¿Quién mató a Sally Johnson?

EL JUEGO FINAL P1

CAPÍTULO TREINTA Y OCHO

A la mañana siguiente me desperté y vi que Tom no estaba a mi lado, tampoco estaba en la habitación.

Me levante y me di un ducha fría, después me seque y me vestí.

Entre en mi cuarto y vi que mi móvil no dejaba de vibrar. Lo cogí inmediatamente y lo mire.

Tenía un mensaje, un mensaje del asesino.

-El juego final ha comenzado. -Susurre.

Mire para un lado y para otro, no estaba ni Josh ni Tom.

Fui a la sala y vi que no había nadie en casa. No sé dónde se habían ido todos.

Empecé a recordar la conversación que tuvo Bianca con su madre anoche y sentía que me faltaba algo. Llame a Keenan.

-¿Si? -Me dijo al cogerme el móvil.

-Necesito tu ayuda. -Le dije.

-Voy. -Y me colgó.

A los pocos minutos Keenan ya estaba llamando a mi puerta. Le abrí y veía que estaba algo apurado.

-¿Que pasa? -Me preguntó.

Le dije que pasase.

-Creo que tengo que ir a un sitio, pero no quiero que se lo cuentes a los demás.

-¿Porque? -Me preguntó.

-Se que voy a sonar como una auténtica loca pero... creo que los demás esconden algo.

-¿Andy que estás diciendo? -Me preguntó.

-Siento que en el único en el que puedo confiar es en ti Keenan. Y necesito que hagamos un pequeño viaje.

Keenan aceptó mi propuesta y nos montamos en su coche para ponernos en marcha a aquel lugar.

Cuando llegamos ya habían pasado dos horas desde que salimos. Aparcamos enfrente de la casa y tocamos la puerta.

-¿Crees que después de lo de Dave habrá alguien aquí? -Me preguntó Keenan.

-Es una casa rural, digo yo que tiene que haber alguien.

De pronto el mismo señor que nos atendió la última vez nos abrió.

-Oh, si sois vosotros. -Dijo el.

-Perdone pero la última vez que estuvimos aquí nos dejamos una cosa y hemos venido ha cogerla. -Le mentí.

-Claro, pasad. -Dijo el hombre.

Entramos y el hombre se sentó en una silla a leer el periódico.

-¿Que estamos buscando? -Me preguntó Keenan susurrando.

-Quiero averiguar con que chicas estuvo aquí el señor Gilmore.

Keenan me miro algo exhausto.