Abecedario SouHaru

M de Mamá

Free! no me pertenece blablabla :v

Desde que tenía memoria, nunca había tenido una figura materna, lo más cercano a eso fue el cuidado de la señora Tachibana, quien años más tarde le heredaría esa tarea a su hijo mayor, y a su vez, su mejor amigo, Tachibana Makoto, el castaño se había tomado en serio ese trabajo, con frases como "Haru, no te quedes mucho tiempo en la bañera, te vas a enfermar", "Haru, no olvides abrigarte bien", "Haru, ahora no es momento de nadar", entre muchas otras, ya que si las contara todas nunca terminaría.

-Haru, quiero presentarte como mi novio.- Le comentó una vez su novio mientras se encontraban comiendo en un restaurante donde servían hamburguesas, hot-dogs y ¡hasta pizzas de caballa! Era como el paraíso, aunque eso no era lo más importante, sino el hecho de que sería presentado ante los Yamazaki, esperaba que no fueran homofóbicos o algo por el estilo, desgraciadamente sus padres sí lo eran y si se enteraban de que estaba saliendo con un hombre, ni siquiera él sabía qué le harían.

-Él es Nanase Haruka, mi novio.- Se encontraba ya en la casa del más alto, los señores Yamazaki al principio quedaron anonadados, poco a poco iban asimilándolo, su único hijo tenía una relación amorosa con otro chico, y sabrían sólo ellos qué más habían hecho.- Haru, ellos son mis padres.- Se inclinó ligeramente en señal de respeto hacia los mayores, tenía que mostrar su buena educación, cortesía de la familia Tachibana.

-Me alegra que no seas Rin; no es por ofenderte, hijo, pero Rin es demasiado "sensible" para nuestro gusto.- Sonrió algo divertida ante su propio chiste, en ese momento Sousuke no pudo evitar pensar, sus padres no lo regañaban por ser novio de Haru, ¿pero sí creían que Rin era su novio? ¡Sólo era su mejor amigo!- Mucho gusto, Haruka, al parecer tus padres te pusieron nombre de chica como a Rin, ¿no?- Ni siquiera esperó una respuesta, era casi como si leyera su mente o algo por el estilo.- Pasa, Sousuke nos dijo que cocináramos caballa, te gusta.- No fue pregunta, era más como una afirmación.

Se la pasó muy bien en la casa de su novio, quien quiso acompañarlo a su hogar, pero no se lo permitió, le aseguró que estaría bien, conforme se iba acercando pudo distinguir una sombra que le resultaba extrañamente familiar, ¿era Makoto? No, él estaba con Rin. ¿Nagisa? No, él no lo esperaría. ¿Rei? No, él lo visitaría en la mañana o en la tarde. La sombra se iba iluminando, entonces la reconoció, era...- Madre.- La llamó, la mujer volteó a verlo con un rostro demasiado serio para su gusto.- Haruka, necesito hablar contigo.- ¿Qué hacía allí cuando nunca le importó visitarlo? Cuando nunca pudo llamarla "Mamá".