MENTIRAS DE VERANO

CAPITULO SEIS (6)

-Me beso, no puedo creer que me beso.- Repetía Lucy una y otra vez sin poder creer que Logan la había besado la noche anterior.

-Cállate, ya sabemos que te beso ¿Quieres superarlo?- Respondió Jamie con fastidio.

-Es cierto, no has parado de decir lo mismo desde anoche, ni siquiera dormida dejabas de decirlo.- Estábamos las tres en la cocina preparando el desayuno para todos, mientras Connor y Steve seguían dormidos y tía Margaret estaba en el jardín como siempre.

-Estas celosa porque Sam no te beso a ti.

-Oh por favor, tampoco es que me estuviera muriendo por sus besos.

-Claro que si lo haces, anoche lo notamos ¿Verdad Jamie?- Miro a mi prima que estaba cerca a la estufa- ¡Jamie!- Grito al ver que ella no estaba prestándole atención.

-¿Qué?- Apenas y había notado que estábamos hablando con ella.

-¿Qué es lo que te tiene tan pensativa últimamente? ¿Es un chico?- Lucy la miro con picardía.

Agradecí internamente por el cambio de conversación repentino.

Jamie por su parte solo se limito a bajar la cabeza haciendo que su cabello cayera como una cortina por su cara.

-Ten cuidado, puedes quemarte el cabello.- Le advertí.

-Vamos Jamie, cuéntanos de tu chico misterioso.- Siguió Lucy

-No hay nadie especial.- apenas
y pude escuchar el susurro de mi prima, haciendo evidente que si había un chico.

-Eso es una vil mentira, tu susurro y tu cara lo demuestran.

Vi como Jamie comenzaba a encogerse cada vez más en la cocina, la conocía lo suficiente para saber que estaba ansiosa y a punto de estallar si Lucy no cerraba la boca.

-Habla chica, quiero saber de quién se trata.

-Déjala en paz, si no quiere hablar de eso no deberías forzarla.- La mire de forma amenazadora.

-¡Vamos! Tiene quince años es algo normal y debería ser fácil de hablar entre primas.

-¡¿Quieres callarte?!- Debo admitir que hasta a mi me dio miedo el grito de Jamie- Si no quiero hablar de esto por algo será ¿No crees? No todas tenemos la suerte del amor correspondido como tú- Salió de la cocina y subió las escaleras a toda prisa, de fondo pude escuchar un portazo proveniente de su habitación.

-¿Qué le pasa a Jamie?- Pregunto Connor entrando medio dormido a la cocina.

-¿Vez lo que provocas?- Le pregunte a Lucy con enojo ignorando a Connor.

-Ya lo superara.- Siguió preparando los huevos que anteriormente estaba haciendo Jamie.

Terminamos el desayuno en silencio y comimos, cuando todo estuvo limpio tome el plato de Jamie y fui hasta su habitación, aproveche que la puerta estaba abierta y entre.

-Traje tu desayuno.- Ella estaba acostada en su cama boca abajo.

-No tengo hambre.- Dijo sin levantar la cabeza.

-¿Quieres hablar?- Deje el plato en su escritorio y me senté en su cama dándole caricias en el cabello.

-¿Porque el amor es una es tan complicado?- Pregunto dándose la vuelta.

-Cariño, el amor es hermoso. Somos nosotros los que lo arruinamos y lo volvemos complicado.- Mi voz sonó suave y maternal, era así como mi madre solía hablar conmigo.

De sus ojos comenzaron a salir pequeñas lágrimas seguidas de sollozos.

-¿Quieres contarme que paso?- Odiaba verla llorar, siempre fue una chica fuerte, lo que significaba que si estaba llorando era porque enserio la habían herido.