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Por la mañana, de camino a la Galley-La, Perona buscaba un tema de conversación para calmar la tensión que Zoro proyectaba en ese momento.
→Hace unos días, el Almirante Garp y Dragón-san incrementaron el fondo económico de Mugiwara. Lo hicieron por separado así que los dos pusieron distintas condiciones. Pero sabes que mi jefe es bueno en lo que hace, ¿verdad? Encontró en punto medio entre los dos contratos y te lo explicará cuando lleguemos... ←Sonrió confiada.
Pero Zoro no escuchaba. Tenía la mirada perdida en algún punto, demasiado distraído para escuchar, por supuesto que se preocupó por él.
→ ¿Hay algo de lo que quieras hablar? ¿Es por la cocinera, verdad? ←Zoro la vio con desconcierto y muy molesto pero ella no se inmutó→. ¿Te rechazó? ¡Te rechazó y se quedó con los cuchillos de ciento cincuenta millones de berries!
→ ¡No te metas en los asuntos de los demás! ←Reclamó el otro alterado.
→ ¡No me grites! ←Replicó ella enojada→. ¿Qué tiene de malo preguntar cuando me preocupo por ti... Idiota...?
→No tienes que hacer eso... ←Dijo Zoro más tranquilo.
→Es que... ←Murmuró Perona sonrojada→. A falta de algo más interesante, he decidido ayudar a Kumashi en sus problemas amorosos... ¡Horo, horo, horo...!
→No voy a confiar en ti... ¡Y no son problemas amorosos!
→ ¡Hace unas semanas te di seis millones de razones para confiar en mí! ¿Lo olvidaste?
Zoro recordó el préstamo que también Perona le hizo para completar el precio de los benditos cuchillos de Wano. Y luego... la horrible y decepcionante verdad de la identidad de San-chan... Volvió a deprimirse.
→Me parece que con ese favor, me he ganado el derecho a saber lo que está pasando. ¡Horo, horo, horo...! ←Proclamó con victoria.
→Si te lo cuento... ¿me perdonarás esa deuda? ←Dijo Zoro sacando ventaja de su secreto.
Ella lo vio sorprendida. Su primera reacción fue negarse a perder esos seis millones de berries, pero le intrigaba tanto saber la causa por la que el Demonio Verde había caído en tal depresión... ¡Seguro que no era cualquier cosa!
→ ¡Argh! ¡Soy una tonta! ←Gritó a media calle para luego respirar profundamente→. Está bien, si me lo cuentas todo, ya no trendrás que pagarme nada...
→Eres una chiquilla chismosa... ←Dijo el Abogado con tono burlón.
→ ¡Entonces olvida el trato y pagame ya! ¡Horo, horo, horo...!
→ ¡Prefiero contarte todo! ←Aceptó Zoro angustiado sabiendo que no tenía ni un centavo en los bolsillos. Sin embargo estaban por llegar a la Galley-La→. Tendrá que ser después...
Cuando entraron a la oficina, Mikhawk ya los esperaba con el semblante de siempre, pero se remarcó más el enfado al ver entrar a Zoro.
→Hablemos en mi oficina... ←Le indicó el camino al muchacho con la voz más tétrica que de costumbre.
Y Zoro sintió al boca seca por la incertidumbre pensando que hubiera sido mejor quedarse un día más encerrado en su departamento.
Pasaron un par de horas encerrados y Perona estaba ansiosa desde su escritorio. Cada minuto que pasaba se angustiaba más por no percibir sonido alguno porque con Mikhawk, esa era una mala señal, su fama lo presidía. El temible Taka no Me, era conocido por dar sus mejores batallas en la corte sin levantar la voz. << Sigiloso y certero >> Decían sus rivales.
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Loguetown 1: Zoro x Sanji.
FanfictionLa vida tranquila y rutinaria de la ciudad se ve interrumpida cuando el mundo se llena de grandes coincidencias al rededor de dos vecinos orgullosos del edificio Kokoyashi... Disclaimer multimedia: Todos los derechos resevados para sus respectivos c...