>Capítulo 5

1.3K 102 16
                                    

Me había encargado de preparar el conejo, por suerte había electricidad en la casa. Parecía que no hubiera pasado por aquella locura llena de infectados y muerte.

Me llevé otro trozo a la boca. Sentía raro el contacto de aquellos finos cubiertos con la aspereza de mis manos. Era como si ya no pudiera pertenecer a ese mundo que era el "normal".

Y entonces me equivoqué; por culpa de esos pensamientos olvidé que no debía mirar hacia delante. Joel encontró mis ojos y ya no pude frenar aquello.

—¿Sigues enfadada, Ellie?— mierda.

—¿Estaba enfadada?— intentaba ganar tiempo, pero no podía hacerle nada, se trataba de Joel. Me aguantó la mirada un rato y suspiré haciendo rodar los ojos. Bajé los cubiertos—. Era uno de los Luciérnagas. ¡Y lo mataste!— su cara me dejaba claro que no me entendía.

—Te estaba apuntando con un arma.

—Lo tenía todo controlado.

—No, no lo tenías— ahí estaba el tono enfadado y autoritario de Joel. Si no escaseara la comida, me habría ido.

Volví mi atención al plato, ¡claro que tenía la maldita situación bajo control! No hacía falta acabar con nadie. Yo misma lo habría hecho si hubiera sido inevitable. Pero... Sentía que algo no estaba acabado con las Luciérnagas.

Recordé aquel día en que al fin tuve contacto con ellos, en que al fin llegué a mi destino. Era un paquete que entregar, pero hubo una devolución. Me quedé con Joel y había algo que no encajaba.

Recordé su "lo juro" y me percaté de que apretaba con fuerza los cubiertos. La mirada de Joel, el tono, la situación... Todo. Todo me indicaba que me había mentido, y además, había jurado aquella mentira.

Seguí comiendo, de eso ya hacía mucho. Tal vez eran imaginaciones mías, ¿cómo iba a seguir esa mentira pasado tanto tiempo? Si de verdad se tratase de eso, ya habría salido a la luz lo que ocurrió aquel día.

—Tal vez hay algún campamento de Luciérnagas cerca— comenté dando un bocado a mi cena—. Podríamos buscarlas.

—¿Para que nos maten?— dijo él como si nada. No respondí, quería gritar un "Para saber la verdad, para asegurarme que hay más como yo, que no me mentiste", pero me llevé otro trozo de carne a la boca.

Miré mal los cubiertos, y pasé una mirada disimulada a Joel. Parecía que fuera lo más natural comer con ellos. Los dejé a un lado y me dispuse a comer con las manos.

The Last of Us   {COMPLETA}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora