Cuando Izzy colgó escuché el pitido que hacía el teléfono, me levanté de la cama rápidamente y tiré el aparato al suelo bruscamente, despedazándolo y haciéndolo pedazos con mis pies, sabía que lo más seguro es que tendría que pagarlo, pero me importaba una mierda.
Estoy harto de esta situación.
Cuando terminé de despedazar el teléfono, me recargué en la puerta de la asquerosa habitación del hotel en el que me encontraba y me deslicé en ella, apoyando la cabeza en mis rodillas.
Recuerdos empezaron a invadir mi mente.
Recordé aquella vez que Izzy estuvo conmigo una noche después de una pelea que tuve con Erin.—¿Axl? —oí la rasposa voz de mi mejor amigo y escuché como tocaba la puerta suavemente—. ¿Estás bien? —estúpido hijo de puta, ¡claro que no estoy bien, imbécil!
—¡Vete de aquí, Jeffrey! —le grité furioso dentro del baño.
—No me iré.
—¡No saldré!
—Te esperaré —me había dicho—. Al menos en tu habitación tienes cigarrillos, tomaré uno.
—¿Por qué no te largas? —le había preguntado molesto, tratando de contener la rabia y las ganas de llorar que tenía.
—Sé que no estás bien y de alguna manera siempre me necesitas —bufé.
Yo no lo necesito, ¿qué le pasa?—¡Tu madre te necesita! —le espeté furioso, lo menos que quería era soportar su ego de mierda.
—Bien, adiós Axl —dijo cortante y escuché como la puerta se cerró.
Me quedé en silencio por dos minutos, abrí la puerta del baño lentamente, asomé mi cabeza por el pasillo y vi que no había nadie.
¿De verdad Izzy se había ido?
Me dirigí a la sala, hasta que me encontré a mi pálido amigo sentado en el sofá con las piernas cruzadas, fumando y mirándome divertido con una pequeña sonrisa en su cara, lo miré fulminante.—Jeffrey, vete.
—No, Axl —susurró borrando esa sonrisa tonta de sus labios.
—No te diré lo qué pasó con Erin, ¿está bien? —dije molesto.
—No me digas —dijo despreocupado.
—Además, ya no te importa nada —lo miré—. Con costos me hablas y con costos tocas en la banda, ya no viajas con nosotros, sólo estás interesado en la zorra que conociste.
—¿Tuviste un problema con Erin o el problema es conmigo? —preguntó levantándose del sofá enarcando una ceja.
—¡Lárgate! —dije empujándolo—. ¡Te detesto! —grité furioso empujándolo de nuevo.
—¿Estás molesto, William? —me preguntó Izzy enojado—. ¡Bien, golpéame, entonces! —me dijo y yo no dudé en hacerlo, le mandé un fuerte puñetazo en la boca y en el estómago haciendo que se cayera al suelo.
Vi como a Izzy le empezaba a salir sangre de su boca, al darme cuenta de lo que había hecho, me acerqué a él y lo tomé de los brazos ayudándolo a levantarse.
—Lo siento, lo siento —dije avergonzado, lo tomé de los hombros y lo abracé.
Izzy rápidamente correspondió a mi abrazo, y en ese momento, sentí como las lágrimas de mis ojos empezaban a salir.—No importa.
—Perdóname, Izzy —sollocé.
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Perdóname, Izzy | {Izzaxl}
Short StoryAxl Rose se arrepiente profundamente de haber echado a su mejor amigo de la banda después del incidente de St. Louis. A lo largo de la historia el pelirrojo empieza a recordar los momentos que a vivido con Izzy. Axl empieza a buscar al pelinegro y...