Esposo de un mafioso || 19 DAYS || TIANSHAN

Clases prenatales

Hola chicos, hoy les traigo un capítulo feliz para que se contenten un poco.

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Ya ha pasado una semana desde que He Cheng despertó y las cosas parecían ir bastante bien entre ese par, claro, las heridas y el dolor seguían ahí, pero se estaban esforzando por salir adelante juntos, al menos el tiempo que el cuerpo de He Cheng aguante.

Pero desde el punto de vista de He Tian su amado GuanShan ya había estado demasiado tiempo en el hospital y ya incluso parecía enfermo, por lo que decidió llevarlo a tomar aire fresco a un parque alejado del hospital.

Ahora ambos estaban en una banca del parque, GuanShan recargado sobre el pecho de He Tian y éste estaba rodeando los hombros del pelirrojo con su brazo.

—Tian— Llamó GuanShan al hombre que estaba casi dormido en esa posición, no lo culpaba, He Tian no había dormido casi nada en el tiempo que estuvieron en el hospital, obviamente estaba preocupado por su hermano.

Pero en esos momentos sus antojos eran más fuertes y necesitaba despertar al pelinegro a como diera lugar.

—He Tian— Le llamó nuevamente moviéndolo —¡He Tian pendejo hazme caso!—Gritó Mo frunciendo el entrecejo.

He Tian se sobresaltó y se separó rápido de su esposo para, después de verificar que no había peligro, voltear a ver a su esposo.

—¿Qué sucede Shan?— Cuestionó He Tian.

— Tengo antojos— Susurró levemente apenado mientras acariciaba su vientre de seis meses y tanto.

— Ah... A ver ¿Qué se le antoja a mi primogénito? — Preguntó He Tian colocando su mano en el vientre de GuanShan y acariciándolo suavemente.

— Quiero... Quiero un helado— Respondió señalando a la heladería que estaba frente a el parque.

— De acuerdo, ya Regreso— Dijo para voltear casi inmediatamente viendo a el pelirrojo —¿Sabor?— Preguntó.

— Vainilla con fresas arriba y chispas de chocolate— Dijo GuanShan sonriendo suavemente, luego apartó la vista de su esposo y la movió a su vientre para seguir acariciando con la finalidad de conseguir que el bebé se calmara.

He Tian llevaba poco de haber entrado a la heladería y GuanShan ya se estaba desesperando, sin embargo sus pensamientos fueron interrumpidos cuando un hombre canoso y vestido de traje de sentó a su lado. GuanShan al principió iba a correr pero luego logró reconocerlo.

— Hola tío de He Tian— Saludó el pelirrojo y el hombre sonrió al ser reconocido.

— Hola GuanShan— Regresó el saludo viendo al pelirrojo —¿Cómo está mi sobrino nieto?

—Ah... Igual de revoltoso que siempre, ahorita está inquieto porque está esperando a que su papi le traiga helado— Respondió haciendo un leve puchero cansino para luego esbozar una sonrisa.

—Ahh... Me alegro de saber que están bien— Dijo él.

La charla continuó un largo rato, luego He Tian regresó y le dio su helado a su esposo.

Ahora eran los de la familia quienes hablaban mientras el embarazado comía su helado, claro que toda conversación fue interrumpida cuando el celular del pelirrojo sonó.

— Amor— Llamó GuanShan a su pareja quien volteó a verlo.

—¿Qué sucede, Mo?— Le cuestionó.

— Tenemos clase prenatal... Ahora— Dijo y He Tian quería que se lo tragara la tierra, odiaba esa clase.

Su tío rió y luego se levantó para así despedirse de ellos.

Ambos jóvenes adultos se subieron al auto del mafioso y se apresuraron a llegar a la clase, que He Tian tanto odiaba.

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—Una vez más señor He, GuanShan entra en labor de parto a media noche ¿Qué debe hacer en ese momento?— Cuestionó una partera que daba clases prenatales y de preparación para el parto y que hacer en ese caso.

