[...](Tn)___ Colman
—Maldición—pude soltar observando todo el bosque desde la ventana.
Desde hace unas horas atrás estaba planeando atrapar venados, habían muchos por aquí e incluso comian el pastizal del lugar con mucha cautela, a penas oían algo, corrían y se alejaban lo más rápido posible de mi. El último animal que se había quedado allí comiendo del césped se echó a correr al oír el quejido de un caminante alrededor del lugar.
Cabe resaltar que durante mi corta estadía en la cabaña, había pasado solo un día, un gran y caluroso dia lleno de unos cuántos intentos fallidos de caza. A pesar de todo eso, estar aquí había calmado toda la frustración y confusión que había en mi mente, los problemas se habían disipado mientras me mantenía ocupada haciendo otras cosas.
La caza no se me daba para nada bien, era una de la razones por las que durante toda la pandemia yo me había mantenido simplemente comiendo de latas y frutas que encontraba. Dejé de prestarle atención a los animales y me fui hasta el cuarto de aquella cabaña solo para limpiar la recámara de la pistola que llevaba en mis manos.
Justo en ese instante, el sonido de la puerta rechinando mientras se abría hizo que prácticamente me reincorporase descartando la idea de limpiar mi arma, lentamente y con mucha curiosidad me dirigí hasta la entrada para ver quién rayos se había atrevido a entrar.
Al asomarme solo me centré en su cabello castaño, había crecido mucho más esta temporada, se veía cansado y prácticamente tiró su ballesta al sillón más cercano.
—Por fin te encuentro—pude oír que decía.
—Genial—aclaré con sarcasmo y me acerqué con curiosidad—¿Qué haces aquí, Daryl?
—Te voy a llevar de vuelta a Alexandria—contestó, el ballestero levantaba su cabeza observandome con altivez y serenidad.
—¿Qué?—pregunté mientras lo veía acercarse a la cocina, se detuvo unos segundos examinando el lugar y se sentó en una de las sillas de alli—Yo no quiero regresar.
—¿Por qué no la golpeaste?—su voz serena hizo que me detuviera con confusión.
—¿De qué hablas?
—No me tragué el cuento de Enid, fue muy patético y sé qué eres más fuerte que ella, ¿Acaso no podrías haberle partido la nariz?—pude ver que se detenía a observar el techo y luego colocaba su rostro apoyándolo en su mano—La próxima vez que ella te vuelva a molestar, solo rompele la nariz—solté una risita aún observandolo y me senté frente a él—Deberías enseñarle quién manda.
¿Quién en su sano juicio dice que golpee a otra persona?
—Simplemente
no quería ocasionar problemas—informé resignada—No soy la clase de persona que golpea a otras, deberías saberlo ya.—Lo sé—soltó el hombre carraspeando—Tengo una duda; ¿Por qué escapaste de Alexandria?—me alejé por un instante con la única finalidad de buscar un par de manzanas para ambos—Antes de detenerlas, antes de meterme en su pequeña discusión, pude oír lo que ella te dijo.
—¿Qué oíste?
—La razón por la que estas aquí y no en Alexandria, es por que crees que ella tiene razón, ¿cierto?
—Estás en lo cierto, pero no del todo.
—Colman, tu no eres débil—soltó, aún sin observarlo y tratando de encontrar las manzanas que habia sacado de los árboles hace horas atrás, sonreí recordando lo que Carol había dicho hace meses atrás—Si no fuera porqué Glenn logró convencer a Enid en la ciudad, ella jamás hubiera vuelto a Alexandria—tomé las dos frutas en mis manos y me acerqué hacia el ballestero de nuevo dándole una de estas—Lo que hizo fue una total estupidez, le dió la espalda a una comunidad que antes le había ofrecido ayuda.
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ESDA »Carl Grimes« [TERMINADA]
FanfictionCarl Grimes es un sobreviviente en una comunidad llamada Alexandria, lugar dónde apenas acaba de llegar junto a su grupo. La muerte de su madre aún le sigue aterrando mientras trata de subsistir en aquella comunidad hasta la curiosa llegada de algui...