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Hoy tendría que ir a hablar con Doug, él le dijo a Alan que debía entregarme unas cuantas cosas y que aprovechara para que fuera a recoger mis pertenencias.

—Quiero hablar con Axl —dije mirando a mí manager.

Axl está muy molesto, Izzy —me advirtió Alan.

—No le tengo miedo, Alan —me encogí de hombros—. De verdad necesito hacerlo.

—¿Y cuál crees que sea su reacción? —preguntó sin apartar la mirada del volante.

—No lo sé, pero no puedo seguir en está situación —hablé con sinceridad.

—Te recomiendo que lo pienses mejor, Izzy.

No necesitaba pensar absolutamente nada, ya sabía lo que iría hacer, recogería mis cosas y después hablaría con Axl.
Según Duff, Axl me ama y sé que no dudaría en tratar de arreglar las cosas conmigo.

Cuando llegamos al lugar donde sería el dichoso concierto, me bajé del auto y entré junto con Alan por detrás del estadio, caminé por los camerinos y nos encontramos a Doug.

—Acá están los demás papeles, ahí está tu paga —dijo Doug entregándome el montón de papeles.

¿Esto es todo? —pregunté mirando los papeles y él asintió. Se los entregué a Alan y él se dispuso a revisarlos para después guardarlos en su maletín.

—Tal vez puedas hacernos el favor de estar en unos cuantos conciertos más, Izzy —dijo Doug, y yo asentí sin ganas.

Alan y Doug empezaron a hablar sobre el tema. Sus voces se escuchaban, pero yo no estaba poniendo atención, hasta que sentí la mirada de ellos sobre mí, los miré y Alan me miró, me hizo una seña, prácticamente indicándome que mirara hacia atrás.
Lo miré confundido y me volteé y fue cuando mi mirada se encontró con la mirada del pelirrojo.
Axl se acercó peligrosamente hacia mí y tragué saliva.

¿Qué mierdas estás haciendo aquí? —el pelirrojo preguntó mirándome con una de sus miradas despectivas.
Lo miré sin saber qué decir.
—Te hice una pregunta, Isbell —me empujó.

Axl —habló Doug—. Izzy ha venido a recoger sus cosas, y a hablar conmigo, lo más probable es que se quede hasta que termine el show —le dijo aclarándole al pelirrojo.

Que se vaya —dijo molesto y levantó el dedo índice de manera amenazante—. No quiero verlo, Doug. ¡Maldita sea! Él renunció, ¿qué mierdas hace aquí? —preguntó sin dejar de mirarme con odio.
Estaba apunto de hablar y Alan me miró.

—Izzy, no es buena idea —comentó.

No me importa si lo es o no —dije secamente y miré a Axl—. Vine a hablar contigo, Axl.
Axl me miró anonadado y me dedicó una sonrisa.
Se acercó aún más a mí y acercó su boca a mi oreja y sentí como me estremecí por su roce con ella.
Alan y Doug nos miraban atentos y asustados, seguro estaban esperando a que Axl me mandara a comer mierda.

—Viniste a perder tu maldito tiempo, Stradlin —susurró para después alejarse de mí y dedicarme una de sus miradas con odio.

—Por favor, Axl —susurré y el pelirrojo volteó para mirarme.

—No —contestó secamente—. Tal vez así me logres entender.

—Axl... —rogué—. Por f-favor —lo miré a los ojos, Axl me miró con rabia y se acercó peligrosamente hacia mí. Ya sabía lo que vendría entonces simplemente cerré los ojos, esperando su golpe y en cuestión de segundos sentí su puño golpear mi fuertemente mi rostro.
Ya lo veía venir y si quería desquitarse que lo hiciera.
Alan y Doug se apresuraron a tomar a Axl de los brazos para que no volviera a hacerme daño.

—¿Qué mierdas, Izzy? —preguntó exaltado—. Te estuve llamando todos los malditos días para hablar y ¡nunca quisiste! —gritó furioso.

¿Cómo podía tratar de hacerle entender lo que sentía?
Está bien, no había querido hablar con él, porque pensé que tal vez alejándome todo sería mejor, pero me equivoqué.

