ADVERTENCIA: Los personajes de Candy Candy, son propiedad de Misuki e Igarashi, usados en este fic, sin fines de lucro.
Historia ficticia. Todos los personajes nuevos, son exclusiva invención de esta autora.
Capítulo VIII
Quinto domingo
Comienzo de semana, y lo típico, clases, clases y más clases, reglas estrictas a las que poco a poco Candy se adaptaba, reconociendo que no era del todo malo estar de interna en ese estricto colegio. Las tardes junto a Terry en la colina era lo que más disfrutaba, y se había percatado al pasar de los días, que no eran los únicos que se encontraban al finalizar las clases, muchas parejas a las que ubicaba gracias a las descripciones del castaño, buscaban la manera de verse entre clases y cada una de ellas tenía su propio lugar de encuentro "clandestino". Candy no sabía si las monjas no se daban cuenta o simplemente hacían la vista gorda-- pero eso que importaba-- se decía la rubia, lo importante era poder encontrarse con Terry.
Candy con todo y lo despistada que era, había notado que Stear y Cinnia estaban avanzando en su relación, de ser buenos amigos, habían avanzado al siguiente nivel, Stear cortejaba a su amiga y Cinnia aceptaba los avances del inventor, se les notaba en sus ojitos al mirarse.
El día martes se encontró con una muy grata sorpresa, el Taller de Teatro y Expresión Corporal se impartiría en forma mixta pero no solo con su nivel de estudios como era en la clase de Francés, sino que con todo el colegio, al igual que Relaciones Sociales y Equitación los días viernes, ¿a qué se debía esta nueva reforma en un colegio tan estricto como el San Pablo?, la respuesta es sencilla, los padres del alumnado veían que los tiempos estaban cambiando y que era muy necesario que los jóvenes compartieran momentos juntos como para socializar y conocerse. En una de las últimas reuniones de padres, las ideas reformistas fueron puestas en el tapete por padres algo más liberales en su pensamiento, especialmente franceses, italianos y los americanos, que vivían una cultura un poco menos rigurosa que en Inglaterra. Ellos aportaron ideas vanguardistas de vida en sociedad, dejando claro a las monjitas, que los chicos al salir al mundo real una vez terminaran de estudiar, se encontrarían con el sexo opuesto en casi todas las actividades de la vida, no podían seguir viviendo como en el 1800. Las monjas tomaron todas las ideas y presentaron el proyecto de clases mixtas, que los padres de los alumnos apoyaron en su gran mayoría, para muchos de ellos que también habían estudiado en el San Pablo, las ideas aprobadas por las religiosas eran muy bien recibidas, ya que más o menos comprendían que para las monjas era tarea difícil, además, se incluirían al plantel profesores laicos para facilitar el aprendizaje
--Clase de Teatro y Expresión Corporal-- decía Candy a sus dos más allegadas camino del salón donde se impartiría la clase
--Sí-- respondió Patty-- el año pasado trabajamos la obra Romeo y Julieta, pero como a mí la actuación no se me da, participé detrás de bambalinas ambientando con mi violín
--Igual debe haber sido maravilloso participar-- agregó Cinnia siempre tan positiva
--Lo que sucede es que de una manera u otra, todo el nivel debía participar-- dijo Patricia-- si por mí fuese, me quedo estudiando en mi habitación o la biblioteca
--Será entretenido-- dijo Candy cuando llegaban al salón
--¡Pero qué cantidad de alumnos!-- exclamó Patricia sorprendida
--Parece que todo el colegio está en este salón-- decía Cinnia
--Miren, ahí están los chicos-- apuntó Candy hacia Stear y Archie, y sin perder el tiempo las dos rizadas se dirigieron hacia los hermanos Cornwell dejando rezagada a una ruborizada Patty que demoró en tomar la decisión de avanzar
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Amor adolescente
FanfictionCandy conoce a Terry en Nueva York, antes de embarcarse para Londres.