Overwatch | La Novela

Capítulo 12: Entrenamiento De Ana

—Eso es, así... Mantén la calma... —Ana sujetaba con firmeza el brazo de Amélie mientras esta apuntaba al objetivo de pruebas con un rifle de francotirador de clase C.

—No te pongas nerviosa, que no te voy a comer —le indicó Ana—. Suspira lentamente...

Amélie realizó la indicación.

—Ahora que estas relajada, coge aire y mantenlo en tus pulmones. Un francotirador necesita estar quieto a la hora de disparar. Cuando creas estar lista, dispara.

Amélie apuntó y disparó acertando de lleno en la diana.

Ella misma se sorprendió de su puntería.

—¿Ves? Muy bien. Cuando eres francotiradora, nunca debes perder la calma. Otra cosa muy importante, nunca dudes, dispara al instante.

—Sí señora Amari.

—Ana por favor —dijo riéndose por como la llamó.

—Ah, y a la hora de apuntar, mantén un ojo en la mira telescópica y el otro abierto, para vigilar tu entorno. Algún enemigo podría flanquearte.

—Pero al disparar, sí podría cerrarlo ¿no? Para ser más precisa.

—Exacto.

—¿Práctico ahora?

—Sí. Ahora vuelvo.

Ana avanzó unos pasos observando a cada recluta y corrigiendo sus errores.

—¡Héctor, ponte firme!

—Rachael baja un poco el arma, ten en cuenta el retroceso.

Ana llegó hasta Marcus que ya se había recuperado.
El hombre disparó con una Beretta 9,75. Y dio la mayoría en la cabeza.

—Muy bien, querido.

—He fallado algunos disparos.

—No, no, está bien. Pero eres el líder del equipo bravo, ten confianza contigo mismo. Si has fallado, sigue entrenando, no te desanimes, algún día, llegaras a ser mejor que Jack, que no es muy difícil, por cierto.

Jack estaba justo en la cabina de al lado, usando un rifle de pulsos descargando casi todas las balas en el punto del objetivo. Cuando se quedó sin balas, agarró una pistola y también la descargó.

—Ejem, ejem... —gruñó.

—Oh Jack, es broma, ya sé que tu apuntas bien.

Jack rió.

—Vaya, vaya, Jack Morrison riendo que cosa más peculiar —dijo Gabriel que llegó hasta ellos.

—Gabriel tu tampoco es que te rías mucho, eh —dijo Ana.

—Hoy estoy de buen humor —dijo Gabriel defendiéndose.

—¿Has hablado ya con el presidente? —preguntó Jack.

—Tengo la cita ahora, me parece ridículo que tengamos que esperar para hablar con el presidente Wallestein.

—Es el presidente de los Estados Unidos, es normal que este ocupado.

—Pues para dar permiso a que terroristas interfieran en nuestras misiones sí, eh. Me parece algo grave y que no es de esperar.

—Tienes razón.

—Ya me estoy alterando, con lo bien que me había levantado hoy. Jack podrías acompañarme —le pidió Gabriel.

Jack asintió y los dos hombres se marcharon.