𝐓𝐄 𝐋𝐎 𝐏𝐑𝐎𝐌𝐄𝐓𝐎

Parte 6

-¿¡Cómo que modelos!?- le digo alarmada y furiosa, debió de hablar conmigo sobre esto- ¡Papá nunca me hablaste sobre esto!- le digo y la expresión de mi padre cambia completamente.

-Creí que te gustaría hija, por eso no te pregunté- 

Él no sabe lo que he tenido que pasar con Zac, no sabe nada, ni siquiera mi horrible pasado... Solo sabe de los momentos que pasábamos juntos, los cuales eran muy pocos, casi siempre no tenía tiempo para mi, me prometía cosas y jamas me las cumplía, no sabe lo que tuve que aguantar en primaria... No tiene idea de aquel trauma.

-¡Pues estás equivocado! Solo asumes que me gustan las cosas sin preguntarmelas, no sabes mis gustos, mi tiempo, no sabes nada ¡Solo mantienes trabajando!- le digo casi con lágrimas en los ojos. Oh Dios no puedo dejar que esto me afecte, y menos frente a ellos.

Miro de reojo a Zac y puedo ver que tiene fija su vista en mi. Como si pudiera saber que estoy pensando, es incómodo.

Doy un último vistazo a mi padre y puedo ver su rostro triste, solo mirándome.

-Luego hablaremos de esto- le digo y antes de irme a buscar a Austin, me despido cordialmente -Un gusto conocerlo Señor Andres, tendrá mi respuesta pronto- le digo y le tiendo la mano, la cual tarda en aceptar pero lo hace. Miro a Zac por última vez y el solo agacha la cabeza. 

Cobarde.

Doy media vuelta y ahora es que noto que Vanessa ya no estaba a mi lado, ¿Pero en qué momento desapareció? Como sea, me encamino a buscar a mi hermano y ya que no logro ubicarlo decido salir al patio trasero, pero él tampoco está ahí.

¿Dónde se habrá metido? Se que está aquí porque vi su auto en la entrada, así que se me ocurre una idea de donde puede encontrar.

Cuando éramos pequeños solíamos escondernos en la pequeña cabaña a buscar bichos. Recuerdo que una vez encontré una mariposa y Austin quiso atraparla, la correteó por todo el segundo piso y sin ver por dónde iba corriendo, cayó por las escaleras hasta el primer piso, yo baje rapidamente pero cuando lo vi solo tenia una sonrisa en su rostro. -La atrapé- dijo Austin y solo reía. Como extraño esos tiempos, es el único que sabe completamente todo de mi, todo mi pasado, ni siquiera Vanessa lo sabe, a pesar de que sea como mi hermana, es muy doloroso contarlo.

Me encamino hasta la pequeña cabaña y subo al segundo piso, ahí me encuentro a Austin mirando por la ventana hacia la nada.

-Felicidades- digo y él voltea sorprendido, le doy una gran sonrisa la cual el me devuelve y salto a abrazarlo.

-Te he extrañado- le escucho decir, ya extrañaba su voz. La última vez que nos vimos fue cuando él se fue de casa, quería dedicarse cien por ciento a su carrera, y en casa no podía concentrarse. Yo tenía unos 15 o 14 años.

-Yo igual te he extrañado- le digo y me separo un poco de él. -Te traje un regalo- digo y saco la bolsita de mi espalda. Él me sonríe de forma tierna y nos sentamos en la cama que se encuentra al pie de la ventana.

Austin abre la bolsita y saca una pequeña cajita, cuando él la abre puedo ver como sus ojos se ponen llorosos mientras saca la cadena con el avión de papel.

-E-es hermoso Leila- me dice un poco tartamudeando por la emoción y yo solo sonrió satisfecha. Sabía que le gustaría.

-Dejame ponertelo- le digo mientras tomo la cadena y me levanto, me pongo en su espalda, rodeo la cadena en su cuello y se la coloco.

-¿Recuerdas la vez que fuimos de vacaciones con el abuelo, antes de que muriera, que nos enseño a hacer un avión de papel y lo tiramos por una montaña para que volara?- me dice y puedo ver sus ojos lloroso.

Asiento la cabeza porque recuerdo perfectamente las palabras que dijo después.

-¿Recuerdas las palabras que dijo?

-"Si desean, puede volar, solo tienen que confiar en sí mismos"- le digo y siento como se resbala una lágrima por mi mejilla.

-Por eso elegí la carrera de piloto de avión, deseo volar y lo he conseguido- dice y yo agacho la cabeza.

-Yo aún tengo tengo muchas cosas que me pesan, no puedo hacerlo, no aún...- digo en susurro.

-Sé que lo lograras algún día, yo te protegeré si en el intento te caes- le escuchó decir, levanto la cabeza y él me abraza.

-Se que lo harás- dice y yo rompo en llanto.

 
Media hora después entramos a la casa, ya hacía hambre y mi hermano y yo tenemos un gran apetito.

En la cena logro ver nuevamente a Vanessa y se encontraba con.. ¿Thomas? ¿Qué hace Thomas aquí? Seguro vino porque Zac estaba acá, como sea, Vanessa no para de sonreír a cada momento que está con él, me alegra por ella.

Austin dijo que me tenía que presentar a alguien pero no quiso decirme a quién, sospechoso.

Después de la cena, Austin me agarro de la mano y me llevo al patio trasero nuevamente y allí se encontraba una chica y un chico que no logro distinguir.

-Leila ella es Melody, mi novia- dice Austin y la chica de cabello castaño se voltea y noto que tiene los ojos cafés oscuros, igual de penetrantes a los de Zac.

-Un placer conocerte Leila, Austin me a hablado mucho de ti, eres su niña pequeña- dice Melody la cual tiene una gran sonrisa en su rostro.

-Y él es su hermano, mi cuñado y mi mejor amigo Zac- dice y Zac voltea, me mira directo a los ojos, me da una pequeña sonrisa inocente.

¡¿Hermano!? ¡¿Cuñado!? ¡¿Mejor amigo!?

¡Dios!

¡¿Zac se tiene que meter en toda mi vida!?

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Aquí el nuevo capitulo, espero lo disfruten y muy pronto conocerán todos los secretos que esconden los personajes, ya lo verán 👀

¡Gracias por leer!

Cathe💕