Miren mi espalda

Lo Que soy

En el hospital de Konoha había despertado ya una rubia y al no encontrar a su amiga había hecho sonar todas las alarmas. Todos buscaban eufóricos  a Sakura sin imaginarse  lo que hacía en esos momentos.

En el campo de entrenamiento

Se veía  claramente  un duro enfrentamiento entre dos jóvenes pelirosas, ambas muchachas  se encontraban en condiciones un tanto precarias y muy mal heridas, una de las dos chicas estaba sangrando por la nariz y la otra tenía un ligero hilo de sangre recorriendo sus finos labios.

-Sakura, limpia tu nariz o jamás podré concentrarme en la pelea de verdad- dijo cansada aquella otra muchacha de nombre Hikaru.

-Está bien Hikaru me la limpiaré pero sólo si tu te limpias la de la boca. Que me da asquito- Afirmó la plirosa de cabello atado en coleta alta  mientras se frotaba la nariz con la  mano.

-Creo que ya es hora de que veamos el pergamino Sakura, tu cuerpo ya está adaptado a mi presencia por lo que  no deberían haber problemas-Dicho esto comenzó a sacar lentamente un gran pergamino de quien sabe donde.

En un movimiento casi imperceptible Hikaru abrió el pergamino, este era de tela roja por fuera y en su interior reinaba un color amarillo opaco por la antigüedad. Habían unas finas letras y marcas escritas con una tinta negra ahora un tanto rasposa, la caligrafía era impecable y prolija. Sakura  miró el interior del extenso pergamino examinando su contenido. El pergamino se extendía por al menos unos dos metros y la información que contenía estaba escrita en una lengua extraña pero raramente atrayente para la joven de cabellos rosados y firmes ojos jades verdosos.

-Hikaru no entiendo esta letra ¿Qué dice?- La curiosidad me tenía  totalmente dominada, parte de mi se sentía inevitablemente atraída por todos esos extraños símbolos y palabras desconocidas, otra sólo quería correr. Como si supiera que lo que allí estaba era algo prohibido.

-Sakura esta es la lengua más antigua de tu clan. En este pergamino se encuentran sellados los recuerdos de tus primeros antepasados y también los de tus padres. Este es por así  decirlo el legado o base de datos de todos los líderes de tu clan y pronto también estarán aquí algún día tus recuerdos... Es probable que encontremos técnicas interesantes y poderosas- Lo que me había dicho Hikaru aceleró mi pulso. Estaba realmente emocionada.

-¿Entonces qué estamos esperando? Hay que abrirlo ya-Ella sólo movió levemente la cabeza en señal de asentimiento y luego se cortó la muñeca con un kunai que estaba tirado a causa del entrenamiento.

Narra Sakura

Cuando las gotas de sangre tocaron la superficie del pergamino una luz lila comenzó a emanar de él. Los sellos brillaban más que las palabras y una ráfaga de viento se formó a nuestro alrededor causando que nuestros cabellos de llamativo color rosado se batieran a su ritmo; mientras más fuerte soplaba el torbellino que nos rodeaba más se aceleraba mi pulso y mi respiración se agitaba.

Note que Hikaru seguía sangrando, si ella seguía así  su forma física se debilitaría y no podría seguir proyectando su personalidad. Cuando quise decirle que parara su hemorragia ella me miró sonriente y entonces unas voces comenzaron a resonar en el viento. Los árboles que nos rodeaban se tornaron cerezos en plena flor y Hikaru desapareció como si jamás hubiera existido. Una incomprensible sensación de pánico se atragantó en mi garganta y las ganas de gritar se apoderaron de mí, pero no cedería ante nada, así  que preste atención a las voces susurrantes que emergian del pergamino.

No entendía nada pero poco a poco un sin fin de imágenes y palabras me envolvieron mostrándome así  la historia olvidada y menospreciada de mi ahora inexistente clan.