Dulces 18, Alice Parker

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   -¿Que diablos acabas de decir? ¡Pero si estaba contigo!

   -¡Lo se! Pero Randy me llamó, y estaba enojada con él, así que me levante de la mesa para que ella no escuchara él problema y cuando di la vuelta, ya no estaba.

   Mi respiración estaba acelerada, no podía creer la cantidad de problemas y desorden que tenía apenas conocí la familia Anderson.

   Vinimos a este lugar... Sabía que no teníamos que volver... Lo sabía...

   -¡No debí dejarlas solas! -Grité enojada.

   -¡Perdón, esto es mi culpa!

   -No es tu culpa Noa, tranquila. Tenemos que buscarla. Llama a todos, yo intentaré contactarla con el celular.

   -Si, es una buena idea.

   Camine hacia la puerta junto con Noa, tomé mi celular y marqué con manos temblorosas el contacto donde dice "Chelsea". El ringtone aparece, dura unos 30 segundos hasta que el correo de voz inicia. Dejo un breve mensaje y cuelgo de inmediato para seguir llamando. 

   Inconscientemente pensaba que ella contestaría, pero era lógico que no. Noa me esperaba en la salida junto con todos los demás, Sly estaba estresado y molesto, mientras los otros solo hablaban de las mil y una posibilidades.

   -Tal vez se fue con un chico, y ustedes no la dejan en paz - Comenta Vic con cierto tono confiado que intenta fingir.

   -Tal vez, Chelsea es un poco calenturienta -Comento Leo con una ligera sonrisita, pero Sly clavó de inmediato su mirada furica en Leo, y el rubio borró la sonrisa que tenía por una expresión de perrito regañado.

   -¡Simone! ¿Sabes algo? Te contestó? -Dijo preocupada Sarah.

   -Demonios, no -Dije con tono apagado -Es mi culpa, debí cuidarla, estar encima de ella.

   -No es tu culpa Simone, básicamente es de todos. Era la menor y nadie la vigiló como se debía -Dijo en tono serio Sly.

   -Tengo miedo, no quiero pensar que... Ese... -Dije en forma entrecortada al recordar ese nombre que odio.

   -No, no pienses en eso. Owan tiene prohibido venir aquí, mi papá tiene seguridad explícita para él y sus amigos -Dijo Sarah sin dejarme terminar. Ella sabía en que estaba pensando.

   -Si, tienes razón... Estoy siendo dramática y exagerada.

   Luego de un momento, planeamos buscar a Chelsea de una forma distinta, Sly y Sarah se quedarán en el bar, ya que podría ser que ella regresara. Mientras Noa, Victoria, Leo y yo nos dirigiamos hacia la dirección que indicó uno de los guardias, él cual dijo que vio a una chica rubia tomar un taxi y dirigirse al norte.

   Además que la chica estaba usando su celular, estaba hablado por teléfono mientras caminaba. Lo que más me llamó la atención del relato, fue que el sujeto dijo que iba feliz, bastante feliz.

   Chelsea... ¿Qué planeas?

   Vic nos llevó en su auto, yo iba atrás con Leo, mientras Noa estaba en el lugar del copiloto.

   -¿Piensas que Owan la tiene? -Preguntó nerviosa Noa.

  -Para ser honesta, si. Ese sujeto nos odia, y conoce a cada uno de nosotros. Solo espero encontrarla y ver que no tenía razón -Contesté con voz entrecortada.

   Estaba viendo la ventana, pensando en diferentes puntos donde podría estar ella. También diferentes casos que podríamos encontrar, pero todo giraba al rededor de Owan.

Romances color vino (Sin Corregir)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora