Parte 27

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Vanessa POV.

Abro mis ojos lentamente y parpadeo un par de veces debido a la luz que entra por la ventana. Siento una presión en mi estómago y cuando bajo mi vista distingo el brazo de Austin, esta abrazandome por la espalda. Rápidamente abro los ojos como platos y mis mejillas se encienden.

Estamos en forma de cucharita, siento su respiración en mi espalda y su nariz en mi cuello, me hace un poco de cosquillas. Levanto su mano suavemente para que no se despierte, me levanto de la cama dejando su brazo sobre las sábanas.

Me quedo observándolo... Es tan apuesto. Sus ojos cerrados, sus labios en una fina linea, su cabello alborotado, y está sin camisa. Aprecio sus hermosos músculos y su amplia espalda. Sin pensarlo me siento suavemente en la cama y acaricio sus brazos, su piel es tan suave. Trazo una linea por sus hombros, sus brazos y me devuelvo hasta su espalda.

"Ojala fueras solo mío" pienso para mi misma.

Austin se revuelve en la cama y abre sus ojos, nuestras miradas se cruzan y yo rápidamente retiro mi mano. Veo como se le dibuja una pequeña sonrisa en el rostro.

-Vane si me vas a violar al menos despiertame- dice divertido, yo entorno los ojos y río.

-Tú con ganas- digo coqueta y me paro de la cama. Al estar de pie siento una corriente de aire entre mis piernas, miro hacia abajo y noto que estoy en ropa interior. Rápidamente cojo las sábanas de la cama y me envuelvo en ellas.

-Oh vamos- dice Austin -Anoche te los quitaste dormida, dijiste que tenias calor, y me pediste que te abrazara- me guiña un ojo aún acostado en la cama.

¿Qué? No, yo no haría algo como eso.

¿O sí?

-Dejate de juegos, yo no haría algo como eso Austin- digo tratando de recuperar mi dignidad.

-Te equívocas, además tienes unas hermosas piernas Vane, no tienes nada de que avergonzarte- dice y me sonríe.

Siento cosquillas en mi estómago y me siento bien conmigo misma. Me retiro lentamente la sábana y se la tiro en la cara.

-Espero que no me hayas visto las nalgas- le digo cruzandome de brazos.

-Jajaja Para nada, yo no miraria esas hermosas, redonditas, y suaves nalgas- dice entre risas.

-¡Austin!- le grito y me le tiro encima a hacerle cosquillas. Mis manos recorren su estómago, su cuello, y sus brazos. Austin no para de reír, pero me acabo de dar cuenta de que aquí la más cosquilluda soy yo, rápidamente trato de pararme de la cama, digo trato porque Austin ya me tiene agarrada de las manos y esta encima de mis caderas.

-¡Austin sueltame!- grito tratando de safar mis muñecas de su agarre pero es inútil.

-No debiste empezar con las cosquillas, ahora viene mi venganza- dice y me sonríe.

Con una mano sujeta mis muñecas y con la otra recorre mi estómago haciendo soltar carcajadas. Siento su mano subir hasta mis axilas,  no paro de reír, mi estómago duele y yo solo trato de soltarlme de su agarre.

-¡Austin... Sueltame... Ya para!- digo entre risas.

Austin para y por fin puedo respirar. Trato de calmar mi respiración pero mi sonrisa no se retira de mi rostro, aún sigue encima de mi y lo miro directo a los ojos.

-Esa sonrisa tan hermosa, así te quiero ver todos los días- dice Austin de repente y yo quedo muda.

¿Por qué me haces esto Austin? Me dejas completamente fuera de la realidad.

Mis ojos no se separan de los de él, siento como acerca su rostro lentamente hasta que nuestros labios se juntan.

Me dejo llevar por el momento he inconscientemente mis caderas se empiezan a mover. El suelta mis muñecas y empieza a bajar sus manos por mis brazos hasta llevar a mi pecho, masajea suavemente mi pecho y siento una chispa en mi estómago.
Sube sus manos hasta mis mejillas e intensifica el beso. Mis manos recorren su pecho hasta llegar al comienzo de su pantalón.

Empiezo a sentir un bulto en mi entrepierna y la chispa se empieza a intensificar aún más. Aprieto mi entrepierna a su bulto y el gruñe, mete sus manos por debajo de mi blusa tocando piel a piel mis pechos. Gimo en medio del beso y el aprieta en mi entrepierna.

Quiero hacerte mío Austin, quiero que seas solo para mi y quiero ser solo para ti, quiero ser tuya.

-Vane...-dice Austin sacando sus manos de mi blusa y separándose un poco de mi -No puedo... Lo siento- dice con tristeza en su rostro.

¿No puede? Por supuesto que no puede, él tiene novia y no soy yo. Rápidamente me safo de él y me levanto de la cama. Tapó mi rostro de la vergüenza que siento, bajo mis brazos hasta mis pechos, aún puedo sentir sus manos en mi.

Fuiste una estúpida Vanessa como te dejas llevar así. Esto no puede volver a pasar.

-Yo... Lo siento de verdad Vane- dice Austin parándose de la cama y caminando hasta mi.

-Tranquilo, dejalo, entiendo- tomo mi ropa y me meto rápidamente al baño, cierro con seguro y me dejo caer en el suelo.

Soy una estúpida, claramente él no va a estar con alguien como yo, él ya tiene a alguien en su corazón, me deje engañar muy fácil y esta es la consecuencia.

Siento las lágrimas resbalarse por mis mejillas, meto mi cabeza en medio de mis piernas y dejo salir todo.

...

Después de tomar una ducha y tratar de evitar a Austin en la habitación, decidí bajar a desayunar, Austin bajó conmigo aunque no hemos dicho ni una palabra. Al entrar al restaurante del hotel nos sentamos en una mesa para dos, el camarero vino rápidamente y nos dejó el menú, cosa que agradezco porque tengo demasiada hambre.

Ordeno un plato de Waffles con miel y un batido de avena, Austin pide huevos con tocineta y un batido de chocolate.

Esperamos a que nos traigan la comida y mientras tanto yo juego con la servilleta, tengo esa costumbre cada que voy a un restaurante. Aún estoy avergonzada por lo que paso en la habitacion, por lo cual no quiero hablar.

Miro a la cara a Austin y tiene sus ojos fijos en mi, me intimida un poco y bajo la vista nuevamente a la servilleta.

-Vanessa, yo de verdad lo lamento, ojala pudieras entenderme- dice Austin tomando mi mano.

-Yo te entiendo Austin, no tienes porque disculparte, aquí la que se equivoco fui yo- digo y retiro mi mano de la suya.

Miro por el ventanal del restaurante y dirijo mi vista a la cabaña que tenia los caballos anoche, alcanzo a divisar una chica cepillándole el cabello a uno de los caballos, uno blanco, muy hermoso. La chica es castaña y su figura se parece a la de... Leila.

Miro más detenidamente para tratar de identificar el rostro de la chica. Ella se separa del caballo y mira hacia acá, hacia el Hotel.

-Esa es...- digo en susurro y siento como Austin me mira.

-¡Es Leila!-







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¡Nuevo capítulo! 🙆

¿Al fin se encontraran? ¿Se enterara Austin de lo de Melody?

¡Gracias por leer!

Cathe💕

𝐓𝐄 𝐋𝐎 𝐏𝐑𝐎𝐌𝐄𝐓𝐎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora