Día tres.

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El día de ayer fue divertido, pues nos pusieron a hacer varias actividades al aire libre, lamentablemente fueron para todos los grupos y obviamente teníamos que convivir juntos, le conté a Sadie todo lo que había pasado ayer en la cafetería y también lo que Finn me había contado respecto a Iris y Talia -realmente se llama Natalia, pero ella prefiere Talia Lauregui-, Sadie me contó lo que sucedió y que realmente fue incómodo, pues solamente hablaron ella y la rubia y que Jack estaba más nervioso en ese momento que cuando hizo su examen se ingresó a secundaria.
Tratábamos de no acercarnos a ellas y estar más con nuestro grupo, Finn siempre trató de estar al lado mío y Sadie con Jack para que no ocurriera algo malo o más incómodo.
Hubieron varias ocasiones en las que casi nos tocaba participar junto a ellas, pero de alguna extraña manera siempre había algo o alguien que lo impedía. Y la verdad no teníamos ningún problema. Aunque tenía la inquietud de hablar con Iris y decirle que podríamos llevarnos bien con ciertas condiciones.

En este momento aún estábamos en la cabaña, teníamos que despertar a las siete el día de hoy y estar diez minutos en la cafetería después de haber despertado. Mientras tanto; yo seguía acostada en mi cama sin hacer nada, no tenía tantos ánimos de levantarme muy temprano.

-Oye, debes levantarte -escuché que Finn dijo en voz baja, probablemente piense que aún estaba durmiendo.

-Lo sé -dije-. Es sólo que no tengo ganas de levantarme temprano.

-Yo igual, pero debemos de disfrutarlo todos juntos... es eso, o que venga un encargado a tocar su horrible trompeta con el himno nacional.

Me levanté de un salto de la cama y me estire.

-¡Ya desperté! -dije más animada. El resto aún seguía o acostados o sentados en su cama, pero creo que yo era la única que aún estaba durmiendo.

Todos salimos en pijama de la cabaña y nos dirigimos hacia la cafetería para obviamente, poder desayunar.
Me había retado a intentar hablar hoy con Iris yo misma,no sé realmente porque tengo esa gran necesidad de hablar con ella.

Entramos a la cafetería y nos sentamos en la misma mesa en la que estuvimos ayer y nos sentamos casi igual.

- ¿Qué desayunarás hoy?- preguntó Finn mirándome.

- Sinceramente no tengo mucha hambre -respondí.

- Más tarde te dará hambre -sonó como mi mamá- Debes comer o tomar por lo menos algo.

- Finn, de verdad, no tengo hambre- lo miré a los ojos y tomé su mano- Comeré más tarde, al menos pediré una malteada.

- Está bien -dijo desanimado- Si te da hambre más tarde yo no te traeré aquí, ¡eh!- reí.

-De acuerdo- sonrió- Iré al baño, no tardaré.

Me levanté de la silla y me dirigí al baño. En realidad no tenía muchas ganas de comer, es normal que en las mañanas no tenga hambre, especialmente si me obligan a levantarme.
Entré al baño y me dirigí a los lavamanos para limpiarme y verme en el espejo para tratar de verme un poco más decente.
Había alguien más en el baño, pues en una de las muchas puertas que habían logré ver unos pares de tenis  (Converse), se escuchó el sonido que hace la taza de baño cuando tiras de la cadena y como abría el seguro de la puerta para salir. Todo eso lo podía ver a través del espejo.
Baje la mirada hacia mis manos mojadas y cuando volví hacia el espejo quien había salido era Iris. Ella también traía pijama y parecía que apenas había despertado. Aún no me veía, pues ella tenía su vista hacia el suelo y cuando la levantó hacia los espejos me miró sorprendida y sonrió, pero no era una sonrisa fingida, era una sonrisa real, bonita, amable y carismática

-Hola Millie -dijo mientras me  veía y se acercaba al lavamanos.

-Hola Iris -respondí amable y con una sonrisa.

-¿Qué tal la primer noche aquí? -preguntó.

-Bastante bien, creí que iba a ser incómodo, pero no fue así -reí- ¿Y tú?

-Estuvo bien -sonrió.

Me di la vuelta para tomar una servitoalla y sacarme las manos, arrugue el papel y lo tiré en el bote de basura.

-¡Millie! -dijo Iris detrás mío.
Di la vuelta para mirarla y seguía sonriendo.
-¿Puedo preguntarte algo?

-Seguro, ¿qué pasa? -respondí.

-¿Te caigo mal?

¿¡Qué!? ¡No! Para nada, es sólo que ayer que nos conocimos me sentí un poco incomoda. Finn jamás me había hablado de ti. Pero no, me caes muy bien -sonreí.

-¿De verás? Espero no haber causado problemas, Talia llega a ser muy irritante -decía nerviosa-. Lo lamentó.

-No te preocupes. Entre tu y yo todo está bien, ¿okay?- ella asintió -Bien, tengo que irme, espero verte más tarde.

-¡Creo que hoy es noche de películas! Tal vez te vea ahí.

-Claro, así será.

Salí del baño y me dirigí nuevamente a la mesa donde estábamos, mi malteada ya estaba ahí y Finn estaba comiendo.

-Ahí está tu malteada -dijo.

-Gracias -respondí -¿Me tardé?

-No mucho -masticaba su sándwich mientras hablaba. Me daba risa cuando hacía eso, se veía tan gracioso. Sus cachetes se inflaban y hablaba gracioso- ¿Había algo en especial?

Volteó hacia la mesa de Iris y ella me sonríe.

-No -respondí mirando a Finn.

-De acuerdo.

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Chicas, lamentó haberme tardado muchísimo. La escuela escuela tiene muy ocupada y espero que por lo menos les haya "impactado" el nuevo capítulo.
Las quiero mucho y nuevamente lo siento.❤

f i n d  m e | fillie; [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora