>Capítulo 15

754 60 10
                                    

Eddy abrió la puerta mientras me decía que esa sería mi habitación hasta que quisiera irme. Entré no muy convencida de si aquello me iba a gustar. Y menos cuando vi la litera.

—¿Es que voy a dormir con alguien más?— lo miré mal y él se rio.

—No te voy a explicar el porqué, pero sí— entré mirando la habitación, no estaba nada decorada con cosas que me indicasen quién sería mi acompañante.

—¿Es Joel?— me giré hacia Eddy, que sonreía sin decir nada. Se giró e hizo una señal con la mano, me esperaba a cualquiera menos a él.

—Compartirás habitación con él— el niño jugueteba con sus manos y en cuanto Eddy le dio unos golpecitos, salió corriendo a la litera de arriba.

—¿Con el niño?— le solté acercándome a él y sacándolo de la habitación. Él no dijo nada—. Encima se ha cogido la litera de arriba.

—Si esa es tu preocupación...

—¿Dónde está Joel?— me estaba poniendo nerviosa todo aquello.

—Eh, ya lo hemos hablado y ha accedido. Estate tranquila, ¿vale?—se acercó a la puerta de la habitación—. Ardilla, estaremos recogiendo los ingredientes, ven a ayudar. Oh, y para que lo tengas en cuenta: mi habitación es la de enfrente— señaló a sus espaldas y me guiñó un ojo mientras se iba.

—Idiota— solté mientras lo veía irse. Entré en la habitación y miré un momento la litera de arriba, no podía ver desde ahí al niño—. ¿Qué pasará cuando ya no puedas saltar de árbol en árbol? ¿Te seguirán llamando Ardilla?— no hubo respuesta por su parte y me dediqué a dejar la mochila en la única mesa que había. Me fijé en que sobre la esta reposaba una bolsa de cereales, eran coloridos y tenían una pinta genial. Abrí la bolsa y probé uno: ¡delicioso!—. Yo me llamo Ellie, ¿te importa si te llamo Elliot?— le lancé comida a la litera de arriba—. Joel dice que soy mala dando nombres. ¿Verdad que Callus es un buen nombre para un caballo?— me di cuenta que mi tono era dolido. Seguí lanzándole cereales mientras yo también comía. De pronto, él apareció y cogió al vuelo el que acababa de tirarle.

—No te acabes mis cereales, ¿sabes lo que cuestan?— a pesar de sus palabras me hizo una seña para que le lanzara otro—. ¿Tenías un caballo?—sonreí—. ¿Y lo llamaste Callus?— su cara se tornó a una llena de extrañeza.

—Sí, ¿a que es un buen nombre?— le lancé otro cereal y vi cómo se movía para cogerlo con la boca. Tenía buenos reflejos.

—No sé qué decirte, pero Elliot está mejor— se apoyó a la barandilla de la cama y me sonrió—. Eres la primera que me da un nombre normal— no había emoción en su voz pero me entristeció un poco.

—¡Oh, Eddy dijo que fueras a ayudar!— dejé los cereales a un lado.

—Iba para los dos en realidad. Iremos cuando ya tengan los ingredientes.

—¿Cómo sabrás cuándo es?— me miró como si no entendiera. Se encogió de hombros. De un salto bajó de la litera al suelo, pensé que se habría hecho daño pero dio unos saltitos y cogió más cereales.

—Betty no me deja comer antes de la cena y Eddy no quiere que salga solo del pueblo— Betty era la chica rubia—. Yo creo que ya podemos ir, estarán haciendo lo guay.

—¿Lo guay?

—Preparar la comida— se dirigió a la puerta y cuando quedó bajo el umbral de esta, se giró con una cara pensativa, mirando a otro lado—. Nunca me había preguntado cómo me llamarían cuando dejase de ir de árbol en árbol.

The Last of Us   {COMPLETA}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora