En ese momento, él la tiró al sofá y comenzó a besarla. Eran jóvenes, estaban solos, y se querían entregar a la pasión. Anne tragó saliva y comenzó a sentirse incómoda al verse sola en casa de Dave y con esa película dándoles ideas. Los actores avanzaban en su momento pasional y Dave al mirar a Anne se dio cuenta de que la estaba asustando y cogió el mando para darle pausa a la película justo en el momento que alguien llamaba a la puerta.
- ¿Estás bien? No te preocupes, sólo es una película, no va a pasar nada.
Anna enrojeció de la verguenza.
- No es que esperara que pasara nada, sólo que... Bueno, tampoco te conozco... Y...
No sabía cómo hacer para que él no pensara que ella esperaba que a él le gustara ella y le entrara algún deseo inapropiado. Quería que pareciera que a ella no le importaba porque no sentía nada.
Dave captó el mensaje y decidió echarle una mano.
- Sólo por ser un chico y una chica no significa nada. Eso sólo pasa en las pelis. Aquí estás en mi casa como una amiga e invitada y mi deber como anfitrión es que te sientas como en tu casa- sonrió-. No puedo permitirme ninguna queja en mi historial- le guiñó un ojo.
Anne se rió y se quedó más relajada.
- Sigamos viendo la peli, parece ser que les han interrumpido, a ver quién es.
- Como desee mi invitada- dijo Dave imitando un mayordomo.
Se rieron y siguieron viendo la película. Desde ese punto, empezó a ser más aburrida y el sueño poco a poco iba cubriendo sus ojos.
Al instante se vieron transportados a otro lugar. Un lugar conocido. Era la sala del trono. Se oía música y risas.
- Wow... Estás preciosa- dijo Dave.
- Madre mía, este vestido es como el que vi en una película y siempre me quise poner. Tengo una trenza altededor de la cabeza como la que tenía mi hermana en su boda... Antes de irse para siempre...
- ¿Murió?- preguntó Dave con "delicadeza".
- No, se mudó. Tiene un hijo. Nos vemos de vez en cuando. Ahora tengo la habitación para mí.
- Ah.
Dave resopló aliviado por no haber metido la pata. Anne le observó vestido como si fuera un noble y pensó que le gustaría acostumbrarse a ello. Llegaron frente a las puertas abiertas de la sala de baile donde, al anunciar sus nombres, se hizo silencio y todos los presentes hicieron una reverencia. Dave se quedó petrificado y Anne se puso colorada.
- Bienvenidos- pronunció alto y claro el príncipe, bajando las escaleras de la otra punta de la gran sala.
Dave miró a Anne y vio cómo sus ojos se dirigían hipnotizados hacia el príncipe.
- Soy Edward Richard Palaces del Zafiro Diamante. Como príncipe heredero os presentaré oficialmente ante los embajadores y representantes de cada distrito además de mis súbditos y leales amigos de la capital. Ellos son Dave y Anne, príncipes del mundo real. Estamos aquí para celebrar su llegada a este mundo. Van a cumplir sus misiones y después cada uno decidirá si se queda o no.
Todos aplaudieron dando la bienvenida y la música volvió a sonar, pero los demás no bailaron. Estaban esperando a que el príncipe Edward escogiera la pareja de baile. En ese momento, Dave vio su oportunidad.
- Prométeme el primer baile- le pidió a Anne.
- Claro- aceptó ella automáticamente.
El príncipe se acercó a Anne mientras todos le abrían paso. Ella abrió los ojos de par en par, sorprendida. No esperaba que el príncipe se le acercara para pedirle el primer baile.
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Hazte REALIDAD o Conviérteme en SUEÑO #Wattys2018
Fantasy¿Qué pasaría si te dieran la opción de elegir a quedarte en el mundo de los sueños tras un año de probar a vivir en ambos mundos? De día en el mundo real. De noche en el mundo onírico. ¿Cuál escogerías? ¿Qué escogerán los protagonistas? Descubre los...