Destinados

Capítulo 29

Stefanía

Abro los ojos y veo un bulto grande a mi lado, al principio estoy un poco confundida y después recuerdo todo lo ocurrido la noche anterior. Franco besando a Luciana, yo besando a Marcos y minutos después el primero se abalanzó sobre éste ultimo y casi empiezan un pelea de no ser por Lisandro, que los separó. Yo caí al suelo, lo recuerdo también por el hecho de que me duele toda la parte de atrás de mi cuerpo.
Mi atención se vuelve al chico durmiendo junto a mi, esta bien que ayer hayamos tenido sexo, pero ¿qué le hizo pensar que podía quedarse a dormir? Estoy segura de no haberlo invitado, estaba tan borracha que lo único que podía pensar era en dormir.
¿Y Vera? ¡Ay! ¿dónde pasó la noche? Me levanto de la cama intentando despertar a Marcos para decirle que se vaya pero no mueve ni un pelo, así que camino por la casa para encontrar alguna nota o algo de mi amiga. La encuentro en la habitación de Natacha durmiendo como si lo necesitara, observándola con ternura decido dejar que continúe descansando.
Tomo una ducha no muy larga y me cambio con ropa limpia y cómoda para quedarme el resto del día mirando películas. Entrando a mi habitación nuevamente y no pudiendo soportar que alguien mas duerma en mi cama, despierto a Marcos sacudiendo su hombro violentamente.

- Ya es de día- Le digo muy secamente e insinuando que tiene que irse y sin entender mucho la situación comienza a abrir los ojos. Por dios ¿cómo puede ser tan desubicado? Ni siquiera Franco duerme conmigo. Franco. Nada va a ser igual ahora después de lo que hizo ayer.

El timbre suena y corro a la puerta, abriéndola rápido para ver a quien ahora no podía mirar con otros ojos más que incomodidad...

- Hola - me dice avergonzado.

- Hola- sonrió falsamente.

- Dejé mi moto acá ayer, solo venia a buscarla- camino hacia él abriendo la reja y comienza a sacar su vehículo en silencio. Yo por dentro estoy deseando que Marcos tarde en bajar.- Emm yo te quería pedir perdón por lo que pasó ayer...

- Ya pasó Fran- ¿Fran? Yo nunca le digo asi- casi ni me acuerdo de nada- mira el suelo como si estuviera tratando de buscar argumentos para no irse.

- Ayer te caíste ¿te duele algo?

- Fue mi culpa, no tendría que haber tomado eso ultimo, ya ni me podía mantener parada- Todo estaba tenso, sus miradas, mi falsedad al responder, la situación- bueno, nos vemos el lunes en la escuela supongo- me doy vuelta para entrar y vuelve a hablar.

- Estás lastimada- se acerca y me toca la parte superior del muslo, señalando un enorme moretón violeta que parecía bastante serio.

- No lo había visto, pero ya te dije que no me duele, podes estar tranquilo de eso.- Me toma de los hombros y observa mis ojos como si estuviera luchando consigo mismo para decirme algo.

- Yo quiero hablarte de una cosa, algo que me está pasando...- se escucha la puerta cerrarse y su mirada se dirige detrás de mi, por favor que sea Vera. Pero al ver la mirada de furia de Franco puedo darme cuenta que no lo es.
Marcos pasa a mi lado y me da un beso en la mejilla a propósito, yo cierro los ojos con fuerza sin poder hacer nada al respecto y la mirada de furia de Franco pasa de observar al otro chico y después a mi. Camina decidido hacia Marcos y lo freno tomándolo fuertemente del brazo.

- ¡Para! ¿Qué haces?- Marcos nos observa divertido y le grito a él- ¡vos andante, ni siquiera sé porqué seguís acá!

- ¡Stefania soltame!- Me dice Franco enojado.

- No te voy a soltar hasta que él no se vaya- espero a que el otro estúpido se pierda de nuestra vista y ahora decido hablar- Franco no sé que es lo que estas haciendo pero te estas confundiendo.