Secuestrada Por El Demonio [TERMINADO]

Capítulo 2

Capítulo 2

Se cubrió los oídos y comenzó a llorar desesperadamente, cualquiera podía conmoverse, pero a Donghae le provocaba otra cosa verla llorar de esa manera.
Él se acercó a ella y descubrió sus oídos, este era el mundo en el cual él vivía, y ella debía de acostumbrarse.

—Me quiero ir, por favor déjame ir —le suplicó ella

—Las puertas del infierno ya se cerraron, tendrás que esperar tres mil millones de años para que se vuelvan abrir —dijo él. —Pero tranquila, te trataré muy bien, te haré mi mujer de mil maneras, ya estoy ansioso

Aquello la hizo temer, primero porque quizás tendría que esperar tres mil millones de años para ser liberada y segundo… ¿Ser su mujer?, ella sabía a qué se refería, pero no quería nada de eso.

—No me lastimes —pidió ella

Las lágrimas invadían su rostro y Donghae sonrió.

—¿Cómo podría lastimar a un ser tan delicado? —preguntó él

Puso ambas manos en la cintura de ella y la atrajo a su cuerpo. Ella era increíblemente perfecta, tanto así que se sintió extremadamente posesivo.

—¿Me dejarás ir? —preguntó ella

—Eres hermosa

Dijo él ignorando su pregunta, acercó sus labios a los de ella y la besó, el beso no era delicado, era rudo como a él le gustaba, pero se dio cuenta de que la había lastimado. La boca de ____TN estaba con sangre y ella no dejaba de llorar.

—Eres tan frágil —dijo él secando las lágrimas de _____TN. —No llores, hermosa

—Me duele los labios —dijo ella

Él la besó nuevamente, pero esta vez con más cuidado, le encantaba el ángel que había secuestrado, era hermosa, delicada y solamente de él.

—Ahora te dejaré sola, pero miles de almas torturadas te estarán acompañando —dijo Donghae sonriendo

—No quiero estar aquí—dijo ella. —Siento algo extraño, no me gusta

—Sientes miedo, hermosa y eso me gusta —dijo él sonriendo

—Por favor, no me hagas esto, yo no te hice nada —dijo ella

—Hermosa, soy un demonio, me gusta el sufrimiento —dijo Donghae

—¿Qué piensas hacer conmigo? —preguntó ella

—Muchas cosas, no por nada te secuestré, ahora quédate aquí, no tardaré

La dejó en aquel lugar sola, aunque claro, sin mencionar a las cientos de almas torturadas, los gritos la desesperaban, no sabía que hacer más que llorar.
Se podía ver espectros entre las tinieblas que cubrían el lugar, extrañaba el paraíso, extrañaba la luz y los otros ángeles.

Donghae fue a distraerse, tenía su cuerpo caliente y no era precisamente por el ambiente tan caluroso del lugar, deseaba al ángel que había secuestrado, pero era demasiado delicada y perfecta para atreverse a lastimarla.

—Te vi salir de ese horrible lugar con una hermosa ángel —dijo Zico, otro de los tantos demonios

—¿Algún problema? —preguntó Donghae

—Yo también secuestré a una hermosa ángel —dijo Zico. —Pero digamos que era bastante fastidiosa, así que tuve que cortarle la cabeza

—¿La secuestraste por nada? —preguntó Donghae

—La viole antes, no soy tan imbécil como para no probarla, pero lloró demasiado y me deshice de ella, aunque claro, no sin antes cortarle las piernas muy lentamente para que sufriera —respondió Zico. —Si te aburré, me la regalas y la torturo

—Me entretendré con ella por mucho tiempo, así que mejor olvídate de la hermosura que secuestré, es solamente mía, que te quede claro —le advirtió Donghae

—Solo recuerda que debes hacerla sufrir, a tu padre no le gustará que la trates bien —dijo Zico

—Se perfectamente lo que tengo que hacer con ella, no es necesario que un simple demonio como tú, me lo diga —dijo Donghae. —¿Mi padre ya está enterado de que te deshiciste de un ángel?

—No creo que le importe, pero sé que a nuestro señor le dará gusto

—¿Qué me dará gusto? —preguntó el señor de los demonios, padre de Donghae

Zico se tensó de cierto modo, pero Donghae estaba tranquilo, ya que su ángel seguía intacta.

—Secuestré a una hermosa ángel —dijo Zico

—Muy bien, ahora debes embarazarla y que se una a nosotros

Zico no esperaba para nada que su señor dijera aquello.

—Pero señor… yo…—No pudo seguir hablando por el miedo que ahora tenia

—Mi señor, Zico se deshizo del ángel que secuestró, solo la violó y le cortó la cabeza

El señor de los demonios se enfureció, esperar tres mil millones de años solo para que uno de sus demonios se deshiciera de un ángel tan rápido era imperdonable, lo mejor que podían hacer sus demonios era hacerlas sus mujeres, embarazarlas y que ellas se unieran a ellos para que el todopoderoso del paraíso se sintiera frustrado por perder a sus ángeles.
Zico comenzó a sentir como algo quemaba su interior, de pronto de su estomagó salieron miles de gusanos del inframundo, lo estaban devorando por dentro, aunque no moriría, un demonio y un ángel solo podría morir si se les cortaba la cabeza, y el señor de los demonios no se iba a deshacer tan fácil de Zico, lo haría pagar en vida y luego lo haría pagar con el alma, lo torturaría eternamente.

—Donghae, quiero que tengas un hijo con esa ángel y también quiero que ella se quede por voluntad propia en este lugar—dijo su señor

—Lo haré, Padre

—Si no lo haces, te torturaré al igual como lo haré con este idiota

Donghae no sintió miedo ante la amenaza de su padre, sabía que su ángel caería ante sus encantos. Regresó al lugar en donde la tenía, aunque algo lo sorprendió, había una nube blanca de aproximadamente dos metros y medio de largo, arriba de esta estaba el ángel que había secuestrado.

—¿Y esto? —preguntó Donghae subiendo a aquella nube

____TN lo miró asustada, en todo ese rato no había dejado de llorar.

—Hermosa, no estoy siendo cruel como para que llores —dijo él

—No quiero estar aquí

Él secó sus lágrimas y le dio un corto beso en los labios.

—Te haré disfrutar —dijo él

—¿A qué te refieres? —preguntó ella

—Me refiero a muchas cosas, mi hermosa ángel—respondió él. —Solo recuerda esto, me pedirás más.

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