— Han... No entrar en pánico, subir a GuanShan al auto, subir las cosas básicas ya preparadas— Respondió pensando y recordando en lo que antes se le había dicho.

—Bien, ahora digamos que ya es muy tarde para ir al hospital y ya llamó a una ambulancia explicando que sucede, pero GuanShan ya está dando a luz en ese momento ¿Cómo lo ayuda? — Preguntó ella.

— Han... — La mente de He Tian estaba en blanco, lo único que se le ocurría que posiblemente haría en ese momento sería correr en círculos y desmayarse.

—¿Señor He?— Llamó la partera.

—Ham... Okay, supongo que le doy ¿apoyo moral?

Tanto GuanShan y la Partera lo miraron con caras de "Eres un idiota".

— No, se va a colocar en medio de sus piernas y va a visualizar si está muy dilatado o si ya está coronando la cabeza del bebé, debe recordar que para ese momento usted debe tener las manos enguantadas o al menos muy limpias— Respondió ella explicándole que hacer, incluso como quitar el cordón umbilical si este venía enredado en el cuello del bebé, le enseñó incluso hasta cortarlo.

— Bien, ahora hagamos un simulacro, GuanShan, acustese en la colchoneta de ahí — Pidió la mujer y el pelirrojo asintió.

GuanShan caminó hacia la colchoneta y se acostó en ella con cuidado.

—Bien, ahora separe las piernas como si se estuviera preparando para dar a luz en casa como ya lo hemos practicado — Pidió y pese a lo avergonzado que GuanShan se encontraba lo hizo —Ahora quiero que actúes lo más creíble posible, como si tu bebé fuera a nacer en este mismo momento—
Le dijo y GuanShan comenzó a agitar su respiración fingiendo que tenía dolor y contracciones.

— Bien, señor He, este es su caso, su esposo rompió fuente hace 3 hora y a penas terminó de dilatar, pero están muy lejos del hospital y lo mejor que pudo hacer fue llamar a la ambulancia puesto que ya no puede mover a GuanShan que ya ha comenzado a pujar ¿Qué hace?— Le cuestionó.

He Tian respiró para tranquilizarse y se acercó a GuanShan quien estaba "pujando" para traer a su bebé al mundo.

—¡A-Ah!— Fingía GuanShan echando su cabeza hacia atrás debido al "dolor".

—Respira hondo GuanShan, puedes hacerlo — Dijo He Tian midiendo con su teléfono el tiempo que se tomaban en regresar las contracciones que su esposo le decía, de esta forma le decía cuando debía pujar y cuando detenerse.

Al final su procedimiento salió bien e hizo todo lo que se le había mostrado aunque desde que la partera estaba anotando lo que hacía se le veía claramente nervioso.

— Bien hecho chicos— Dijo emocionada la mujer con una sonrisa en sus labios — El simulacro fue todo un éxito, nos veremos la próxima semana para una evaluación nueva, suerte — Dijo ella mientras caminaba hacia alguna habitación del lugar.

He Tian ayudo a levantar a GuanShan quien estaba cansado de estar ahí acostado moviéndose y gritando fingidamente.

—Vamos a casa, necesitas descansar— Dijo He Tian abrazando a su esposo.

— Sí... Buen simulacro... Ahora sí estoy considerando un parto en casa— Comentó el pelirrojo y He Tian comenzó a sudar frío mientras ponía una expresión nerviosa.

— ¿S-Seguro? ¿No prefieres mejor un hospital?— Le cuestionó.

—Mm... Voy a pensarlo, es decir, después de ver como actuaste estoy seguro de que lo harías bien — Agregó Guan.

—Odio esta clase— Ante el comentario de He Tian, GuanShan comenzó a reírse y luego el pelinegro le acompañó, ya necesitaban un momento juntos.

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Bueno, ¿Qué les ha parecido? ¿Comentario? Hasta el siguiente.