Malena
Nunca voy a olvidarme de que por más que esté sonriendo, diciendo que ya supero todo y aún así no se le note, Julieta nunca va a estar bien. Porque, cada uno tiene sus propios demonios y aprende a vivir con ellos, pero ella es más vulnerable, demasiado sensible para esta vida, difícil de entender para alguien como yo o Stefanía, pero no para una persona tan empatica como Olivia.
Es por eso que era la pelirroja a quien habíamos asignado para hablar de las cosas que solo ella podría entender y después decirnos como van las cosas, si deberíamos intervenir o no, porque Julieta después de habernos contado todo, ya no quería volver a abrirse de esa manera y eso era muy malo.- ¿Eso complica más las cosas no?- Me dice un poco triste Matías.
- Totalmente, creo que este definitivamente es mi momento.
- Me apena que ya no puedas venir, pero lo entiendo y me pone muy feliz por vos Male.- estoy a punto de agradecerle cuando una voz nos interrumpe saliendo del depósito.
- ¿Qué es lo que te pone feliz?- Joaquín sonríe como un pequeño niño y me hace imitarlo.
- Me voy- le digo dejando flotar la intriga.
- ¿Te vas? ¿A dónde?- parece curioso.
- A Uruguay por el principio, después veremos si llegamos más lejos.- ahora si está totalmente confundido.
- Espera, no estoy entendiendo nada.
- Mi equipo de Voley ganó un campeonato importante este domingo y clasificamos a un torneo internacional.- sorprendido se acerca y me abraza fuertemente.
- ¿Al final ganaron? Felicidades Male, pero ¿eso significa que no vas a trabajar más?
- Por ahora si, el viaje es en un mes. Pero le estaba contando a Matías que los entrenamientos están cada vez ocupando más tiempo, puedo quedarme hasta este fin de semana.
- Bueno, como dijo Mati que bien por vos- intenta simpatizar pero no lo logra demasiado y finalmente sonríe excusándose con un trabajo para salir del local y se va.
- No parecía muy feliz- me dice Matías pensativo.
- ¿De que hablas?
- De lo que estoy hablando- lo empujó un poco y se ríe.
- Ya sabes lo que pienso de eso, a mi no Malena. Entre ustedes pasa algo.- mis ojos automáticamente se ponen en blanco.
- No hagas que te explique por décima vez mi trato con Joaquín.
- No, no me vengas con la historia de que solo se ven casi todos los días por la perrita porque no es creíble.
- ¿Querés razones concretas? Bueno, Joaquín no es mi tipo, me cae bien pero ni siquiera demasiado como para que seamos amigos. Mi única relación con el es por Calu y espero que siga siendo así, porque generalmente los chicos con esa personalidad simplemente me exasperan . Ni siquiera se porque debería importarle que me fuera.
Matías se queda completamente inmóvil con su mirada fija detrás de mi y lo sigo. Alli, se encuentra Joaquín con su mirada muy centrada en nuestra conversación, ojos que reflejan dolor y enojo al mismo tiempo.
Por primera vez en mi vida no se que decir y tampoco pretendo hacerlo, ya que es evidente que nada podría arreglarlo. Pasa de nosotros y se encierra en la oficina. Esta vez yo debía ser quien se disculpe por actuar como idiota, pero la vergüenza (y un poco de orgullo) me inundaba.Decido esperar a que el día termine y aún así el no sale en ningún momento, estaba demasiado avergonzada como para hablarle y a la vez enojada, porque no podría afectarle tanto, no es ninguna mentira.

ESTÁS LEYENDO
Destinados
Teen FictionAlgunas tienen mucho en común, otras muy poco. Algunas sufren mas, otras hacen sufrir. Algunas sienten, otras simplemente no parece que lo hagan... Vera, Malena, Julieta, Stefania y Olivia son cinco amigas con historias y maneras de ver la vida dife...