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Entré a la casa con algunas gotas de sudor por mi frente, acabo de terminar mi rutina con Evert.

Caminé por la sala y lamí mis labios mirando a Justin sentado con Bárbara, Kenny estaba en el sillón individual.

—Hola Kenny—me acerqué y besé su mejilla. Ella me sonrió

—¿Rutina matadora?—me guiño y palmeo mi culo con fuerza.

—¡Kenny!—chillé y ella se rió. Justin dejó su mirada fija en nosotras.

—Yo que tú, saco mi lado perra y le demuestro a esa tonta quien manda—susurró en mi oído.

Mordí mi labio y acomode mi top deportivo.

—¿Tú crees?—le susurré igual. Por más que lo he intentado..nunca he podido ser mala persona.

Ken giró los ojos.

—Obviamente—lamió sus labios— Justin se está aguantando las ganas de follarte—soltó una carcajada.

Me reí y negué un poco.

—Deja de decir idioteces.. Él está con su novia—suspiré.

Kendall bufo y agarro mis mejillas, me hizo mirar un poco en su dirección.

Era verdad, o al menos eso parecía... Justin tenía su mirada fija en mí culo, mientras acariciaba lentamente la cintura de Bárbara.

Aclaré mi garganta.

—Mueve ese bonito culo que tienes y actúa como su mejor amiga...con algo más—me miró cómplice.

Me puse derecha y me giré.

—¿Y tú no saludas a tu mejor amiga?—dije divertida en dirección a Justin.

Él miró mis ojos al instante.

—Tu no me saludaste a mi—se encogió de hombros.

Giré los ojos. Idiota de mierda.

—Entonces, ¿tengo que hacerlo yo para que tú lo hagas?—levanté una ceja.

Bárbara se quedó mirándome fijamente.

—Exacto—lamió sus labios—Si tú me saludas. Yo lo hago.

Negué divertida y me acerqué.

—Bien.. Tú lo pediste—susurré y me tire sobre su cuerpo.

Por instinto, Justin pasó sus brazos por mi cuerpo, dejándonos más pegados que antes.

La cara de Bárbara cambió al instante pero se contuvo, ya que Kenny no dejaba de mirarla.

—Hails..—Justin tragó saliva notoriamente al sentir mi vagina pegada a su pene.

Lo miré fijamente.

—¿Mmh?—susurré cerca de su cara, muy muy cerca.

Escuché un fuerte gruñido a nuestro lado, pero no le di importancia.

—¿Q-qué haces?—su voz se entrecortó un poco y levantó sus caderas para sentirme más.

Mordí mi labio e hice más presión.

—Solo te saludo..—dije inocente e hice más presión contra él.

—Joder..—intentó mantener la compostura como si nada estuviera sucediendo, pero su amiguito no decía lo mismo.

Me reí un poco.

—Hola cielo—besé su mejilla sonoramente y luego de frotarme contra él. Me levanté.

Justin bufó mirándome mal y pasó su mano por su cabello.

Le guiñé a Bárbara divertida y ella me miró mal, se sentó sobre Justin con brazos cruzados.

Giré los ojos.

—Hails ya llegó nuestra ropa—chilló emocionada.

—¿¡Qué!? ¿¡En serio!?—chillé igual y aplaudí.

—¿Qué ropa?—dijo Justin con voz ronca y ambas lo miramos.

Tensé mi mandíbula al ver lo que hacía con la zorra. Malditos, malditos mil veces.

—Nuestra ropa para Coachella—Kenny hizo un ruido con su boca.

Yo solo asentí de acuerdo con lo que ella dijo.

—¿Qué es eso cariño?—la voz de la zorra se escuchó y miró a Justin.

—¿No sabes qué es Coachella?—me burlé con Kenny.

Ella negó y giró los ojos.

—No. No sé—se puso seria ya que Justin también soltó una carcajada.

—Es un festival que se hace en Palm Springs—dije seca.

—¡Con vestuarios increíbles y divertidos!—chilló Kendall.

Me reí solo un poco.

—Y buena música—acotó el idiota.

Asentí

—Suena aburrido—lamió sus labios Bárbara— Además, parece que solo van por salir en revistas y eso.

La miré mal al instante.

—No seas idiota—pase mi lengua por mis dientes—En Coachella es el único lugar donde podemos ir y nos nos seguirán miles de cámaras. Por eso vamos.

Bárbara me miró fijamente y cuando iba a hablar Kenny la interrumpió.

—Matthew y Nash me avisaron que venían Hails—comentó para aligerar el ambiente.

Mi mirada se posó en ella.

—¿Si? Eso es genial. Ya los extrañaba—sonreí.

Justin aclaró su garganta.

—¿Irán con ustedes?—dijo con semblante serio.

Fruncí un poco el ceño, ¿a qué viene su repentino cambio de humor?

—Si—asentí—Alquilamos una casa en Palm Springs para los días que estemos en el festival.

Él me miró fijamente por varios minutos hasta que K se unió a nosotros saliendo de la cocina.

—¿Escuché que hablaron de Coachella?—sonrió.

Todos asentimos.

—¡Si!—chilló Kenny.

K nos miró y luego miró a Justin.

—¿Iremos a Coachella?—preguntó curioso.

Mis ojos al instante encontraron los del idiota.

—Si, iremos a Coachella—dijo mirándome fijamente.

¿Qué mierda pasa por su mente ahora?

Best Mistake |Jailey|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora