Habitación 503 (# 2 Temporada) EN EDICIÓN

Capitulo 64: " Ley de Murphy"

Amber PoV

Me retuerzo entre mis sabanas sin querer abrir los ojos, el cuchicheo a mi lado no me da paz por lo que frustrada resoplo y abro los párpados sobre saltándome ante las dos figuras al pie de mi cama.

—No son tan lindos como para verlos al despertar — Mi voz definitivamente los coge por sorpresa por lo que abren más los ojos.

— ¿Nos has oído? — inquiere Jase frunciendo el entrecejo

— Solo su molesto murmullo, como las voces de los adultos en el programa de Charlie Brown — Emily da un pequeño suspiro — ¿ Qué ? ¿Acaso estaban teniendo sexo oral?

Ambos se miran entre si, mientras Emily chasquea la lengua

— ¿Sabes lo que es el sexo oral? — La castaña se ve graciosa con el dejo de rubor en sus mejillas. Resopla corriendo un mechón de su cabello detrás de la oreja.

— Bueno, eso. Decirse obscenidades y ponerse todos cachondos — sonrio de forma incomoda mientras mi hermano se frota la cara.

—Vale, es tu hermana y se ve que nunca ha tenido la charla. Suerte con ello — la chica palmea la espalda del pelirrubio y se retira de mi habitación. Jason se frota las manos y se retuerce en su lugar incómodo mientras yo le observó expectante

— El sexo... bueno sabes lo que es ¡Mi mejor amigo se acostó contigo! — me cubro el rostro con ambas manos saliendo de la cama sin ver, golpeo mi pie con un mueble, reboto contra la pared mientras intento no oír las palabras que brotan de la boca de ese chico por amor a dios ¡Que me deja un trauma! — Y es cuando uno pone la boca en las "cositas " del otro

— Santo Dios este trauma supera a cuando vi a la abu Edwon tirarse a un anciano del asilo aún no lo olvido — un escalofrío recorre mi cuerpo y me sacudo.

— ¡Esa anciana es definitivamente mi ejemplo de vida!

***
Tarareo una canción que escuche esta mañana en el móvil de Emily, muerdo la parte posterior de mi lápiz en una de las mesas del campus. Gracias al cielo el clima comienza a mejor y puedo sentarme aquí a resolver algunos problemas de la clase de filosofía sin ser molestada.

— ... la gente se enamora de formas misteriosas, quizás solo con el tacto de sus manos — levanto la vista ante la voz que termina de completar la canción y dejo salir una risita observando su mano sobre la mía.

— Bueno Alex, diré que en tus tiempos libres de residente eres un fanático de Ed Sheeran

— Me declaro culpable — sus ojos azules brillan risueños y no puedo evitar reír, el pelirrubio se balancea sobre sus talones apartando los pequeños mechones claros que caen ante sus ojos. — Solo estaba de paso por aquí y me pareció verte. Creí que sería lindo saludarte

— Me asombra que aún consideres lindo saludarme después de nuestro último encuentro — frunzo el entrecejo recordando el golpe que Marcus le dio y entonces me sonrojo cuando el beso pasa por mi mente. Su localizador comienza a sonar como loco y lo mira de repente.

—Creo que el deber me llama, así que me iré literalmente corriendo aunque antes quiero recuperar algo que es mío — se inclina sobre la mesa y aguanto la respiración viendo cómo se aproxima a mi. El contacto de sus labios sobre los míos es suave y ligero sin embargo no sé que decir — Gracias por devolver mi beso robado. ¡Nos vemos pronto!

Me quedo estática en el lugar unos cuantos segundos, llevó mis dedos a mis labios por instinto y doy un salto en el lugar cuando la figura a mi lado se retuerce hasta acomodarse en la banca.

— Alex candente médico  Sullivan 1 Marcus película de Adam Sandler Powell 0 — Emily le da un mordisco a la barra de cereal y me observa fijamente — Quizás fue un poco cliché pero debes admitir que el doc está para comérselo

— Si sabes lo qué pasó ayer ¿Cierto? — asiente — Y sabes que el chaval con el que salía hasta hace cosa de un mes tiene amnesia y es tu hermano ¿Verdad?

— Eres joven amiga ¡Vive la ley de Murphy! — enarco una ceja

— Esa ley tiene que ver con la de la mala suerte bestia. Si algo puede salir mal, va a salir mal — ruedo los ojos al tiempo que me recojo el cabello en una coleta. Inconscientemente barro el campus entero con la vista, no he visto a Marcus en todo el día de hoy.

— Bueno, en ese caso también aplicas pero quiero decir, podrías probar la teoría de que un clavo saca a otro clavo.

— Definitivamente no — tomo mis apuntes y me pongo de pie, Emily me sigue el trote rápidamente. Es la hora del almuerzo por lo que los pasillos de la residencia se ven en su mayoría vacíos.

— Mira, mi hermano está siendo un capullo y no mereces que tú estés ahí estancada y llorando por él. Alex parece un caballero, no digo que tengan una noche en el cuarto rojo del señor Grey sólo digo que podrías conocerle.

La tensión eléctrica parece ir y venir durante unos instantes las luces parpadean, la puerta del baño comunitario se cierra de golpe y me siento como dentro de una película de terror durante unos minutos. Si, jodidamente he dormido mal y eso me tiene a mal traer. Emily y yo nos apresuramos a subir por las escaleras cuando una figura imponente cierra nuestro paso. Ray

— Tiempo sin verte, bonita

—¿Recuerdas lo de la ley de murphy? — los dientes de mi amiga se aprietan cuando habla pegado a mi oreja — pues yo creo que aplicas aquí