Capítulo II

158 16 2
                                    

-Te veo bien. -bromea Máx sentándose a mi lado.

Yo estaba básicamente acostada sobre la mesa casi sin fuerzas para mantenerme erguida o al menos para coger el tenedor y comer algo.

-No sabía dónde quedaba la enfermería, deambulé por los pasillos hasta encontrar a un tío muy extraño y luego tuve que esperar a que alguien apareciera para atenderme. Debido a eso llegué tarde a clase de gimnasia.

-El profesor la hizo correr 15 vueltas alrededor del campo, como McKenzie aquí presente es torpe por excelencia resbaló con el césped recién regado de nuevo, además es una floja. -terminó de explicar Ash.

-Ten cuidado podrías hacerte daño.

-¡Pero el profesor podría haberme entendido un poco y pensar "oh pobre chica que viene de la enfermería, voy a dejarla descansar en lugar de hacerle dar 15 vueltas por llegar tarde"! -iba a seguir hablando pero miré detrás de mi sintiéndome observada.

-El primer día y mira todo lo que has hecho. ¿Qué miras?

-Nada, nada. -traté de enfocar mejor mi vista y me encontré con que el sujeto que me observaba no era nada más y nada menos que el chico de las taquillas.

Ni siquiera sé su nombre, tampoco sé cómo suena su voz, cuando le pregunté solo se limitó a señalar una dirección. ¿Y si es mudo?

Cuando quise darme cuenta llevaba rato mirándolo así que volví mi vista a Ashley que al parecer hacía un repaso mental sobre la ropa que podría ponerse para la fiesta.

-Ash, es una fiesta en el bosque, no tienes que ir tan arreglada. -dije.

-Cariño, hay que ir arreglada hasta a tirar la basura. Nunca sabes en qué momento conocerás a tu amor verdadero. ¿Qué tal que os encontráis y vas toda despeinada y en un pijama de estampado horrible?

-¿No se supone que debe amarte vayas elegante o parezcas vagabunda? -dije frunciendo el ceño y miré a Máx quién nos contemplaba con cierta gracia. -¿Tú que dices Máx?

-Ah no. -levanta ambas manos al aire. -Yo no formaré parte de esta conversación de chicas tan extraña, hasta donde sé soy todo un macho y quiero mantenerme siéndolo bastante tiempo.

-Bueno, te lo dejaré pasar, ¿cómo te fue en el discurso?

-Bastante bien, hay muchos candidatos este año.

-¿Y por qué das tú un discurso? -pregunto.

-Porque señoritas tenéis delante de vosotras al capitán del equipo. -infló el pecho orgulloso. -Lo que me recuerda que las audiciones para animadoras siguen abiertas, por si queréis apuntaros.

-Sí. -Ash se levantó de la mesa mirando a Máx toda feliz.

-No. -respondí a su misma vez mirándole a ella.

{…}

-Esto es absurdo.

Así es, estaba vestida de animadora esperando mi turno para audicionar.

-Tienes que entrar al equipo McKenzie.

-Recuérdame por qué hago esto.

-¡Para estar los tres juntos en los partidos!

-Sí, seguro que es por eso y no para acercarte más a los jugadores.

-Aw, que mona. -Máx aparece y me revuelve el pelo. -No te enfades, si entras te llevaré a donde quieras en mi moto.

-Trato hecho, te arrepentirás de haber dicho eso.

Después de que anunciaran que las listas de admitidas saldrían mañana volvimos a casa y me tiré a la cama a escuchar música. Placer que duró muy poco ya que me tocaba ir a hacer la compra.

Por el camino vi una pizzería interesante y decidí que ahí compraría la cena de hoy a la vuelta. Al parecer hoy le había dado a todas las tiendas por cerrar temprano y tuve que recorrerme medio pueblo para hacer las compras.

Cómo amaría tener permiso de conducir en estos momentos, solo llevo dos bolsas y entre las dos pesan el doble que yo. Y a eso se le añadían las dos pizzas que compré recién hechas.

-¿Dónde están los caballeros cuando una dama necesita ayuda con la compra? -musité para mí misma. Para mi sorpresa alguien respondió.

-¿Quieres uno?

Miré a todos lados y no vi a nadie, casi me hice pipí del susto.

-Eh... Pensándolo bien soy una dama independiente.

-¿Estás segura? Parece que te cuesta la vida misma llevar todo eso. ¿Rechazarás mi oferta de ayuda?

-Si salieras de donde sea que estés tal vez me lo pensaba.

-Eso no va a ser posible.

Después de eso no volví a escuchar nada en lo que quedaba de camino.

-¡Llegué! -en cuanto cerré la puerta de casa Ashley corrió hacia mí.

-¡Pizza! -chilló cogiendo las dos y llevándolas a la cocina.

-Oh hola, no pesan nada estas bolsas y llegué sin problema a casa.

-Ah, lo siento. -volvió y cogió una bolsa. -¿Ya sabes qué ponerte mañana?

-No.

-¿Y qué esperas? -me arrastró hasta el armario. -Tienes tanta ropa bonita y siempre te pones lo mismo...

-Ashley, quiero cenar, ¿podemos hacer esto luego?

-¡La belleza es esencial! Ya comerás luego.

Tras ponerme toda clase de conjuntos de mi armario hicimos una pausa para cenar, luego seguí con la ropa de Ash. Para cuando volví a mi cama encontré una nota pegada.

<No vayas a la fiesta>

-¡Oye Ash!

-¿Sí? -gritó desde el salón.

-¿Vino alguien mientras yo no estaba?

-¡No! ¿Por qué?

-¡Nada! -arrugué el papel y lo tiré al suelo.

La mañana del martes no comenzó para nada tranquila. Primero Ashley entró a despertarme tres horas antes para sacar a correr a los perros (todos sabemos que es por la pizza) ¡y ni siquiera sé de dónde sacó los perros! Y para colmo se nos escapó un San Bernardo, cosa que nos hizo correr tras él por quince minutos, entiendo que la gente se riera al vernos.

Cuando al fin llegamos a casa para ducharnos vimos que quedaban 10 minutos para que las puertas del centro cierren, y nosotras estábamos a 20 minutos lo que supuso otra carrera.

-Al fin...llegamos... -dijo respirando entrecortadamente.

-¡La próxima vez...que se te escape un perro...no cuentes conmigo! -me tiré al suelo tratando de regular mi respiración.

-¿Qué os ha pasado? -pregunta Máx levantándome.

-¡Esta chica es horrible! -lloriqueé. -Ni se te ocurra salir con ella.

-¡Oye! -dijo ofendida. -¿Sabes dónde están las listas de animadoras?

-En el tablón de allá.

Caminó con nosotras hasta allí, luego me pareció ver como lanzaba una mirada de muerte extrema a alguien que ¡sorpresa! Era el chico de las taquillas que también le devolvía la  mirada.

-¿Entonces iréis a la fiesta seguro? -pregunta Máx.

-Sip.

Un grito nos interrumpe.

-¡Estamos en el equipo!

A la mierda.

¿¡Vampiros Y Hombres-Lobo!?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora