Psicólogo ↪ ChanBaek/EXO

Sesión 15.1

- ¿Este era tu magnífico plan? -pregunté, observando a Chanyeol sentado a mitad de la sala de Jongdae.

Movía sus piernas de un modo insoportable y podía notar lo incómodo que estaba. Me dirigí hacia el lugar junto a él, siendo ignorado por completo antes de que Jongdae se sentara frente a nosotros con un par de anteojos falsos puestos y un anotador donde, por supuesto, no estaba anotando nada.

-Por favor, secretaria Min, ¿sería tan amable de alcanzarme algo para escribir?

Minseok rodó los ojos, yendo por lo que este pedía, recibiendo una nalgada de su parte a lo cual solo respondió con un gruñido. Al tener su lapicera en mano, Jongdae comenzó con su estúpida "fase de reparación" de la inexistente relación que tenemos.

-Comenzaremos por Chanyeol, ¿Qué es lo que te molesta de Baekhyun?

- ¿Además de que es tonto como para tener una cita con su ex? Pues que, aunque es mayor parece tener poco valor para hacer las cosas, me trata como a un niño y no me deja follarlo.

- ¿El problema es que no te deja follarselo?

-No, más bien es culpa de su secretaria, Tzuyu siempre entra en la escena y nos interrumpe.

- ¿Y tú, Baekhyun? ¿No cierras la puerta sabiendo que el hormonal de mi amigo buscará ponerte contra el sillón de tu consultorio? -preguntó Jongdae mirándome por sobre sus anteojos.

-Digamos que no acostumbro ser acosado por mis pacientes, pero recibir a uno hormonal con problemas de erección debía haberme dado una pista de que eso era posible.

Chanyeol me observó de un modo amenazante, frunciendo el ceño mientras Jongdae intentaba alivianar el ambiente con una tos para nada natural que no funcionó.

-Soy tu paciente, no puedes andar por ahí contando mis problemas o criticando mi situación.

-Te recuerdo que ya no eres mi paciente, me lo dejaste demasiado claro la vez que te fuiste con ese Luhan y me dejaste solo.

Chanyeol se puso de pie, observándome totalmente indignado y enojado a la vez.

- ¿Y crees que fue diferente a cuando tú te fuiste con tu ex a tener una cita por ahí?

-Era diferente porque en ese entonces no teníamos nada

-Y tampoco lo tuvimos porque te recuerdo que eres un llorón que no quiere salir con "niños" cuando en realidad el único niño eres tú quien tiene miedo de enfrentar la realidad.

- ¡YA BASTA! -gritó Jongdae, lanzando su anotador lejos antes de acercarse a Minseok, haciéndole una seña. – Plan B.

Ambos salieron de allí, dejándome a mí y al orejón completamente solos. Observamos a nuestro alrededor, notando que nos habían quitado los teléfonos y no había ningún modo de salir o de distraernos allí.

-Creo que no nos queda otra que permanecer en silencio e ignorárnos.

De repente la luz de apagó y Baekhyun, por impulso, se apegó fuertemente al brazo de Chanyeol. El alto pudo notar el miedo del más bajo y luego de algunas quejas de su parte lo rodeo en un abrazo, acariciando el cabello de este para calmarlo.

-Le tengo miedo a la oscuridad y el maldito lo sabe.

-Pero ese maldito tiene mucha razón y sabe lo que hace.

*

-Y luego se fue, robándose varias de mis notas sobre algunos pacientes, creo que era de los más peligrosos que tuve. -La luz se encendió mientras me encontraba hablando con Chanyeol quien me mantenía sentado entre sus piernas con mi espalda recostada en su pecho. - ¿Recién ahora vienes a abrir, maldito?

-Es que se nos fue el tiempo, ya sabes, cosas de jefe y secretaria. -guiñó uno de sus ojos, ganándose una mueca de asco de mi parte antes de ser ayudado por Chanyeol para ponerme de pie. - ¿Arreglaron sus diferencias?

-Se puede decir que somos amigos de nuevo. – afirmó Chanyeol, colocando las manos en sus bolsillos delanteros.

-Bueno, cuando dejes de mirarle el culo a Baekhyun creeré que son solo amigos, pero de momento estoy contento de que todo vuelva a estar bien. ¿Cómo lo lograron?

-Chanyeol comenzó a hablarme para que me distrajera y no pensara en que estaba todo oscuro y bueno, se me pasó el tiempo con mucha velocidad. Ahora si me permites, necesito ir a trabajar.

Salí de allí con Minseok y podía sentir ambas miradas posadas en nuestros traseros y lo confirmé al darme vuelta y ver a esos idiotas chocar sus puños mientras su vista seguía fija en aquella parte de nuestra anatomía.

Tenía una sesión importante ese día...una sesión de belleza en la peluquería.