Damon, mi infierno personal [Damon & Elena]

61. Promesas sin romper

#SinEditar

Narra Elena...

Y después de un loco día yendo de allá para acá, entre mi terapeuta, la peluquería, mi mamá y su nuevo regalo peludo que ya bauticé como Maverick -mi nueva perrita- el loco momento de mi graduación ha llegado. 

Fueron 4 largos años estudiando, trabajando, desvelándome con varias tazas de café por noche... Es tan extraño que ahora todo haya llegado a su fin. Mis compañeros y yo esperando escuchar nuestros nombres, los aplausos de nuestras familias y amigos en el público, el director de la carrera estrechando nuestra mano cordialmente mientras recibimos nuestro título profesional...

Dios, siento que empecé a estudiar tan solo ayer y ahora ya me voy como toda una diseñadora de ambientes, con solo 23 años, con planes para Canadá, con una mascota nueva y miles de sueños y planes para después.

-Elena Gilbert...

Pestañeo un par de veces antes de salir de mis propios pensamientos y me paro de mi asiento para luego caminar con la cabeza en alto hacia el escenario.

De fondo se escucha mamá con sus vergonzosos gritos y aplausos y no puedo evitar reír mientras la veo de reojo. Giuseppe está a su lado aplaudiendo y sonriendo orgulloso casi como si yo fuera su propia hija. 

Sonrío otra vez al ver a Stefan, Tannia y Lexi también, junto con Caroline y Bonnie quienes si pudieron asistir al final. 

Un pequeño vacío duele en mi pecho y eso es porque en el público me hacen falta un par de ojos azules que ya no espero volver a ver. No creo que él quiera volverme a ver, y no lo discuto. Después de todo, yo fui la mala para muchos.

-Felicitaciones Elena.

Sonrío mientras recibo mi título profesional y poso para la foto con el director. Los aplausos se hacen aún más fuertes y sigo mi camino hacia donde están mis demás compañeros con sus tontas túnicas con los colores de la universidad y sus importantes diplomas y papeles en mano.

-Lo hicimos.

Me giro hacia mi derecha y un sonriente Enzo me mira orgulloso. 

La Elena de antes hubiera rodado los ojos, pero la nueva ha perdonado cualquier idiotez de los demás, así que le sonrío igual de sincera y sigo atenta a la ceremonia.

***

-¡Elena! -grita Caroline corriendo hacia mi y me abraza fuerte antes de que incluso mi mamá pueda. -¡Estoy tan orgullosa! -dice lloriqueando en mi hombro y trato de reír como loca. Amo a mi exagerada y melodramática amiga.

-Gracias Caroline -digo un tanto asfixiada por la fuerza de sus brazos rodeando mi espalda y ella al fin me suelta dejando que Bonnie también me abrace y me felicite. 

-Gracias por venir chicas -digo mirándolas a ambas. -Pensé que no podrían.

-Tomé el primer vuelo de Austin hasta aquí. No me iba a perder esto por nada -dice Bonnie.

-Ay Dios, ¡Mi bebé está tan grande! -antes de poder girarme siento los otros estranguladores brazos de mi mamá apretándome muy fuerte. -Estoy tan orgullosa de ti que podría ponerme a llorar ahora mismo Elena Gilbert... ¡Vas a hacer que arruine mi maquillaje!

-Mamá -digo quejándome y riendo mientras me giro para poder abrazarla también.

-Felicidades cariño -dice tomando mi rostro entre sus manos. -Desde que empezaste a estudiar soñé con este momento... te amo tanto hermosa.

-Y yo a ti mamá -digo sonriendo y ella limpia sus lágrimas sin correr su máscara de pestañas.

-Elena...