No soy cristiano pero juego como Messi

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La cancha de tlachtli es un poco parecida a la de una cancha de futbol rápido que te encuentras en los parques públicos. Sólo que tiene forma de H y, en vez de porterías, hay una canasta de como de basquetbol, pero sin red, volteada verticalmente. Tampoco hay bancas sino hileras de piedra parecidas a una escalera, donde la gente se amontona como sardinas, para tener un lugar y ver el partido a gusto.

La multitud estaba gritando y haciendo obaciones a los jugadoresque victoriosos, mientras que los perdedores los despedían con abucheos y burlas.

Neta que los mexicanos no hemos cambiado en nada.

-A ver si entendí. -platicaba con Cuau para entender un poco más el juego- El balón está hecho de hule del árbol ese con el que te peinas.

-Si.

-Pero pesa como tres kilos y la tienes que botar con las rodillas, cadera y brazos.

-Mientras que no esas las manos, todo es legal.

-Y también se permite todo tipo de golpe, caída y agresión con tal de que consigas anotar puntos.

-Básicamente.

-Bien... ¿¡Qué les pasó por la cabeza cuando se les ocurrió este juego!?

-Ni me preguntes a mí. El tlachtli tiene estas reglas desde antes que los dioses crearan a la humanidad.

-Para mi se me hace que Chabelo ya tenía tres Balones de Oro para antes de que lo inventaran... Bueno, pues. ¿Cómo ganamos?

Me llevó cerca de la cancha y señaló el aro vertical de uno de los extremos.

-¿Ves ese aro? Mientras que la pelota lo toque, es un punto. Si tienes más que el otro equipo antes de que el tiempo de acabe, ganas. Aunque...

-¿Qué cosa?

-Bueno, hay una excepción. Si lográs pasar la pelota por el agujero del aro, ganas sin importar el puntaje del partido.

-Perfecto, y ¿qué te dan si ganas? ¿Oro? ¿Un auto? ¿Mujeres?

Se me quedó viendo sabiendo que lo último no iba enserio.

-Nuestros ancestros solían sacarle el corazón a los campeones.

-¿Y ese es el premio? Si es así, entonces los del Cruz Azul han de ser inmortales.

Obvio Cuau no entendió la referencia.

-Olvídalo. ¿Cuándo nos toca?

Revisó el papel que nos dieron al inscribirnos y leyó la palabra-pintada en ella.

-Parece queeeee.... Somos los siguientes. Nos toca ser el equipo azul contra los de rojo.

-¿Y esos quiénes son o qué?

-Somos nosotros, Panistak.

Ambos volteamos de donde venía esa voz y vi a Erik caminando con rodilleras, coderas y casco de cuero, todo de color rojo, junto con un tipo muy, muy, muy obeso uniformado igual que él.

-Oye, ¿cuánto tiempo? Por cierto, eres un idiota.

Erik se rio al oír eso, ni siquiera parece molestarle.

-Te lo dije, no soy bien visto en el Palacio de Gran Orador. Si me hubieran visto, me hubieran cortado el tepule. Al cabo, no te pasó nada, ¿o sí?

Dany Hdz. y la Muerte del 5° SolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora