¿Amor? O ¿Desamor?

¿Por qué tú?

Oh no, no no no no no, él no podía estar aquí, tendría que soportarlo TODAS mis vacaciones, no por favor.

—Ayleen, Edward, Samantha, que sorpresa encontrarlos acá.

—Sabías perfectamente que estaríamos aquí.

—Sí, es cierto, ¿Por qué decidiste venir justo acá? —dijo Edward cruzando los brazos sobre su pecho.

—Mírense, venían tan emocionados pensando que tendrían unas vacaciones sin supervisión.

—Eso nos dijo mamá, ¿Qué haces tú aquí Draco?

—Ayleen, querida, creíste que mamá, NUESTRA madre ¿los dejaría venir solos?

Creí que tendríamos unas vacaciones divertidas, ahora con el aburrido y mandón hermano de Ayleen, Draco, nuestros planes se habían ido por la coladera.

Draco siempre había sido quien nos ponía en mal cuando hacíamos cualquier cosa, no puedo creer que mi tía nos hubiese engañado. Lo que quería era únicamente que no usaramos los celulares en estos días. Pero ya encontraríamos la forma de hacer que Draco no invadiera nuestros planes, de eso sí estaba segura.

—Y bien, querido Draco, ahora que estamos instalados en el hotel, ¿Qué planes divertidos tienes?

—Verás Samantha, pienso que los tres días tomaremos el sol, ustedes no me darán problemas, y yo tendré mis merecidas vacaciones.

—Jajajajaja, ¿merecidas vacaciones? Sí, tu trabajo como mantenido es de mucho esfuerzo ¿no es así?—dijo Edward burlándose.

—Óyeme, óyeme Edward, tú no me vas a hablar como te plazca, estás bajo MI supervisión, así que harás lo que yo te diga, cómo te diga y cuando te diga.

— Ahora sí que serán las peores vacaciones de mi vida.—Ayleen tomó sus maletas y se dió media vuelta para entrar al hotel.

—Bien Draco, como tú tomaras el sol, Ally y yo iremos en busca de unos cuantos chicos guapos, y Edward nos acompañará, Bye.

—Oh Samantha, ¿te estás revelando contra la autoridad? ¿Qué se siente hacerlo por primera vez en tu vida?

—Mira Draco, ya basta, sólo queremos disfrutar nuestras vacaciones, deja de interponerte—Ayleen regresó cuando escuchó lo que me decía. 

— ¿Saben qué? Hagan lo que quieran, serán ustedes quienes tendrán problemas con sus madres, no yo. Así que adelante vayan a buscar chicos, tú Edward, conviértete en hombre y busca una chica con curvas y ¿yo? Yo veré la tele y luego tomaré el sol para lograr un bronceado más sexy que este, aunque dudo que exista uno mejor.

Giramos los ojos y salimos en busca de aventuras. Bueno, no aventuras, solo queríamos ir a comer.

Pedimos nuestra comida y nos dispusimos a comer. Mientras comíamos, frente a nosotros pasó un chico, y wow se parecía a Alexander, no creo que él estuviese aquí, ¿o sí? No, no era él, ni siquiera se parecía, parece que el hambre me estaba afectando un poco.

—Ally, ¿no entrarás al agua?

—No Sam, por ahora me relajaré acá.

—Saaaam ven, el agua aquí está caliente.

—Edward, ¿sí sabes por qué está caliente no?

—¿Porque tienen un aparato que calienta el agua en ciertas zonas de la piscina?

—Em no, es porque aquí hay muchos niños pequeños y pues... am.... verás...

—No Saaaam, Ew que asco noooo.

Así pasamos el día entre juegos con Edward y pláticas sobre chicos con Ayleen. Podría decirse que el primer día estuvo genial.

Pero... ¿pasaría eso con los demás días?... Eso estaba por verse.