>Capítulo 33

392 34 8
                                    

—Fuiste demasiado blanda con él— me recriminó Joel, que abría la marcha junto a Elliot.

—¿Blanda? Le disparó, le clavó una flecha— Elliot miraba a Joel sin entender sus palabras.

—No te digo que lo mataras pero...— Elliot rodó los ojos y volvió su atención al mapa, aunque seguramente no lo necesitaba—. De esta forma sólo logras que gane tiempo y nadie sospeche de él.

—Es importante que así sea— respondí sin más.

—Espero que se dé cuenta y no nos delate.

No dije nada más, pero sabía que Eddy no haría eso. No por tenerle confianza ni nada tan bonito como eso. No.

Teníamos a Elliot, al que adoraba, y por si eso no fuera suficiente, todo había sido idea suya. Algo me decía que ese plan siempre había estado en su mente, pero no había encontrado el momento para llevarlo a cabo. Tal vez ni siquiera tenía la valentía necesaria para ello.

Seguimos andando lo que quedaba de día, guiados por Elliot. Nunca pensé que seguiría a un crío de aquella manera, depositando mi confianza y vida en éste. Pero no había alternativa. Al que seguro que molestaba era a Joel, que intentaba ir siempre por delante a pesar de no saber adónde iba.

Hicimos la primera guardia, se quedó despierto Joel. La segunda fue para mí. Salí de la habitual pesadilla sin emoción alguna y me dispuse a quedarme despierta mientras los demás dormían. Habíamos decidido que Elliot no hiciera guardia, sin comentarle esa decisión, claro. Yo acepté sin rechistar, pero le advertí a Joel que tal vez se lo tomaría a mal.

Mentiría si dijera que no esperaba que Elliot se la liara a Joel. Pero simplemente bostezó y siguió con su papel de guía. Yo en su lugar me habría enfadado con Joel y le recriminaría que no era una niña pequeña, que podía hacer guardia.

Joel pasó con una sonrisa por mi lado, como si aquella victoria supusiera más de lo que realmente era: nada. Suspiré y saqué la pistola. Miré, como ya estaba acostumbrada, la munición que me quedaba; a pesar de ser la misma que antes. La volví a guardar, estresada, no debía olvidar lo que me quedaba y de qué dependía.

The Last of Us   {COMPLETA}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora