Por Tu Sonrisa ©

Capítulo 16

— ¡Christine! —me saluda Manuel mientras deposita un beso en mi mejilla

— ¿Y cómo te sientes? ¿Seguiste mi consejo? ¿Ya lo vas olvidando? ¿Como ...

Pongo mi mano en su boca para impedir que siga con su interrogatorio y recibo un mordisco en la mano.

— Caníbal —me quejo mientras me miró la mano

— No me dejaste seguir, sabes eso es de mala educación. Y aún no respondes mis preguntas, ¿quieres que siga?

Niego rápidamente.

— Me siento bien, no hay mucho que pueda decirte. Seguí tu consejo y dejarme decirte que eso nunca será lo tuyo, es más ahora tendré que hablar con ese pobre chico y explicarle que no me interesa en lo mínimo. Eres un asco dando consejos, no vuelvo a hacerte caso.

Se suponía que debía buscar a un chico y salir con él hasta lograr sacarme de la cabeza a Theo, pero mis intentos son en vano, ya van dos chicos con los que he tenido citas y a los cuales les he tenido que decir que no me interesan, y sus caras de odio son de lo peor. Yo no he querido hacerles daño, sólo quiero sacarme de la cabeza a ese jodido idiota de ojos verdes, pero todo es tan difícil.

Por eso me di por vencida, no pude enamorarlo y mucho menos olvidarlo. Lo mejor es que corte todo de raíz, darme un tiempo para mi sola y esperar.

Lo único que me alegra es que por lo menos logre ver una sonrisa de Theo.

— Cambiando de tema, Theo me dijo que su novia quería conocerme.

Hoy en el almuerzo los chicos no podían parar de hablar sobre lo maravillosa que es Grace ¿qué le ven?

Incluso mi mejor amiga se está haciendo amiga de esa chica.

— ¿Y lo harás?

— Todos dicen que esa chica es de lo más adorable, hasta la comparan con un ángel. No sé si quiero ir ¿qué tal que la chica sea de esas hipócritas de primera? Pero si no voy todos dirán que soy una insensible con la chica. No sé qué hacer.

— Cuando dices todos te refieres a Theo ¿cierto? —pregunta y hago una mueca

Y ni hablar de cómo he tratado a Theo en estas dos semanas, cuando le habló he sido de lo más cortante por consejo de Manuel, que no me ha ayudado en nada. Es más, creo que ya hasta Theo me tiene cierto odio, su mirada ahora es diferente a todas las que le he visto en estos cuatro meses.

Todo tiene sentido, ella le habla mal de mí y por eso Theo está portando así. Y más la estupidez que hice al tratarlo de esa forma, Dios no quiero ni saber la cantidad de cosas que le pudo haber metido esa chica en la cabeza a Theo.

— Pensándolo bien tal vez pueda ir, es fin de semana y tengo tiempo libre.

Mi hermano se encoge de hombros.

Le envío un texto a Thomas preguntándole por el lugar donde se encuentra la chica.

— ¿Que puedo llevar como presente?

— Flores, no se ya eso es cosa tuya. Luego estas diciendo que quieres matarme. —dice mientras se levanta y huye de mi habitación

Tomo un baño lo más rápido posible y me dirigí al closet por algo de ropa.

Un vestido, otro vestido, una falda, una jardinera. ¿Dios donde están mis jeans? Ha estado lloviendo y no es posible que salga en falda, de seguro se me pega una neumonía.

Luego de cinco minutos buscando como una loca entre la ropa encuentro mis jeans y pensando en el frío que debe estar haciendo afuera me pongo una camiseta y encima un suéter más un abrigo.