Corazón De Demonio [Kakashi Hatake]

Objetivo: Sharingan 1/3 [Un recuerdo]

En las oscuras instalaciones de Raíz, Atsuko se encontraba durmiendo, pero no del todo tranquila, una pesadilla había invadido sus sueños, o mejor dicho, un extraño recuerdo.

Ante ella estaba una horrible escena que nunca creyó ver, era algo que no olvidaría jamás en su vida, sus ojos negros contemplaron a su propio padre con una extraña aura negra traspasando el pecho de su madre, un escena sangrienta y traumante.

- ¡¡Whaaa!! ¡¡whaaa!! - lloró una recién nacida en los brazos de Asura, Atsuko se vio a sí misma en el día que había nacido.

- Nazaki sensei... - susurró Asura con un nudo en la garganta al ver la sangre de Nazaki manchada en su ropa.

Dezaki después de decir unas palabras, quitó su mano del pecho ensangrentado de Nazaki y la abrazó una última vez, pero la castaña ya había muerto, la recostó en el suelo y le dio una leve caricia en la mejilla.
Dezaki se sentía tan triste y culpable que tardó minutos en notar las heridas de su propio cuerpo, el aura negra había quemado su piel, sus heridas eran graves.
Lentamente alzó la vista para ver a Asura, quien sostenía en sus brazos a la bebé recién nacida.

- A-aléjese de mí - dijo la pelinegra con temor después de lo que había presenciado.

Dezaki se puso de pie y se acercó a Asura quien estaba totalmente asustada, simplemente le quitó a Atsuko de sus brazos - ¿Qué es lo que va a hacer? - preguntó Asura preocupada.

- Atsuko... - murmuró Dezaki observando los ojos de su pequeña hija, ojos de color café como los de su amada - No puede ser...

- Devuélvamela, es sólo una bebé - pidió Asura preocupada por la hija de su sensei.

- No nació con el yamigan - Dezaki estaba con el corazón roto - No te puedo perder, no a ti Atsuko... tu madre te defendió con su vida, tú mereces vivir pequeña.

- ¿De qué está hablando? - preguntó Asura prestando atención a las palabras del pelinegro - ¿Por qué dice eso?... ¿hay algo malo con la bebé?.

- Atsuko... no nació como debería - intentó explicar el pelinegro viendo a su hija - No vivirá mucho tiempo.

- ¿De qué está hablando? - Asura no podía creer lo que estaba escuchando - ¡Usted tiene que hacer algo! ¡debe salvar a su hija! - pidió la niña desesperada.

- Voy a hacer... lo último bueno en mi vida - respondió despacio, pues aún estaba herido - No te preocupes... Asura - Dezaki se alejó débilmente con Atsuko en sus brazos sin importar que su cuerpo se estaba desangrando a cada paso que daba, sabía que le quedaba poco tiempo, pero aún tenía algo por cumplir - Atsuko... perdóname por haberle hecho esto a Nazaki, para pagar mi error, te entregaré lo último de poder que le queda a nuestro clan - murmuró sosteniendo a Atsuko en sus manos manchadas de sangre mientras seguía avanzando.

- ¡¡Whaaaa!! ¡¡whaaaa!! - la bebé no dejaba de llorar.

- No llores Atsuko, no llores, todo estará bien, yo te salvaré... - llegaron hasta las ruinas de la cabaña, y en medio de los escombros se encontraba el cuerpo de una jovencita - Hazuri... - susurró el pelinegro recostando a su hija cerca del cuerpo ensangrentado de su amiga - Akai Yamigan... - sus ojos se oscurecieron pero sus pupilas se tornaron rojas - Ahora, el poder de Hazuri será tuyo... - colocó sus manos sobre el ojo derecho de Hazuri y de ésta salió un aura oscura y redonda - Este será... tu yamigan - colocó el aura sobre el ojo derecho de Atsuko - Esto es tuyo ahora... - el aura entró en el ojo de la pequeña.