[45] El exámen

9.2K 601 48
                                    

La última semana de clases, era la decisiva para cambiar la nota del examen. Kyle, Cory y Darren se aproximaron rápidamente al despacho del director.

—Solicitamos que castigue a Katherine Muller —dijo Darren.

—¿Por qué haría eso?

Kyle puso los dos exámenes sobre la mesa. El director los tomó entre sus manos a mirarlos.

—Cuando el profesor le entregó el examen a Kyle, él supo que esas no eran sus respuestas.

—De hecho, si lo nota, la letra del nombre en ambas pruebas es la misma —agregó Cory.

El director se rascó la barba mientras miraba la situación. Se quedó pensando y tomaba de su café desinteresado.

—Las notas de Katherine Muller son excelentes, ¿Y si ustedes las cambiaron?

—Prueba dos —interrumpió Kyle— le pedimos al guardia que nos mostrara una cinta, donde encontramos a Katherine husmeando en la sala del profesor antes de que entregaran las pruebas. Justo después de haber sacado una llave de secretaría.

Darren conectó un pendrive al computador del rector, que contenía un video que mostraba exactamente lo mismo que describió el rubio.

—Por último, si se da cuenta, nadie le hubiese creído a Kyle por su expediente y ella casi se salió con la suya —comentó Darren.

—Gracias caballeros, tendré que conversarlo con el consejo estudiantil.

Los chicos salieron de la habitación con una gran sonrisa.

—¿Ves? Lo lograste —dijo Darren dándole un abrazo.

—Deberíamos celebrar con un buen vodka —agregó Kyle.

—Quédate sobrio un rato, ¿Quieres?

Mientras tanto, Derek se encontraba junto a Teddy en el casillero del de ojos azules. Ambos hablaban acerca de lo que hicieron el fin de semana.

—Ted —dijo serio de repente Derek.

—¿Qué pasa?

—¿Cómo se tomaron tus padres... lo de tu homosexualidad?

El castaño se quedó inmóvil recordando aquella dura noche, cuando todo se mezcló en su cabeza. Primero la discusión con sus padres y después el sexo en un estacionamiento.

—No bien, pero tampoco estuvo tan mal. ¿Por qué preguntas? —contestó.

—Estaba pensando... tu ya sabes —hizo una pausa para suspirar angustiado— decirles.

—¿Y qué le vas a decir exactamente?

—Que me gustan los chicos.

Teddy se pasó una mano por el cabello frustrado, no quería que le sucediera nada malo a Derek, pero tampoco estaba mal ser honesto. Además, de lo poco que los conocía podía deducir que se lo tomarían mejor.

—Te puedo acompañar, si quieres —sugirió el castaño.

—No te preocupes, prefiero que sea algo más íntimo, pero te llamaré cuando termine de decirles. Será hoy durante la cena, deséame suerte.

Mis mejores amigos gaysDonde viven las historias. Descúbrelo ahora