<<Desearía que todo en nuestra vida sea felicidad, pero creo que estamos destinados al dolor>>
—Matias A
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Que bellos los días en los que podían despertar y estar con su bebé en brazos. Debían admitir que Dishi realmente era un bebé muy tranquilo, seguramente por los genes de ambos aunque sabían que en algún momento de su vida podría ser igual de inquieto que GuanShan.
Justamente el bebé estaba siento arrullado por los brazos de su mamá que con cariño besaba sus rojizas mejillas rechonchas mientras veía a su retoño esbozar risitas suaves.
He Tian que estaba terminando unos trabajos a computadora para unos cuantos negocios pendientes miraba de reojo a sus dos tesoros jugar o algo así. Se había dado cuenta del gran cambio que dio su Mo desde que llegó su pequeño Dashi al mundo, estaba más relajado y amoroso, aunque a veces se preocupaba innecesariamente de las cosas puesto que todo representaba un terrible peligro para el bebé.
Puede que sea así pero Dishi aún era un bebé que ni caminar podía y todas las armas peligrosas estaban en los cajones y en el ático así que estaba muy fuera del alcance del pequeño bebé, He Tian suponía que era el dichoso instinto materno del que le habló su suegra por teléfono cuando le informaron que el bebé ya había nacido sano y salvo y que GuanShan se encontraba bien también.
Le encantaban sus días de esa forma, tan tranquilo, tan relajado y lleno de carisma en su hogar. Que aunque ahora se viera un poco más tirado y escuchara casi todo el tiempo las canciones para niños pequeños desde el celular de su esposo no lo cambiaría por nada.
Eran esa clase de días donde podía ver a su esposo como siempre debió ser, una persona tranquila y llena de sonrisas mientras le daba besitos en la pancita a su bebé quien intentaba tirar de sus cabellos rojos sin mucho éxito. De esa forma terminó sus trabajos rápidamente y caminó hacia el mismo sillón donde estaba su familia y se sentó a su lado llamando la atención de Dishi quien estiró sus manitas hacia su padre mientras reía de forma adorable dejando ver su boquita sin dientes aún.
—Hey campeón — Le llamó He Tian acomodándole en su regazo y acariciando su cabello con su mano libre. Dishi jaló la camisa de su padre y se pegó a ella para intentar morderla pero acabó por chuparla y dejarla mojada por su saliva en cantidad.
El pelirrojo rió por la expresión disgustada de su esposo quien volteó a verlo molesto y terminó por unirse con risas suaves a su auto burla.
—Eres un traviesito, un bebé traviesito— Dijo GuanShan a su hijo mientras lo tomaba en sus brazos nuevamente y hacía caras graciosas que su bebé disfrutaba ver.
— Ese niño es muy problemático, ésta es de mis camisas favoritas— Se quejó He Tian y su hijo, que pareció entenderle, le sacó la lengua y luego rió cual tierno bebé provocando que GuanShan retomara sus burlas hacia él.
—Ese es mi bebé, has sufrir a tu papá por no levantar sus pantalones del suelo— Mo sonrió con malicia ante eso y besó la mejilla de su bebé.
—Oigan, eso no es justo— Se quejó nuevamente y se acercó más a su esposo para besar los labios de Mo, pero entonces Dishi metió sus manitas entre ambos provocando que ambos pares de labios fueran a parar en las regordetas manos del niño.
—Oye mocoso, deja a tus padres amarse— Regañó el azabache a su hijo quien soltó un chillido molesto como respuesta.
—Eres un pequeño muy celoso, te pareces a tu papá en defintiva— Agregó Mo besando otra vez la manita de su bebé.
He Tian volvió a acercarse a GuanShan y le plantó un beso en los labios, uno profundo que el pelirrojo correspondió, sin embargo el chillido enojado de su bebé los hizo separarse.
—¿Qué? Podrá ser tu madre, pero es mi esposo primero— Regañó He Tian a su hijo para después pararse del sillón en busca de algún refrigerio en el refrigerador.
—¡Deje pan tostado en la mesa!— Gritó el pelirrojo mientras volvía a jugar con su bebé besando sus manitas con cariño y luego acariciando su delicado rostro que a sus ojos eran tan perfecto.
Dashi seguramente pensaba lo mismo de su madre pues, el simple hecho de verlo hacía que los ojos del bebé brillasen con intensidad y reclamara toda su atención, aunque igual peleaba por la atención de su papá, sin duda sería muy apegado a ellos.
Pronto regresó He Tian con el pan tostado y se lo dio a su esposo quien gustoso lo aceptó y se lo comió de forma rápida antes de que Dishi le pidiera, eso era algo que aún no podría comer.
Cuando He Tian estaba apunto de sentarse en su lado del sillón su celular al otro lado de la sala comenzó a sonar por lo cual tuvo que levantarse nuevamente y caminó hacia el para tomarlo. Extraño fue que no tuviera un nombre ni un número registrado, era un número privado el que le estaba llamando. Sin dudarlo más contestó.
—¿Quién habla?— Preguntó el azabache con voz seria mientras GuanShan guardaba silencio y atraía la atención de Dishi para hacerlo igual.
Por unos segundos se escuchó pura estática, cosa que alarmó a He Tian, ya estando a punto de cortar se escuchó una voz distorcionada seguida por respiraciones que desconcertaron al mafioso.
—¿Quién mierda habla? ¡No tengo todo el tiempo!— Gritó He Tian desesperado.
«—He Tian, desesperado como siempre, en silencio sal de tu casa y no le digas nada todavía al pelirrojo, si no haces lo que te digo le voy a volar la cabeza a tu esposo y de paso a tu bebé ¿Entiendes?—»He Tian tragó duró y miró a su esposo que lo veía preocupado.
Había una gran posibilidad de que todo eso fuera una mala pasada y no tenía de que preocuparse, sin embargo ¿Qué pasaba si se equivocaba y GuanShan moría junto con Dishi por no obedecer? Estaba atrapado, no le quedó de otra más que hacer lo que decía el hombre de la llamada.
—Ya... ¿Qué quieres? ¿Quién eres?— Preguntó molesto.
«— No cambias en nada, escucha con atención, entrega a Cheng y a She Li para que puedan ser asesinados—»Aquello dejó frío a He Tian.
—¿Qué?— Preguntó.
«—Entrega a tu hermano y a su pareja, no me quieres como enemigo He Tian, conozco cada movimiento tuyo, después de todo, eres mi hijo—» Jianza, ese maldito se atrevía a retarlo de esa forma «—No le queda mucho tiempo a Cheng de todas maneras y She Li probablemente se suicide, es lo mejor para ellos»
—No lo haré— Dijo He Tian decidido.
«—No cometas tu peor error He Tian, tienes una familia, no creo que quieras verla morir frente a ti ¿Cierto?—» Preguntó cínico y sin esperar respuesta volvió a hablar «—No, claro que no, se obediente, entregamelos »
—Si crees que me conoces, viejo, entonces estás equivocado, no harás nada, no te acercaras a mi familia y eso los incluye a ellos, es mi hermano y She Li un viejo amigo— Gruñó pero su voz trataba de mantenerse tranquila.
«—De acuerdo... Así lo quieres, por favor revisa tu computador, ah y recuerda... Estás bajo mi mira desde hoy, He Tian—» Dicho eso cortó la llamada y regresó apresurado hacia donde estaba su esposo aterrado por la imagen que llegó al computador abierto de He Tian con ese mismo mensaje que dijo anteriormente “Te tengo bajo la mira”.
Justo cuando las cosas iban tan bien se derrumban, como si ese fuera un eterno castigo.
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¡HE VUELTO! ¿Me extrañaron? Yo sé que sí, pero no había tenido inspiración para escribir aquí, por eso es que me ausenté, pero he vuelto con nuevas y tétricas ideas, así que las cosas van a ponerse duras aquí.
Ahora ¿Se merece un voto, un comentario y un oscar? :v
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Esposo de un mafioso || 19 DAYS || TIANSHAN
RandomHe Tian y Mo GuanShan están casados y tienen un hijo por el cual pasaron por muchos problemas al haberse enterado, pero pudieron resolverlos. Una vida llena de conflictos y delitos que los lleva a pasar una infinidad de sucesos traumáticos y peligro...