Heya. He vuelto con otro capítulo de este fic y seré sincero con ustedes, mentiría si les dijera que sé con exactitud cuántos capítulos le quedan, irónicamente para el final que quiero lograr, aún hay mucha historia de por medio, la cual espero no les aburra. En fin, los dejo con el capítulo.
Imágen genérica porque no encontré una que fuera acorde.
Aun en medio de la noche, cuando la oscuridad cubría toda la ciudad; mientras que algunos de los edificios estaban a oscuras, otros con una que otra ventana mostrando las luces encendidas del interior. Fácilmente un edificio resaltaba de entre el resto. Puertas de cristal y las gigantescas letras ZPD en el frente de la fachada. Las oficinas de la estación de policía permanecían iluminando sus alrededores. Dentro del lugar pese a que si bien era menos activo que en el día, los teléfonos seguían sonando y varios animales uniformados seguían paseándose por los pasillos y la recepción.
Rodeado por cubículos vacíos y oscuros, trabajando desde que había llegado la mañana de ese mismo día. Nick había logrado apartarse de su escritorio cerca de una o dos veces en todo el día. Solo cuando salió a conseguir su almuerzo en la mañana y un café hacía pocos minutos para lograr mantenerse despierto.
-Este lugar es más animado de día- Murmuró con la vista clavada en el teclado, fácilmente podía verse el cansancio en sus ojos sin mencionar la postura que a duras penas lograba mantener –Jamás creí extrañar el trabajo de campo, es menos cansado que esto- Soltó estirando su espalda para luego dar un sorbo a su café.
Pasó horas tratando de juntar todo lo que tenía sobre el Fantasma de Tundratown, todo en vano, un esfuerzo inútil de dar con su famoso ladrón; la única información realmente útil con la que contaba era aquél pequeño vistazo que tuvo de él cuando le robó y aun así no lo ayudaba demasiado.
Nick dio un sorbo a su café para terminar con el mismo y así dar el día por terminado.
-(Suspiro) Hoy no voy a dar con nada, eso es claro- Dijo levantándose de su asiento. Apagó su computador, tomó sus cosas y al salir apagó las luces, ahora toda el área estaba a oscuras, era lógico siendo que animales diurnos y nocturnos trabajaban en zonas diferentes de la comisaría.
Al pasar por la recepción como ya era de esperar, no se topó con el carismático y regordete felino que acostumbraba despedirlo a diario.
-¿Wilde? Vaya, ya son dos en el mismo mes- Escuchó al pasar frente al escritorio de recepción.
-Hola Tania, créeme encontrarme contigo es la última cosa que planeo en mi día a día- Respondió burlón.
-Eso es frío zorro; por cierto escuché que ahora eres padre, ¿Es cierto?- Inquirió con curiosidad.
-Bueno, no gano nada ocultándolo, ¿Y qué si lo soy?-
-Oh nada, ahora veo que las noches de juegos terminaron definitivamente- Comentó con "pesar"
-Terminaron desde el día en que me dejaron solo en el bar- Respondió mientras se iba.
-Ya te dije que eso no fue culpa mía- Le grito Tania desde el escritorio, no pudiendo ocultar una pequeña sonrisa, a lo que Nick simplemente hizo un ademán con su mano al salir por la puerta principal.
Al revisar la hora en su celular se dio cuenta de lo tarde que era ya. Nada menos que las 11:00 PM. Dejó escapar un prolongado suspiro y se maldijo un par de veces al pensar en Keira y por supuesto en Cassie, aunque parte de él sentía gran curiosidad por cómo encontraría su hogar al regresar; tenía firme fe en que su exnovia sabría lidiar con una pequeña niña, además Kei a simple vista parecía ser de lo más tranquila, ¿Qué podría salir mal?
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Zootopia: Algo más que una esperanza
Fanfiction"Es solo una fantasía" Era lo que Judy se repetía día tras día. Su mejor amigo y compañero era un zorro, jamás podrían aspirar a ser más que eso, sin embargo no podía sacarlo de su mente, no podía apartarlo de sus pensamientos, en todo en lo que pen...