Boss (Jainico)

46.-

POV Omnisciente

Y como había dicho, esa cita sí fue mucho mejor que la anterior. Estuvieron en una sala privada donde vieron algunas películas que a los dos les encantaban mientras comían palomitas de maíz y otras cosas más. Con ese éxito de cita, la tercera no tardó en llegar.

Esta vez, Jaime no lo había ido a buscar, por una buena razón, pero este le dijo que fuera a su casa no más, causando que el moreno se extrañará pero no dijera nada.

Cuando llegó, el portón estaba abierto y solo entró para luego ir a la casa. Tocó la puerta y de inmediato abrieron. Vio a Michael, haciendo que se desilusionara un poco, ya que quería ver a Jaime.

-El señor Navarro lo está esperando en el cuarto especial.-Dijo Michael ni siquiera saludándolo, siendo muy directo con él.

El cuarto especial no era algo parecido al cuarto rojo de Christian Grey, era lo contrario, había una televisión de noventa pulgadas, unos sillones y bastante espacio que no era ocupado.

El moreno asintió y pasó directamente al segundo piso para luego ir al cuarto. Cuando llegó a este, abrió la puerta y notó que todo estaba casi oscuro, pero aún así podía ver. Había una mesa para dos con platos con comida que parecían recién hechos. La mesa tenía dos velas encendidas en el centro pero todavía no veía al enojón, causando que frunciera el ceño. Donde estaba?

-Te gustó?.-Preguntó alguien detrás de él, causando que se sobresaltara un poco para luego relajarse. Era obvio que era su ex novio.

-S-Sí, bastante.-Respondió Nicolás algo nervioso, sabiendo lo cerca que estaba el enojón de él. De hecho, sentía la respiración de este en la parte de atrás de su cuello.

-Me alegra eso, Nico.-Dijo Jaime todavía muy cerca de él para luego hablar.-Entonces pasemos a la mesa o si no la comida se va a enfriar y sinceramente me costó hacerla.

-Espera, la hiciste?.-Preguntó el moreno bastante sorprendido cuando se acercó a una de las dos sillas. El enojón lo ayudó a sentarse para luego acomodarle la silla. El señor Navarro cerró la puerta para que luego él se sentara.

-Sí.-Respondió el enojón tomándose un momento para luego seguir hablando.-Sé que no cocinaba muchas cosas antes, pero sí sé cocinar.

-Entonces no lo cocinó Javiera ni lo compraste?.-Preguntó el pequeño moreno para luego probar la comida que Jaime había preparado.

-Compré las cosas para la comida pero yo lo hice.-Dijo el señor Navarro con una leve sonrisa, sabiendo que el moreno solo quería molestarlo no más.

-Tuviste que comprar? Tú siempre tenías de todo en tu cocina.-Dijo Nicolás algo extrañado mientras lo miraba.

-Sí, bueno, de esto no tenía.-Dijo el jefe de Kindred Spirits algo rápido y como excusa.

-Estás seguro? Porque estoy muy seguro que había visto...

-No quieres algo para tomar? Creo que iré a buscar agua o algo.-Dijo Jaime interrumpiéndolo para luego levantarse rápidamente y salir del cuarto, haciendo que Nicolás empezara a sospechar algo, pero en realidad no quería pensar mucho en eso.

Cuando Jaime volvió, había llevado dos copas con vino, causando que Nicolás enarcara una ceja. Jaime se volvió a sentar y le pasó una copa para luego colocar la suya en la mesa.

-Sé que a ninguno de los dos nos fascina mucho el vino pero es más de película, no?.-Preguntó el enojón con una ligera sonrisa, más relajado que antes.

-Le da el toque.-Dijo el moreno también con una leve sonrisa mientras observaba a Jaime.-Ahora sí vamos a comer?

Jaime asintió y probó la comida que hizo, para luego darse cuenta que no estaba para nada mal.

-Te gustó la comida?.-Preguntó el señor Navarro observando como su ex novio comía.

-Si me gustó? Me encantó, Jaime.-Dijo el pequeño moreno siendo sincero con él, causando que Jaime estuviera feliz.

-Me alegro mucho, cari... Nico.-Dijo el jefe de Kindred Spirits arrepintiéndose de decir aquello, sintiendo un ligero dolor en su pecho.

El moreno lo miró unos segundos pero cambió de tema.

-Cómo están las cosas en Kindred Spirits?.-Preguntó el ex novio de Jaime algo interesado.

-E-Eh, están bien.-Contestó Jaime evitando un poco el tema.

-Eso no más? Están bien? Debe haber algo más.-Dijo Nicolás algo extrañado mientras tenía el ceño fruncido.

-Hay muchos más socios y estoy pensando en expandirla.-Dijo el enojón evitando unos cuantos detalles.

-Que bueno, Jaime.-Dijo el moreno bastante contento por el recién nombrado.-Y no has olvidado las reuniones y todo eso?

-No.-Contestó el señor Navarro mirándolo un par de segundos para luego bajar la mirada.-Me las arreglo sin secretario.

-Y los socios? Alguno que conozca?.-Preguntó el pequeño moreno volviendo a cambiar el tema un poco.

-Eh, sí.-Dijo el jefe de Kindred Spirits pensando un poco para luego seguir hablando.-Castiel Novak de la empresa "Angel of the Lord".

Nicolás claro que lo conocía. Cas había pasado mucho tiempo coqueteándole al enojón.

-Creí que no lo tendrías de socio.-Dijo el ex novio del enojón con la mandíbula tensa mientras apretaba el tenedor con furia.

-Lo conversamos un par de veces y me convenció.-Dijo Jaime ni siquiera notando lo celoso que estaba el moreno.-Tengo muchos beneficios con Cas, además que somos parecidos en algunos aspectos.

-Ah si? Cómo en qué?.-Preguntó Nicolás mientras tenía los nudillos blancos.

Jaime lo observó por unos segundos, notando que algo estaba mal.

-No creo que sea interesante.-Dijo el enojón queriendo cambiar de tema, ya que Nicolás no se veía muy relajado o complacido con aquél.-Sigues dibujando?

Nicolás se intentó relajar un poco y lo logró.

-Sí, ahora que tengo más tiempo libre, casi es lo único que hago.-Respondió el moreno con un cambio de humor notorio.

-No te faltan lápices ni nada, cierto?.-Preguntó el señor Navarro mirándolo fijamente a los ojos. Siempre se preocuparía por él.

-No.-Contestó el pequeño moreno diciendo la verdad.-Los estoy ocupando con cuidado para que no se les rompa la punta o se les acabe la tinta.

Si Jaime solo supiera que seguía dibujándolo al igual que antes, este lo hubiera besado hace mucho.

Pero hay otra cosa que Jaime sí sabría.