Capítulo 14: "Te quiero, Louis"

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Es increíble la manera en la que me hace sentir, pero no sé si lo que estamos haciendo está bien. No sé por qué estoy pensando en mis padres y amigos, ¿es tan malo lo que estamos haciendo? No es un pecado para mí, pero para la religión sí, joder, si no es un pecado para mí puedo hacerlo. Harry me besa sin parar y siento que mis labios se están derritiendo, es como si no se cansara. Baja mi bóxer lentamente y comienza a tocar mis nalgas, bajo el suyo y acaricio su pene y gime, su respiración es acelerada y siento que el placer recorre mis venas. Está buscando algo en su pantalón y me doy cuenta que es un condón.

-Louis: No puedo. -Digo mirándolo nervioso-.

-Harry: Sí puedes. -Me agarra de la cintura y se ve serio-.

-Louis: Lo siento, no puedo. -Me subo el bóxer y me vuelvo a sentar en el asiento-.

-Harry: Louis, no me dejes así. -Su mirada me pone nervioso y se sube el bóxer-.

-Louis: No puedes obligarme, yo no estoy acostumbrado a tener sexo seguido. Recuerda que mi primera vez fue contigo. -Digo mirándolo mientras me pongo el suéter rápidamente-.

-Harry: Sé que no puedo obligarte, disculpa. Mi primera vez también fue contigo. -Dice tocando mi pierna y su mano está caliente-.

-Louis: Lo sé. -Digo pasándole su ropa y frunce el ceño-.

-Harry: Discúlpame, soy un torpe. -Dice poniéndose el suéter y me siento mal-.

-Louis: Tranquilo. -Digo mientras me pongo mis botas y él su pantalón-.

-Harry: Lo mejor es que te lleve a casa, no quiero que te tengas problemas. -Asiento aunque sé realmente que ya estoy en problemas-.

Nos terminamos de arreglar en silencio y me siento incómodo, espero que no se moleste conmigo. Su cuerpo es tan deseable, pero no puedo, mi cuerpo no está acostumbrado y tengo miedo.


El camino es tenso y silencioso, nos miramos y sabemos que el ambiente cambió y no sé si para bien. Recibo un mensaje de Taylor y dice: Hermano, creo que mamá está molesta por ti. Le respondo: En unos minutos llego, hermana.

Cansado, estoy cansado y cierro los ojos mientras respiro profundamente. ¿Tiene algo de malo la libertad? Queremos sentir un millón de manos de la persona que nos gusta, no tiene nada de malo que queramos ser el pecado perfecto y la más verdadera mentira. ¿La persona que amamos es capaz de recibir una bala por nosotros? Esa pregunta es tan importante y no sé por qué siento que estoy sonriendo.



Harry me toca y cuando abro los ojos me doy cuenta que llegamos. Me siento nervioso al ver la casa y al pensar que mis padres deben de estar despiertos esperándome para regañarme.

-Louis: Gracias por traerme. -Digo poniéndome el bolso-.

-Harry: De nada. Espero verte mañana. -Dice tocando sus labios-.

-Louis: Así será. -Digo saliendo del auto-.

Baja el vidrio y me guiña el ojo mientras sonríe, el corazón me comienza a latir muy rápido y nos damos un apretón de manos. Sube el vidrio y se aleja hasta cruzar en la esquina. Sonrío tontamente mientras entro con cuidado y el vigilante me llama y me quejo mentalmente.

-¿Quién te trajo? Pude ver que estabas con alguien. -Dice mirándome y recuerdo que hay cámaras de seguridad-.

Mierda, las cámaras. No me acordé de ellas, espero que no hayan grabado nada.

El Secreto Del Chico Silencioso. (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora