32. Besos...

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Hay besos que pronuncian por sí solos
La sentencia de amor condenatoria,
Hay besos que se dan con la mirada
Hay besos que se dan con la memoria.

Hay besos silenciosos, besos nobles
Hay besos enigmáticos, sinceros
Hay besos que se dan sólo las almas
Hay besos por prohibidos, verdaderos.

Hay besos que calcinan y que hieren,
Hay besos que arrebatan los sentidos,
Hay besos misteriosos que han dejado
Mil sueños errantes y perdidos.
(Gabriela Mistral)*

* * *

POV MAGNUS

Cuando Alexander regresó al taller, lo noté apagado, distante, frío, evitaba mi mirada y, al terminar la clase, cuando me acerqué a él y quise tocarlo se alejó, casi imperceptiblemente, pero yo me di cuenta, he aprendido a conocerlo en estos once días, parece increíble que haya pasado un poco más de semana y media apenas. Pero para el amor no hay tiempos…

-¿Estás bien?

-Sí –me contestó sin mirarme.

-¿Te hice algo? ¿Sigues molesto con Destiny? Yo…yo quiero descubrir la verdad, pero si eso me alejara de ti…no la veré ni mañana ni nunca...

-N-no es eso, Magnus. Yo no soy quien para impedirte ver a nadie…

-Eres el amor de mi vida –dije arriesgándome a deslizar mis brazos a su alrededor. Él se tensó un momento y me miró casi con horror. Algo dentro de mí se quebró y lo solté.

POV ALEC

Magnus me abrazó a pesar de mis leves rechazos. Yo no quería rechazarlo, claro que no. Yo quería besarlo, abrazarlo, aferrarme a él y no soltarlo nunca. Pero me daba miedo, miedo de provocarle dolor… Lo miré completamente asustado cuando sus brazos me envolvieron, fue sólo un momento antes de relajarme al sentir su cuerpo contra el mío, pero él se empezó a alejar. Sus ojos brillando demasiado, demasiado acuosos. Y mi corazón se rompió, yo no podía hacerle daño estando cerca y también rechazándolo. Catarina tenía razón.

-Perdóname –le dije abrazándolo fuerte yo esta vez-. Perdóname, por favor.

-No tengo nada que perdonarte –me dijo con voz rota, desgarrándome un poquito más-. Si tú…tal vez el problema no es Destiny, yo entiendo si tú has reconsiderado lo nuestro… Esto puede sólo traerte problemas y no lo vale…

Me separé de él sólo para ver esos ojos de gato mientras hablaba, mis manos a cada lado de su rostro, obligándolo a mirarme. –Escúchame bien, Magnus Bane. Tú lo vales todo, TODO, si me pidieran mi alma la daría por ti con gusto, sin dudarlo ni un segundo.

-Estúpido nephilim –me dijo después de mirarme sorprendido unos minutos. Y no pude más…

POV MAGNUS

Otra vez esas dos palabras salían de mí y se sentían tan bien, no como un insulto, sino como una forma de decir te quiero. Mi cabeza empezó a punzar en cuanto lo dije, pero el dolor se fue o al menos dejó de importar cuando sus labios chocaron con los míos.

Alexander me besaba con ansias, un beso sumamente salvaje que me dejó un sabor metálico en la boca, un beso ardiente como si temiera que al separarse todo se acabaría. Intenté seguirle el ritmo y, por primera vez, no pude, así que lo dejé tomar el control. Este no era mi dulce Alexander, pero no me importó, me gustó, me…

Se separó de mí cuando el aire nos faltó, sus ojos oscuros ahora brillando demasiado. –Te amo. Te amo y siempre lo haré, nunca pienses lo contrario.

La intensidad azul con que me lo dice hace cosquillear los dedos de mis manos. Siento que lo dice con dolor y yo quisiera protegerlo de todo, de todos, si pudiera… -También te amo, lo sabes, ¿verdad?

Me regala una enorme sonrisa y me abraza, aferrándose de nuevo a mí, ocultando su rostro me pregunta: -¿Puedo volver a dormir contigo? S-sólo dormir, sé que dijiste que tendríamos el fin de semana juntos… Porque aún lo tendremos, ¿cierto?

-Claro, mi amor…

-¿Sí podemos dormir o sí el fin de semana? –pregunta con una sonrisa juguetona.

Una carcajada se me escapa y le doy un corto beso. –Te amo. Sí a todo, para ti siempre será un sí…

Su sonrisa, más radiante si eso es posible, me hace sonreír también. –Iré a mi casa por mis cosas, te veré en la noche.

-Te estaré esperando…

POV ALEC

Fui a casa, me duché, comí, escribí la última carta. Era, literalmente, mi último as bajo la manga, le pediría que lo leyera hasta el domingo, esa era nuestra verdad y yo no quería presionarlo para recordar, no debía hacerlo. Pero, si no lo lograba, quería que al menos en el último momento supiera que el brujo de mis cartas siempre fue él.

Cuando iba ya de salida, venían llegando Izzy y Jace con Clary y Simon. Se veían tan enamoradas ambas parejas, que me atreví a tener esperanza de conservar nuestra felicidad, la mía y de Magnus, pero que también afectaba a ellos, sobre todo en la dimensión original. Les sonreí incluso cuando Clary con una sonrisa pícara me dijo “¡Saludos a Magnus!”.

Hay amores inmortales que traspasan barreras, tiempos, espacios, así que recuperar unos recuerdos no era misión imposible.

Y con este optimismo fue que llegué a casa de Magnus. Él me esperaba con una gran sonrisa. Sus brazos y sus labios me reclamaron el cuanto llegué. Y así pasamos la noche, sólo entre caricias y besos.

Cada beso era diferente, cada uno era único y me hacía sentir especial saber que sus labios sólo me buscaban a mí. Dormí feliz sin pensar en el mañana, sin pensar en terceros ni en los villanos de esta historia. Dormí tranquilo entre sus brazos, entre el calor de su cuerpo.

Mis ojos se abrieron, a la mañana siguiente, recibiendo gustosos y a la vez temerosos el viernes. Era el último día del taller, le daría a Magnus mi última carta, él vería a la rubia y tal vez por fin descubriría quién rayos es. Sus ojos de gato se abrieron un rato después, iluminando mi alma y mi corazón. Y sus primeras palabras me dieron todavía más esperanza, más confianza en que nuestro amor sería inmortal. –Te amo, Alexander.

CONTINUARÁ…

Perdonen, se supone que ya iría el viernes, pero tuve un mal día ayer y no quise escribir drama porque seguro que se me iba de más jajaja, así que ya saben, el viernes (próximo capítulo) habrá drama, verdades medio ocultas y besos incomodos! Así que prepárense…
¿Quién besará a quién? (dos personas ya saben porque les hice spoiler) 🙈
¿Magnus le hará caso a Alec o leerá la carta antes de tiempo? ¿Qué pasa si la lee antes del domingo? 😱
No sé nada 😄

*Perdón también que puse todo el poema, no suelo hacer eso, pero no me decidía por una frase.

Nota dramática: pondré esto aquí porque sé que la mayoría lee ambos fics, tanto este como “Tus ojos no me ven” y no quiero esperarme, generalmente yo nunca me quejo, me rio incluso de sus comentarios. Tengo que decirles que últimamente he tenido pésimos días y si sigo escribiendo es porque algunos de sus lindos comentarios me dan ánimos. Pero me bajan las ganas de seguir. Creo que desde el inicio sabían cómo iba la historia y ya he explicado mis razones para ir a ese ritmo, espero que entiendan y no decidan abandonarla...

Mi inmortalidad por tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora