Perdóname, Izzy | {Izzaxl}

[ 12 ]

Los Ángeles, 1991.

—¿Y bien? —pregunté observando al manager de nuestra banda, Doug Goldstein.
Goldstein nos había dicho que debíamos despertarnos temprano ya que, tendríamos una pequeña "reunión" con un amigo de él.

—No tarda en venir —dijo seriamente—. Necesito que presten atención.

—Bien —bufé—. Estamos esperando desde hace unos diez minutos y nadie aparece, si no llega alguien me voy —amenacé.

—No empieces, Axl —dijo Doug molesto.

—Perdón por llegar tarde —dijo entrando un hombre de mediana estatura por la puerta.

—No te preocupes, Alan —contestó Goldstein.

Alan empezó a sacar unos papeles de su maletín, para después tomar asiento en una silla.

—¿De qué trata todo esto? —preguntó Duff confundido.

—¿Recuerdan a Alan Niven? —preguntó Goldstein, todos asintieron con la cabeza, menos yo. La verdad es que no lo recordaba—. Alan me pidió que nos reuniéramos hoy, ya que tiene un aviso muy importante para la banda.

—No entiendo qué mierda tiene que ver este hombre con Guns N' Roses —solté de repente.

—Ya te darás cuenta, Rose —contestó Niven terminando de sacar sus cosas—. ¿Empiezas tú, Doug?

—Sí —contestó.

—Me tienen de los puros nervios, ¿pueden empezar? —preguntó Slash rascándose la cabeza.

—Este es un tema serio —dijo Doug—. Yo ya lo sabía. Alan me lo había comentado hace algunos meses, pero nosotros decidimos esperar un tiempo. Queríamos ver si se podrían arreglar las cosas.

—¿De qué mierda hablan? —pregunté empezando a enojarme.

—De esto —dijo Alan entregándome un papel y yo lo tomé de de mala forma. Lo miré y no entendí de qué se trataba.

—¿Qué mierda es esto?

—Es la renuncia definitiva de Izzy Stradlin —dijo Alan seriamente.

Fruncí el ceño y sentí la mirada de todos encima mío y de pronto las manos comenzaron a temblarme.

—¿Por qué no lo dijeron antes? —pregunté en voz baja sin dejar de mirar el papel.

—Izzy me comentó lo que pasó esa noche después del incidente de St. Louis y...

—No pasó nada —lo interrumpí.
Él me miró molesto y los demás me miraron cínicamente.

—¿En serio? —preguntó Alan—. Izzy me dijo lo contrario.

—Izzy es un imbécil, ¿está bien? —dije empezándome a enojar—. ¡Esto no es lo que él quiere! —grité levantándome de sillón.

—Axl —dijo Doug haciéndome una mirada matadora para que me tranquilizara.
Duff y los demás me dieron varias palmadas en los hombros, suspiré y me volví a sentar.

—Sea lo que sea que haya ocurrido esa noche, ya pasó, ¿está bien? —dijo Niven—. El asunto es, que no les habíamos dicho nada, porque pensamos que Axl e Izzy se arreglarían como siempre solían hacerlo, hasta yo lo pensé —hizo una pausa—. Pero no fue así... Izzy llegó un día en la mañana y me dijo "quiero que presentes mi renuncia" y acá está.

—¿Axl? —me llamó Doug y lo miré—. ¿Estás escuchando? Izzy está renunciando. Ya no estará más en Guns N' Roses —dijo repitiendo todo lo que ya sabía.

No podía reaccionar, estaba en shock.

—Está bien —sonreí falsamente y me levanté del sillón de nuevo—. Dile a ese hijo de puta que se largue y que espero, ¡nunca volver a ver su asqueroso rostro de mierda! —dije alzando la voz furioso.

—Axl —mis compañeros de banda me llamaron.

–¡También dile que es un maldito cobarde! ¡No tiene la cara ni los huevos de venir aquí y decírnoslo de frente! ¿Por qué mierdas tiene que mandarlo por un papel? ¡Que se vaya a la mierda! —grité y me fui de ese asqueroso lugar.

Izzy, pensé que sólo había sido una pelea más.