Quiéreme

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ADVERTENCIA: Los personajes de Candy Candy, son propiedad de Misuki e Igarashi, usados en este fic, sin fines de lucro.

Historia ficticia. Todos los personajes nuevos, son exclusiva invención de esta autora.


Notas de la autora:  Aquí les dejo otro capítulo a mis lectoras fantasmas.  Dejen sus mensajitos, me siento sola sin ellos.

Capítulo X

Quiéreme

Las clases se seguían impartiendo en el estricto Colegio San Pablo. 

 Las chicas presentaron su trabajo de literatura siendo felicitadas por su buen trabajo en equipo.

El día anterior después de las clases, Elisa se encargó de llenar la cabeza de Annie, de falsas esperanzas que la tan caprichosa, se creyó

--El es muy apuesto, ¿verdad?-- decía Elisa tratando de llevar a Annie al tema, Terry

--En extremo Elisa. Jamás vi un chico mas buen mozo y varonil que él. Estoy que no puedo creer que sea novio de Candy-- decía con evidente cara de desagrado

--Nadie sabe como pasó--   Elisa hablaba con cierto dejo de por qué a Candy sí y a mí no-- cuando Candy llegó al colegio ellos ya eran novios. Pero Annie-- dijo Elisa entrando en el campo de envenenar a su "amiga" de América-- no creo que eso dure mucho

--¿Por qué lo dices?-- preguntó Annie con interés

--Ellos son muy distintos-- dijo Elisa sentándose en su cama-- Candy una recogida del hogar de Pony, sirvienta de establo, maneras algo... como decirlo, poco femeninas y él, un aristócrata inglés, educado para ser el próximo Duque de Grandchester, conectado directamente con la realeza...

--¿Es noble?-- inquirió Annie.  Aunque la noticia le impactó de momento,  no lo demostró, había aprendido a guardar sus emociones delante de aquellos a los que consideraba peligrosos, y Elisa estaba dentro de ese rango

--¿Cómo?, no lo notaste-- habló la pelirroja mirando a Annie con extrañeza-- el porte aristocrático, su prestancia y maneras, su comportamiento al saludar, etcétera...

--Es que no me lo esperé, solo me limité a observarlo-- habló  Annie recordando que a ella no la saludo con mucha caballerosidad

--Observarlo fue poco, amiga, casi que te lo comes con los ojos-- dijo burlona Elisa-- pero como te decía, no creo que duren mucho, ella no es chica para un noble

--¡Claro que no!, ella nunca podrá llegar a ser una dama como nosotras-- apoyó Annie en medio de risas burlescas dirigidas a la pecosa

--Si quieres alcanzar esa meta, el chico puede ser tuyo--   comenzó a entrar en tierra derecha la pelirroja--    solo tienes que sacar a Candy del camino-- aconsejó Elisa

--¿Tú crees que yo tenga alguna oportunidad?-- dijo Annie algo dudosa

--Mírate al espejo Annie-- Elisa la tomó de los hombros y la enfrentó con su propia imagen-- eres una chica de estatus, buenos modales, es más, finos modales, conoces de protocolo, comportamiento, eres bella, no te falta nada...-- Annie que miraba su reflejo en el espejo de vanidad que había en la habitación, aceptaba sin dudar las palabras de Elisa-- te das cuenta Annie, ella nunca siquiera se acercaría a lo que tú eres, siempre bien vestida, bien peinada...

--Pero Candy es muy linda-- titubeó la pelinegra

--Puede que sea bonita, pero te has fijado que ahora lleva el cabello suelto, eso no es de buen ver, tenemos que ser recatadas en nuestras maneras, y ella está pasando por alto muchas cosas que en la nobleza son importantes

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