todavía no entiendo cómo salieron esas palabras de mi boca, pero me alegra haberlas dicho. Puedo ver como una lágrima cae por su mejilla.

- ¿Me querés contar? - le digo

- Primero, gracias Male. Necesitaba esas palabras. Segundo, estás perdonada. Y tercero, es una larga historia, pero resumiendo, ese día que me fui de la plaza, estuve con Ramiro. Y cuando digo estar, me refiero, sí, a estar en ese sentido. Todavía no le dije a Nacho, es más, lo estoy evitando. Lo hice de resentida, por el enojo que sentía hacia él y hacia ustedes. Pero todavía no soy capaz de afrontarlo, no es que me sienta culpable, porque digamos que no es el mejor novio del mundo ¿no? Aunque no me hace sentir como una buena persona tampoco. Pero estoy segura que él tenga para decirme respecto a lo que hizo me va a doler, y no estoy preparada para eso. Y era peor porque estaba peleada con todas ustedes. No tenía a nadie.