f i n d m e | fillie; [TERMINADA]

Antes, como todo comenzó.

Recuerdo que era mi primer día en la secundaria, no estaba nerviosa, para mí era un día común, sólo que en un lugar distinto, con personas distintas.
Ninguna de mis amigas de mi anterior escuela había quedado en la misma que yo, la mayoría dice que nunca me ha gustado formar parte de un grupo de personas, es decir, nunca me ha gustado ser igual que los demás, no me gusta seguir la "moda" -aunque me llamen "Única y diferente"-. No soy una alumna ejemplar, nunca he resaltado en un grupo -obviamente- Sacó calificaciones "aceptables" dirían mis padres, es decir, no me va tan mal. Tampoco he sido una chica problemática.

No hablaba con nadie, estaba sola en el salón y en el receso, tampoco he llamado la atención, no soy muy atractiva o no me veo muy interesante.

Hasta que, unos chicos que parecían ser dos años mayor que yo -iban en tercero, claro- Eran tres, uno de ellos era muy moreno, parecía agradable. El segundo tenía el pelo muy rizado y ojos azules y se notaba su panza (xd). El tercero tenía un color de pelo que no sabría exactamente como describirlo, parecía ser color castaño, era muy blanco y la verdad también era lindo.
Bueno, este grupo de chicos, que parecían ser agradables, se acercaron hacía dónde yo estaba. No sabía cómo reaccionar o que hacer, no sabía si quedarme ahí o irme.
Y, decidí por quedarme -claro- Cuándo estaban frente mío, los tres me sonrieron, y claro, les devolví la sonrisa.

- Hola- dijo el chico de pelo castaño.

- Hola- respondí tímidamente.

- Soy Noah, él es Caleb- señaló al chico moreno- Y él es Gaten -está vez señaló al chico de pelo rizado- ¿Cómo te llamas?

Me tardó un rato en contestar, es decir, por primera vez en mi vida alguien se ha interesado en mí.

- Soy, soy Mille.

- Bien Millie, suponemos que eres de primero ¿Cierto?- está vez habló Caleb, si no mal recuerdo.

- Así es- contesté.

- Bueno, nosotros somos de tercero, excepto Noah, el es de segundo, pero tenemos la misma edad.

- ¿Está repitiendo año?- pregunté.

- No, me salte el preescolar, estoy "adelantado" un año.

- ¿Ohh?

- Lo sé, es raro, pero bueno, oigan ¿Y Finn?-  No son tres, son cuatro ¿Dónde está el otro chico?

- No lo sé, ¿Acaso no era él quién quería venir acá con ella?- respondió Gaten.

Espera, ¿Acaso dijo "No era él quién quería venir acá con ella" ? ¿Será ese tal Finn?

Los miré confundida, realmente no entendía nada.

- ¿Nos esperas a Gaten y a mí? Iremos a buscar a nuestro cuarto amigo, Noah se quedará contigo- dijo Caleb mientras se alejaba con Gaten.

Noah se sentó junto a mí y sonrió, era lindo.

- ¿Qué se siente ser de primero? - preguntó Noah.

- Nada- contesté.

- ¿Nada?

- Solamente siento que cambié de lugar, ambiente y personas.

- ¿Y tus amigos?

- No tengo, ninguno está en esta escuela. Soy la única.

- Ahora tienes cuatro amigos.

- ¿Y el cuarto?

- ¿Dije cuatro? Corrección :Tres.

- ¿Por qué tres? ¿Qué pasó con el cuarto?

- Él...

Noah no terminó su oración, pues Caleb y Gaten habían llegado junto con otro chico -supongo que es el cuarto.

- Él es Finn- dijo Gaten empujando a Finn hacia mi.

- ¡Oye! - se quejó Finn.

- Querías que te llevaramos con ella, lo conseguimos y te vas, te traemos nuevamente con ella y lo único que haces es comportarte como un idiota- respondió Caleb.

- Si, pero, ¡Agh! ¿Pueden dejarme con ella? - dijo Finn, quién para mí, era el más lindo del grupo.

- De acuerdo, aún así nos íbamos a ir- contestó Noah.

- Gracias, adiós, los veo más tarde.

El resto de los chicos se fueron, Finn y yo estábamos sólos, no sabía que hacer con un chico.

- Lo siento por eso, son unos idiotas, por cierto, soy Finn, ¿Cuál es tu nombre?

- Millie.

- Lindo nombre- sonrió - ¿En que grupo estás?

- Primero G.

- Ya veo, yo soy de Tercero E, al igual que Caleb, Gaten es de Tercero D y Noah es de Segundo F, oye, ¿Puedo decirte algo?

- Claro, dime.

- Eres linda, muy linda.

No sabía que decir, era la primera vez que un chico me lo decía.

-Gracias -dije, creó que sonrojada.

-¿Por donde vives?

- Cerca de aquí, mi casa está a dos calles, es la número 23.

- ¿Hablas en serio?

- Ehh, si ¿Por qué?

- Estoy a tres casas después de la tuya, la número 26, claro.

- ¿De verdad?

- Si, así que si algún día quieres, ya sabes, salir o estar con alguien, puedes ir a mi casa, es más, ve directamente al sótano, todo el tiempo estamos ahí.

- ¿Estamos?- pregunté.

- Sí, Noah, Caleb y Gaten van todo el tiempo, es como si vivieran conmigo.

- Wow, gracias- sonreí -Eres muy lindo.

- Gracias, ¿Quisieras venir hoy con nosotros? Los primeros días no te dejan tarea ¿Qué opinas?

- Claro, finalmente, vivimos cerca.

- ¿Y tus padres?

- Llegan hasta tarde, si estoy en mi casa antes de las 10:00 todo está bien.

- Entonces no tendremos inconveniente, pasaré por ti a la última hora a tu salón, ellos normalmente llegan después, sirve de que conoces bien mi casa, y hablamos más sobre nosotros ¿Qué opinas?

- Está bien ,gracias Finn.

- No es nada, vamos, te llevaré a tu clase.

Todo el mundo se nos quedaba viendo, no entendía porqué.
Cuando llegamos a mi salón nos quedamos un rato afuera.

- ¿No vas a entrar a clase?- pregunté.

- Sí, pero llegaré un poco tarde.

- Ohh.

-¿Te puedo confesar otra cosa?

- Claro.

- Realmente creó que la edad no importa, creó que si dos personas sienten algo fuerte deberían estar juntos a pesar de lo que la gente diga, finalmente, es lo que ellos sientan, ¿No crees?

- ¿Por qué me dices esto?- pregunté confundida.

- No lo sé, tenía ganas de decirte lo que pienso, ¿O me equivocó?

- No, lo que dices es correcto.

- ¿Por qué lo piensas?

- Si dos personas están destinadas a estar juntos a pesar de lo que la gente o el mundo diga, deben estar juntos.

-Nos vamos entendiendo- me guiñeo un ojo.

- Bueno, te veo más tarde, recuerda que voy a pasar por ti.

- Okay, nos vemos.