Esposo de un mafioso || 19 DAYS || TIANSHAN

Amenaza

He Tian apegó a GuanShan hacia él como un mecanismo de defensa contra She Li, ese bastardo que había acusado a su pelirrojo de violación, ese mismo bastardo que le abrió parte de la mano y ese mismo bastardo que había estado jodiendo su existencia desde que empezó a salir con su hermano.

He Tian había sido claro en eso, le había dicho a su hermano que llevarlo a esa fiesta estaba prohibido y aún así tuvo el descaro de meterlo como si no estuviera prohibido.

—¿Q- Qué estás haciendo aquí?— Preguntó GuanShan con sus manos temblorosa aferrandose al brazo de He Tian.

— Vaya, Vaya, que forma de responder un cortés saludo, GuanShan, igual me da gusto verte— Su asquerosa voz, la odiaba.

— Cállate, tú ni siquiera tienes por qué  estar aquí— Respondió ante eso un muy molesto He Tian.

— Oye, Oye, yo no vine por gusto, él quiso traerme, y como su pareja no puedo negarme, ¿Entiendes?— Su argumento no era tan válido pero había servido para dejar callado a He Tian y aunque quiso decir algo She Li volvió a hablar— Sí, realmente ¿Por qué quisiera venir yo a una fiesta mediocre y en una casa de mal gusto?— Soltó su veneno como la arpía venenosa que era.

Pensó que con eso los otros dos ya no hablarían pero retrocedió en cuando GuanShan volteó a verlo furioso.

—¿Quién mierda crees que eres para criticar lo que nosotros tenemos? Sólo eres un pendejo hablador que se va regodeando por la vida simple y sencillamente porque hace que otros hagan todo por él después de hacerle unos trabajos en sus entrepiernas ¡Zorra! ¡Eso es lo que eres!— Bramó el pelirrojo nuevamente con el ceño fruncido, llevaba bastante tiempo que He Tian no veía esa expresión en él y por eso estaba más que furioso con She Li.

El albino se había quedado mudo por un largo momento, por un momento quiso pensar en que el hermano de He Tian le iba a proteger pero nada, se quedó callado observando la discusión entonces decidió volver a soltar su lengua.

Primero soltó una risa cínica y luego se acercó un poco a GuanShan pero igual estaba lejos del alcance de He Tian.

—Me llamas Zorra, pero al menos no soy el fenómeno de circo que eres tú, primero el mocoso pleitista, luego fuiste la puta personal de He Tian y ahora eres el fenómeno embarazado, ¿Otra cosa GuanShan? ¿No tienes una cola de mono también, ¿ O un par de cuernos? ¿A caso levitas? ¿O respiras bajo el agua?— Esas palabras hicieron retroceder al pelirrojo.

Sus ojos estaban algo acuosos mientras miraba al hombre frente a él con furia, no quería llorar por las palabras realmente, pero se encontraba en esa etapa del embarazo en la cual te sientes muy sensible y eso era lo que estaba sucediendo.

He Tian abrazó a GuanShan y colocó su cabeza en su pecho, como una forma de resguardarlo, ya estaba harto y veía a su hermano riéndose de todo eso.

Todo eso ya había subido de nivel y es que todos ellos no supieron en que momento las demás personas comenzaron a verlos.

— Tú no eres quién para hablarle así a GuanShan— Dijo He Tian apretando sus dientes.

—Tienes razón... pero van a pagar caro por lo que me dijeron, cuida tú espalda, GuanShan... porque cuando menos te lo esperes te haré daño y no me importa si  pierdes a tu bastardo en el proceso...— No estaba bromeando, estaba seguro de que lo haría y nadie iba a detenerle.

Estaba dispuesto a irse pero entonces lo tomaron del brazo Y después de jarlarlo había una mano apretando su cuello con fuerza, Sí, He Tian estaba más que furioso.

—Tú les tocas un pelo y yo me aseguro de que nadie vuelva a ver tu rostro jamás, o podría encerrarte y hacerte castrar en vídeo para que todo el mundo sepa que si le hacen algo a mi familia los mato— Respondió él a la amenaza.

Eso se iba a poner feo y GuanShan lo sabía, no temía por su vida, temía por la vida de su hijo.