—Era lo mejor para los dos, Axl —dije firmemente.

–Muy bien, entonces ahora yo no quiero hablar ni mierdas contigo —contestó en tono burlón—. Vete de aquí y no te vuelvas a aparecer en tu maldita vida —escupió y bajé mi mirada.

—Axl, cálmate —le pidió Goldstein.

—¡Suéltenme de una puta vez! —dijo molesto tratando de soltarse del agarre de Goldstein y Niven—. ¡Tengo un puto concierto!

—Vete calmado, sin hacer desastre —lo soltaron y me miró con desprecio una vez más y caminó hacia el escenario, pero antes de salir, se detuvo y me buscó con su mirada, cuando su mirada chocó con la mía, me miró por unos segundos.

—¡Chúpame la polla, Stradlin! —gritó y me levantó el dedo del medio.

Axl y yo cometimos errores, de eso se trata cuando estás en una relación.
Tal vez Axl haya cometido más errores que yo, pero yo no me iría de aquí hasta poder aclarar las cosas con él.
De algo estaba seguro... Por algo tuve que romper con Annica, estaba seguro que me había enamorado de mi mejor amigo y ahora quería recuperarlo.
No suelo ser de las personas que ruegan pero si tengo que hacer de todo para que escuche lo que tengo que decir, eso haré.

Después de recoger mis cosas, Niven me dijo que nos podríamos ir, pero yo no quería irme todavía. Aún faltaban unos veinticinco minutos para que finalizara el show y tenía planeado meterme al camerino de Axl.

Caminé y miré hacia el escenario, muchísimas personas estaban disfrutando del concierto, Duff estaba con toda su energía tocando el bajo, Slash estaba en su propio mundo tocando la guitarra, Matt tocaba entretenidamente la batería y Gilby daba vueltas por todo el escenario con su guitarra mientras Dizzy estaba con los teclados.
Me dispuse a ver cómo iba el show hasta que miré que Axl me estaba observando, le mantuve la mirada y él rodó los ojos.
Finalizó la canción Dead Horse y Axl volteó para mirarme de nuevo, tomó el micrófono sin dejar de mirarme y miró hacia el público.

—Esta es una de mis partes favoritas del show —dijo—. Es cuando dedicamos una maravillosa canción a Izzy Stradlin —habló con sarcasmo y los fans empezaron a gritar.

¿Acaso había mencionado mi nombre?
¿De verdad lo iba a hacer?
Anonadado seguí mirando la escena.

—¿Recuerdan a Izzy? —preguntó y el público gritó más fuerte—. Muy bien, ¡que se pudra Izzy! —exclamó y esta vez los fanáticos rieron.

—Esta es una canción que Izzy escribió sobre sí mismo, pero creo que ustedes están pensando al igual que yo, que Izzy debería chuparme la polla —dijo y el público rió aún más.
Bajé mi mirada decepcionado.

—Esto se llama, Double Talkin' Jive, hijo de puta —dijo y salió corriendo por el escenario.

Duff en un momento notó que yo estaba ahí y me miró perplejo, me encogí de hombros y le regalé una sonrisa tratando de demostrarle que no me habían afectado para nada sus palabras, aunque yo sabía que no había sido así.

Me parecía completamente estúpido que me dedicara esa canción, no tenía sentido. Pero igual me había dolido.

Axl me miró y me dedicó una sonrisa burlona, lo miré tristemente y me retiré de ahí.
Me presione en una pared y sentí que el corazón se me saldría del pecho, estaba latiendo muy rápido.

Soy un idiota, vine hasta acá a tratar de recuperar a la persona que amo y esa persona lo único que hace es humillarme en frente de millones de personas.
Axl podía ser lo que todos los demás quisieran, pero nunca pensé que haría algo así.

Sentí como si alguien me hubiera desgarrado en dos.
Tal vez alguien si me había desgarrado en dos pedazos y ese fue Axl Rose.

Mi trabajo aquí ha terminado, me iré.
Gracias por todo, Axl.
No te volveré a molestar.

Perdóname, Izzy | {Izzaxl}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora