Capítulo 32

3.2K 171 21
                                    

-¿Adrien?

-No.

-¿Andrew?

-Es lindo pero no me convence.

- ¿Sebastián?

-Ya lo usan mucho.

-¿Ian?

- Me gusta... Pero no se, sigue sin convencerme totalmente. ¿Y si pensamos en los nombres para niña? Tengo uno en mente, quizás no te guste pero pienso que sería lindo.

Terminó de tachar los nombres en lo que dejó que Chris hablé.

-Dime el nombre que tienes en mente.

- Es Grace se que quizás no te guste y duele un poco pero lo pensé, en serio lo pensé mucho y llegue a la conclusión de que sería un lindo homenaje a la persona que nos ayudó a estar juntos ¿no creés?

-Si sería lindo, sería un lindo homenaje. Si te gusta ese nombre no estoy en desacuerdo, amor.

(...)

- ¿Te sientes bien?

- Si, sólo fue un mareo.

- Bueno como te dije, me entere de tu embarazo y me pareció algo lindo invitarte a comer y dar un paseo.

- Gracias Ethan pero no estoy interesada, tengo un compromiso con Theo.

- ¿el papá del bebé? El siempre esta ocupado de seguro te llamará para cancelar, así como lo hizo hace unos días y terminaste yendo sola a casa, mejor ven conmigo y luego te llevó a tu casa. Es más seguro para los dos.

Vale eso daba miedo, estoy segura de que estaba sola cuando salí hace unos días al estacionamiento mientras esperaba a Theo y luego recibí su llamada diciéndome que no podría ir por mi, una emergencia en el hospital era la causa pero realmente no me molestaba.

Ser doctor no es algo tan fácil.

- ¿Tú cómo sabes eso? Estaba sola

- Emm... Iba pasando, te vi me acerque y alcance a escuchar cuando dijiste que podrías irte sola. Me preocupe un poco así que te seguí para asegurarme de que llegarás bien.

- Vale, gracias pero pudiste acercarte y hablarme. Eso de seguirme da un poco de miedo.

- Tranquila no te haré daño, sabes que te quiero ¿no?

Vale, esto se empezaba a tornar un poco incómodo para mi.

- Lo mejor es que me vaya. -camino en dirección a la salida de la universidad.

Escuchó unos pasos detrás de mi y supongo que es Ethan por lo que apresuró el paso, a decir verdad me daba cierto miedo y me incomodaba mucho pero por más que se lo decía no había forma de alejarlo. Tenía unos cambios de humor que no eran muy normales aparte de su continuó acoso hacia mi y su intento de hacer quedar mal a Theo.

Sacó mi celular y encuentro un mensaje de Theo.

"Llegó en 10 minutos, te quiero" 6:32 pm

Ya eran las 6:45 por lo que sólo me limitó a esperar mientras como unas galletas que tenía en el bolso.

- Toma, el bebé necesita alimentarse bien. -Ethan tenía una sonrisa en el rostro mientras me alargaba una botella de jugo de manzana, mi favorito.

- Gracias pero no debes preocuparte por mí, ve a casa ya casi se hace noche y puede ser un poco peligroso.

- ¿Y dejarte aquí? En absoluto, me quedo contigo hasta que llegue tu chico.

Caminamos hasta una banca y tomamos asiento.

- Gracias por acompañarme pero no es necesario, ve a casa Ethan.

- Es peligroso para una chica.

- El que sea chica no significa que no sepa defenderme, idiota.

- Lo siento, Christine. No quise decir eso, solo que en tu estado me parece peligroso.

- Una embarazada se puede defender también.

- Vale, me quedo porque me parece buena tu compañía.

Supongo que me he sonrojado un poco así que trato de no verlo a la cara, me sentía incómoda.

Media hora después.

- Tal parece que no llegará tu chico, vamos y te llevo yo.

- Está bien... -no me convencía mucho pero ya estoy cansada y solo me interesa llegar a casa para poder dormir, después de beber el jugo empece a sentirme algo adormilada.

Ethan.

Christine estaba en el auto y tan pronto como empecé a conducir el sedante hizo efecto, obvio lo había puesto en poca cantidad y por su demora en tomar el jugo había sido un proceso que tardo más de lo esperado pero todo valdría la pena, con tal de tener a mi hermosa Christine de vuelta.

- No entiendo por qué me cambiaste, soy guapo, inteligente, quizás era un poco retraído en el instituto pero he cambiado... Después de que me dejaste cambie por ti y ahora que estamos juntos sin el idiota de Theo, podremos ser felices. Me haré cargo de tu hijo, será mío también.

(...)

- E-ethan... -la voz de Christine se escuchaba algo adormilada.

- Hola cariño ¿te encuentras bien?

- ¿Dónde demonios estoy y por qué estoy atada de pies y manos?

- En nuestra casa, aquí viviremos felices y sin que nadie se interponga en nuestro amor. Si gustas te quitó las ataduras pero debes prometerme que no te portaras mal, no quieres que algo le ocurra al bebé ¿cierto?

- A él no le hagas nada y Theo me está buscando, estoy segura de ello. ¿Crees que no empezara a buscarme cuando no me encuentre en el campus?

- Y tú ¿acaso crees que él irá a buscarte? En estos momentos él está descansando y cree que fuiste a una conferencia en otra ciudad, para cuando se de cuenta estaremos muy lejos, amor.

- ¡No me digas amor!

- Te acostumbraras, ahora bebé un poco de agua y come. Debes cuidarte, por el bebé.

Le acercó un vaso con agua y una pajilla pero solo me gira la cara en negación.

- ¿Cómo se que eso no tiene algo que me haga daño?

Bebo un poco del agua.

- No te haré daño, siempre y cuando colabores.

Dejó la bandeja con comida en la mesa de noche y me acerco para desatar tus manos y pies.

- Yo te quiero, estoy lo hago por nuestro bien. Si él no hubiera aparecido en estos momentos estaríamos bien. - recibo una bofetada por parte de ella apenas desató su mano derecha y la tomo del rostro, sus ojos se cristalizan pero el enojo del momento hace que no me importe. - Te dejare pasar esto pero será la primera y última vez, no me obligues a desquitarme con eso que tienes dentro, Christine.

- Eres un cerdo, un asco.

- Perfecto, el día de hoy no comeras.

----

8/11/2018

Por Tu Sonrisa ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora