Damon, mi infierno personal [Damon & Elena]

32. Instructor

Narra Elena...

Entro a mi habitación y por poco me tiro sobre mi cama boca abajo.

Estoy tan furiosa, frustrada y confundida que no logro entender que rayos fui a hacer a la mansión Salvatore buscando a Damon.

¿En que mierda estaba pensando?

En sexo. Siempre todo es culpa del sexo.

Estúpida Krystal, la odio tan intensamente que podría golpearla hasta cansarme. Ojalá siga tentándome a pelear... me gustaría canalizar mi ira así.

Bufo al escuchar mi maldito celular sonando en mi bolso.

Si es Enzo otra vez, juro que ahora si le contesto y lo mando al demonio. Es un pésimo momento para tratar de insistir en que lo perdone.

Me levanto a regañadientes y tomo mi bolso que está en el piso.

Busco mi celular que sigue sonando insistentemente y pongo mis ojos en blancos al leer Damon en la pantalla.

-¿Que rayos quieres ahora? -respondo de mala gana y lo escucho reír.

-Hola Elena, ¿Cómo estás? Yo muy bien gracias... debemos hablar -dice cortante. -Ahora.

-No tengo nada de que hablar contigo.

-Claro que tenemos que hablar hermanita. No te hagas...

-No quiero hablar... adiós -alejo el celular de mi oído pero lo escucho casi gritar.

-¡No! ¡Elena no te vayas!

Río por su desesperado comportamiento.

-¿Acaso estás rogándome Damon Salvatore? -digo divertida sin poder dejar de sonreír.

-Jamás -dice serio por lo que río aún más.

-Entonces adiós... -digo decidida y lo escucho otra vez.

-¡Elena espera!

Joder. Que chistoso es esto.

Me encanta jugar con él así. Humíllate Damon, humíllate como tantas veces lo hice yo.

-¿Que quieres? -suspiro fingiendo estar cansada de esto. En realidad no lo estoy.

-¿Puedes decirme donde vives? Estoy en mi auto dando vueltas hace un rato y acabo de recodar que no tengo ni puta idea de donde vives.

¿Él me está buscando?

¿Es esto enserio?

-¿Tú enserio saliste detrás de mi cuando salí de tu casa? -alzo mis cejas impresionada.

-No -ríe. -Corrí a Krystal por meterse en mis asuntos, me di una ducha, comí algo y luego salí en busca de ti. No fue inmediato Elena, no te creas tan importante tampoco.

Vuelvo a reír y esta vez lo escucho a él también reír junto a mi.

No sé porqué de repente todo el enojo y la ira se ha ido. Damon es una persona tan especial que puede hacer que lo odies y lo ames a la vez.

¿Ames?

Joder. Yo no dije eso.

-¿Me darás tu dirección o tendré que seguir dando vueltas en la ciudad tratando de adivinar donde estás?

Presiono mis labios pensando en si de verdad quiero verlo y hablar o si en realidad debo decir no y parar esto antes de que sea demasiado tarde.

Damon se está metiendo bajo mi piel como ningún otro lo ha hecho. Ni siquiera Stefan que fue mi primer amor ni Liam que fue el segundo.