Mi inmortalidad por ti

28. ¿Dónde está Magnus?

Ojalá te encuentre por aquí, en alguna calle del sueño. Es una gran alegría ésta de aprisionarte con mis párpados al dormir.
(Jaime Sabines)

* * *

POV MAGNUS

-¡¿Cómo que no hay ninguna Destiny?! -pregunto alterado.

-No, ya chequé los expedientes, tanto físicos como virtuales...

-¡¿Insinua que estoy loco?! Que invento... ¡Ah! -una punzada demasiado fuerte me hace detenerme.

-¿Está bien? -pregunta la secretaria, pasando de la confusión a la preocupación.

-¿Cómo voy a estar bien si me dice que no es real alguien a quien vi más de una semana? ¡Hablé con ella! ¡Tengo sus escritos!

-No digo eso, profesor. Tal vez ella quiso jugarle una broma o usó un seudónimo, ¿no hacen eso los escritores?

-¡AH! -un dolor más intenso me impide contestar a ese absurdo...

-¡Profesor Bane! -la secretaria se acerca justo cuando empiezo a perder la visión y mis piernas amenazan con no sostenerme más-. Vamos a la enfermería ahora mismo.

Y no puedo, literalmente no puedo, negarme.

POV ALEC

Mi pie izquierdo se sacude nervioso, mi pluma golpeteando contra el cuaderno, varios gruñidos molestos se me escapan. ¿Por qué no regresa? ¿Por qué no me dejó acompañarlo? ¿Y si le pasó algo? ¿Y si no llegó a la enfermería? ¿Y si lo pierdo ahora que todo iba tan bien? No. No puedo.
Hago tanta presión que la pluma se rompe.

-¿Alec, estás bien? -pregunta alguien que no logro identificar.

-Sí -contesto y me pongo de pie de un salto-. Voy al baño. Si vuelve el profesor...díganle.

Camino lo más rápido que puedo a la enfermería. Siento casi físicamente que Magnus está mal, no me voy a perdonar si le pasa algo, debí acompañarlo aunque no quisiera.

Estoy por abrir la puerta cuando escucho la voz de Catarina, suena molesta de nuevo:

<<-No es la solución, sólo estás creando más confusión.

-Sí, lo sé, pero...

Al no escuchar más que su voz entiendo que habla por teléfono. No debería estar escuchando. ¿Estará Magnus ahí? ¿Estará bien?

-Entiendo, tu intención era buena y, de no ser por la intervención de Asmodeus, tal vez habría servido...

-Sí, pero ahora no puedes sólo desaparecer...

-No, no, ¡esto no ayuda a Magnus!>>

Sin querer, mi peso sobre la puerta hace que ésta se abra cuando escucho su nombre. Catarina voltea, luce preocupada un segundo antes de recomponerse: -Hablamos después, pero te quiero aquí mañana y arreglarás esto.

Cuelga y con una mano me indica que pase. Doy un paso dentro y mis ojos registran todo el lugar. -¿Dónde está Magnus?

-¿Magnus? ¿Es que no vino a clase? -pregunta de verdad preocupada.

-No... Quiero decir, sí, él vino...vinimos...

Me mira levantando una ceja y sonriendo con picardía. Siento mi cara arder, pero la ignoro.

-Él vino a clases, pero hace unos minutos dijo que venía aquí...

-¿Por qué vendría aquí? -dice confundida-. Él no me recuerda y no es que sea su persona favorita justo ahora...

-No te busca como amiga, creo que busca a la enfermera...

Su ceño se frunce mientras pregunta: -¿Se ha sentido mal de nuevo?

-Parece que sí... Él no me ha dicho nada, pero...

Ella gruñe y me interrumpe: -Pues aquí no ha venido.

-Tal vez se sintió mejor...

Ella me mira como si hubiera dicho lo más tonto del mundo.

-Ve a los baños, tal vez esté ahí. Mientras iré al salón a ver si no ha regresado.

Salimos los dos en direcciones contrarias. Magnus no está en los baños. No sé si volver a la enfermería o ir al salón, pero si vuelvo al taller y Magnus no está, ya no tendré pretexto para salir. Así que opto por la enfermería.

Catarina ya está ahí. -Magnus no ha regresado.

-¡¿Entonces dónde está?! -pregunto en un grito y ella me da una mala mirada-. Lo siento, es sólo que...no puedo perderlo, no ahora, no otra vez.

-No creas que eres el único que lo quiere y sufre, Alexander...

-Y-yo, yo s-sé que no...

-Entiendo tu desesperación, pero...

-¿Y si le digo la verdad ya? ¿No sería posible que me crea y recuerde todo si le cuento directamente?

-Alec, no puedes hacer eso...

-¿Por qué? -mi voz sale como un ruego desesperado.

-Si tú le dices la verdad a Magnus...

POV MAGNUS

Mi visión se ha vuelto borrosa, hay un zumbido en mis oídos, la cabeza me punza, las manos me hormiguean, el corazón me late demasiado rápido, voy prácticamente sobre la secretaria.

Y una sucesión de imágenes de mí con ¿Camille? me invaden. Ella y yo en una mesa, rodeado de personas con tatuajes extraños, ella y yo riendo, ella y yo abrazados, ella basándome...
Ella. Ella. Ella. ¿Quién es ella?

Ella y yo en una cama, sus ojos esmeralda se abren y se encuentran con los míos, su voz como un ronroneo: -Magnus.

Mi corazón se tranquiliza poco a poco, para cuando llegamos a la enfermería ya casi puedo caminar por mí mismo y mi vista se ha aclarado casi por completo. La puerta está abierta y, sin querer, escuchamos:

La enfermera tiene sus manos en los hombros de Alexander, él la mira y hay suplica en sus ojos azules cuando pregunta: -¿Por qué?

-Si tú le dices la verdad a Magnus...

-¿Alexander?

Ambos voltean y parecen casi aliviados cuando me ven.

-¡Magnus! -grita él y corre a abrazarme. Quiero pedirle una explicación, pero en cuanto sus brazos me rodean todo se vuelve negro.

CONTINUARÁ...

¡NO entren en pánico por Magnus!

Preguntas:
¿Con quién hablaba Cat?
¿Por qué Alec no puede decirle a Magnus?
¿Quieren leer algo escrito por Destiny y ver si adivinan quién es?

Por fin se acabó el miércoles 🙌. Quedan dos días para descubrir quien es Destiny. Tres cartas de Alec para ayudar a recordar y luego... ¡el fin de semana! Y adiós historia...