Family

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<<Porque eres el regalo más hermoso que nunca pedimos>>

Matias A.

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Habían pasado a penas unos días desde que Dishi nació y se había convertido en lo más entretenido e importante de sus fascinados padres. GuanShan, pese a su característico mal humor y ceño fruncido (Que disminuyó desde que estaban en la secundaria y preparatoria) ahora se encontraba con una sonrisa de oreja a oreja, estando pendiente de su bebé a cada hora del día.

He Tian quien siempre estaba serio y con una mirada fría dedicada para todos los presentes se encontraba jugando con las manitas de su bebé en ese momento, el recién nacido tomaba su dedo índice entre su manita.

Aunque el bebé aún no había abierto sus ojos correctamente o al menos no lo hacía por más de un minuto, los padres descubrieron que tenía los ojos color miel como GuanShan y eso los había llenado de emoción, extrema emoción. Era una mezcla perfecta de ambos, tenía unos labios delicados y rositas como los de GuanShan pero probablemente tendría la altura y el cuerpo brusco de He Tian y el pelirrojo no podía evitar sentirse extaciado y emocionado por el futuro, por saber como sería su bebé.

-—Tian—Llamó el pelirrojo a su esposo quien estaba acostado en la cama junto al bebé.

—¿Qué sucede?—Preguntó pero esta vez sin verle, no podía despegar sus ojos de su pequeño hijo.

—Debo ir a darle un baño a Dishi, así que mientras necesito que vayas a comprar pan para que puede hacer la cena una vez que lo alimente y se duerma— GuanShan dijo todo eso mientras tomaba con sumo cuidado a su retoño y besaba la manita de éste una vez que estuvo acomodado contra su pecho.

He Tian sonrió a la escena y asintió para levantarse de la cama sin deshacer su sonrisa, una que sólo ellos podrían ver porque era una sonrisa sincera.

El pelirrojo aún resentía el parto pues le había sido difícil regresar a sus actividades diarias después de haber dado a luz sin anestesia, no cualquiera lo hacía. También había amenazado a He Tian con usar el condón o sino no habría sexo, no volvería a pasar por eso de nuevo, al menos no por un largo rato.

En fin, cuando llegó al cuarto de baño colocó a He Dishi en una pequeña tina y la llenó con poca agua para ponerle jabón y que su bebé pudiera limpiarse. Con un Shampoo especial limpió su cabecita y se aseguró de que nada cayera en los ojos de su niño por eso colocó su mano como una barrera protectora.

Debía destacar el hecho de que a GuanShan le gustaba escuchar la risa de su bebé cuando lo bañaba, a diferencia de otros niños Dishi disfrutaba del agua y su hora favorita resultaba ser la hora del baño definitivamente. Cuando el baño terminó GuanShan envolvió a su bebé en una toallita con forma de osito y lo llevó en brazos hasta su cuarto dónde, después de secarlo bien le colocó un mameluco de pandita con el que se veía sumamente adorable.

He Tian regresó poco después con el pan en manos, entró a la casa y vio a su pelirrojo sentado en el sofá de la sala con Dishi en brazos tomando de su biberón/Mamila (como le digan ustedes), ambos se veían hermosos, simplemente adorables pues su esposo tenía una expresión de dulzura en su rostro y el bebé tenía sus ojitos cerrados pues éste se preparaba para dormir.

Dejó las cosas en la mesa y se sentó a un lado de su esposo e hijo. Tomó con su mano el piesito enfundado en el mameluco de su bebé y lo besó de forma descuidada lo que hizo sonreír a su pelirrojo esposo.

—Nunca imaginé que esto pasara... ¿Tú sí? Esto de... ¿Esto de tener una familia? ¿Qué nuestro bebé sería así? — Preguntó GuanShan a su esposo quien seguía viendo de forma embobada a su hijo.

—No, no imaginaba mi vida de esta forma, tan cambiada... Tan... Aún estoy acostumbrándome a todo esto... A saber que estás aquí, que te embaracé, para empezar... Tú madre que casi me mata con su escoba... y finalmente... Estás aquí — Respondió He Tian haciendo una mueca que era como un intento pobre de sonrisa pero... Extraña.

—Yo tampoco puedo creerlo realmente... A veces me da miedo dormir porque pienso que al despertar todo esto se va a esfumar... Como si realmente esto fuera un sueño, bueno, es uno hecho realidad —Ahí estaba nuevamente, su dulce GuanShan al que pocos conocían, ya no hablaban las hormonas, ahora era su corazón.

—Sí, a veces yo igual pienso eso... Pero sé que de soñar algo tan largo entonces soy capaz de forzarme a dejar de respirar en vida real para quedarme aquí para siempre— GuanShan sonrió.

—Que cursi—Se burló el pelirrojo.

—Es tu culpa... Tú siem ¡Hum!— No terminó su frase porque los labios de su esposo lo interrumpieron.

—Me gusta que seas cursi, sólo conmigo, por supuesto— Agregó el pelirrojo y Tian sonrió.

—Sin duda seremos una gran familia—Dijo He Tian viendo a su retoño quedarse dormido, porque tenían que admitirlo y no es porque sean los padres del niño, pero Dishi era realmente hermoso en todo sentido.

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Actualización, por fin, yo sé que es un poco corta a lo que realmente acostumbro pero... Ya tengo sueño jeje ya es tarde y esto lo acabo de hacer así que, no olviden comentar, votar, seguirme si quieren hacerlo y recuerden que Matt los ama ❤

Esposo de un mafioso || 19 DAYS || TIANSHANDonde viven las historias. Descúbrelo ahora