¿Qué pasa si nadie te ve?

Capitulo 12

Aparcamos a las afueras del pequeño pueblo y nos fuimos adentrando. eran todas casas blancas y pequeñas y solo se veían a ancianos; en las puertas, las ventanas, las tiendas...

Cada vez que nos acercábamos a uno para preguntarle donde nos situábamos se iban o se encerraban en casa.

-¿Que diablos le pasa aquí a todo el mundo?-dije incrédula-.

- No tengo ni idea, sigamos buscando si hay alguien normal que nos pueda ayudar- me agarró la mano y seguimos caminando-.

Al rato de estar andando nos sentamos en un pequeño banco en la pendiente de un barranco. eso si, estaba todo vallado, sino de momento me hubiera sentado ahí.

-Lo siento Ben, pero creo que hemos parado aquí para nada-puse las piernas en la barandilla y me estiré-.

-Yo solo quiero estar contigo, me da igual aquí rodeado de viejos locos que en lo alto de una montaña- me pellizcó la mejilla y sonreí-.

-Gracias Ben, pero creo que si estamos encima de una montaña-miré hacia abajo- mira la profundidad de este acantilado, no sé como se sienten seguros aquí- me re coloqué-

- Si alguno nos respondiera podríamos preguntárselo, pero creo que aquí no cae bien la gente menor a la prehistoria- el chiste era malo pero no pude evitar reírme- oye,¿que es eso?

Mire a la dirección donde señalaba y en la esquina de una casa había una anciana morena escondida prácticamente, pero mirándonos. Daba escalofríos, porque, parecía que me miraba a mi.

-Vayamos a preguntar-me levanté y Ben me siguió-.

En menos de un minuto estábamos al lado de la mujer, y realmente ponía los pelos de punta.

Era bastante mayor, por lo menos tendría ya los 80, la tez muy morena, quizá fuera de alguna parte de áfrica o brasil y sobretodo lo mas importante eran sus ojos, de un grisáceo tan blanquecino que parecía que podía mirar a través de mi alma.

-Perdone,¿podría decirme en donde me encuentro? es que iba de visita a ver un familiar a un pueblo lejano pero me he encontrado este pueblo y me ha causado curiosidad- Sonrío de la mejor manera que pudo y le extendió la mano a la señora- me llamo Ben.

-Un placer conocerle joven, me llamo Nikaule y podría decirle donde está, pero me temo que usted sabe perfectamente donde está, la verdadera pregunta es,¿sabe usted en que se está metiendo?

-Disculpe señora pero no la entiendo-Ben arrugo la frente y me apretó más la mano-.

-Bueno, eso debería preguntárselo a su compañera,¿no crees?- miró a mi dirección- Cuantos años sin verte Anna- me sonrió-.

Me quedé atónita,¿ella también podía verme?¿como era posible?¿y de que me conoce? empezaba a sentirme mareada y le apreté mas la mano a Ben que tenia la cara totalmente descompuesta por la sorpresa-

-¿De que me conoce?¿y como demonios me ve?-dije con fiereza, estaba harta de no sabes nada de mi propia existencia-.

-Muy fácil querida, yo te di la vida-sonrió la anciana con malicia-.

En ese momento el mundo se me venia encima,¿que me había dado la vida? ¿era mi madre? no entendía nada, pero tampoco me importaba. Cada vez estaba mas mareada y lo ultimo que sentí antes de la oscuridad me atrapará fueron los brazos de Ben en mi espalda y su voz llamándome.

Empecé a deslumbrar colores y formas. Abrí los ojos y me percaté de que no estaba en la calle.