— ¡Gane! —grita victorioso Adam
Los chicos están haciendo una carrera con unas sillas de ruedas –las que utilice a lo largo de mi recuperación luego del accidente –, chicos contra chicas.
Me extraña que Sophia este participando ya que por lo general estaría sentada quejándose de lo infantil que son los jugadores en este caso: Adam, Thomas, Andre, Astrid y ella.
Por otro lado, Grace y Christine están muy unidas, como si se conocieran de toda la vida.
Hace ya unas semanas que Grace me terminó y no pienso decir que estuve lamentándome o tratando de volver con ella porque fue algo que no hice, cuando ella me dijo que quería terminar fue muy poco lo que sentí, no me lastimó, no sentí ganas de reparar las cosas y tampoco me sentí triste, no sentí nada luego de haber podido asimilar de una buena forma sus palabras.
Como si de un momento para otro lo nuestro ya no me importara y cuando hablé con Lukas su respuesta fue lo que había pensado por un momento, pero me negaba a aceptar; ya no la amo, le tengo afecto y eso no se puede negar, nunca se deja de querer a alguien de un día para otro, pero lo que siento por ella es cariño, un cariño de amigos casi hermanos.
Cuando quise saber cuál era la razón por la que ella me estaba terminando su única respuesta fue "luego me lo agradecerás "cosa que no comprendí y luego de eso no volví a preguntar más.
El clima de hoy es perfecto, el sol brilla en el cielo dándonos un poco de calor sin excederse y se puede sentir la presencia de una leve brisa.
Los chicos se separan y comienzan a caminar hasta donde yo me encuentro.
— ¿Juegas? —pregunta Adam
— No gracias, estoy cómodo aquí.
— ¿Qué haces mirando hacia allí? —pregunta Thomas señalando en donde se encuentra Grace y Christine
— Nada, sólo estoy mirando. —respondo sin apartar la vista
Thomas me da una palmada en la espalda y se acomoda en el asiento que se encuentra al lado mío.
— ¿Dime que se siente tener a la chica que amaste y a la chica que amas en el mismo lugar? Por cierto, luces un poco acosador.
Me giro hacia Thomas y lo fulminó con la mirada.
— No lo sé, pero podrías decirme tu que se siente. —le respondo con un marcado tono de malicia recordando cuando estuvo "enamorado" de Sophia y pretendía salir con ella, gracias a él cielo sólo fue cosa de unos días y no llegó más lejos
— ¿A qué se refiere Theo? —pregunta Astrid y me alejo del lugar dejando a Thomas con un gran lío, hasta donde tengo entendido Astrid es un poco celosa.
Camino hacia el otro lado del jardín donde hay algunas flores – rosas rojas y blancas, algunas orquídeas y girasoles – sólo las favoritas de Mamá, a veces me asombra todo lo que puede llegar a hacer Papá por ver una sonrisa de Mamá, él se vuelve un completo idiota cuando está Mamá, no encuentra la forma de hacerla feliz y no comprendo cómo es capaz de hacer tantas locuras.
No recuerdo que alguna vez haya hecho tantas locuras por Grace.
Al llegar a donde se encuentra Christine y Grace ambas guardan silencio.
— ¿Sabes lo que me contó Chris? —me cuestiona Grace y niego
Con Grace había quedado como amigo, después de todo ninguno de los dos quiere perder tantos años de amistad.
— No tengo idea ¿qué te dijo acaso?
Christine le hace una señal para que no hable. No obstante, conociendo a Grace sé que no se piensa callar.
ESTÁS LEYENDO
Por Tu Sonrisa ©
RomanceNadie en el Instituto ha visto a Theo reír o tan siquiera mostrar una sonrisa de cortesía. El problema es que ella se enamoró de Theo. De su frialdad, de su mirada intensa, de su voz. Pero el tan siquiera le ha dirigido la palabra. Christine quiere...