Bruno llego a la habitación en la cual me encontraba entró un poco apresurado con el celular en la mano.
-Samantha, creo que el remplazo de las armas se podrá hacer pronto.
-Bruno, si no es molestia quisiera escoger yo misma las armas-dije aún que el enojo a flor de piel, Bruno me hablo en un tono más suave ya que eso hacía que me relajara un poco.
-Bambina, en ese caso esperaremos la búsqueda de su viejo bastón porque estás armas que le comentó vienen desde Alemania-dijo Bruno acercándose un poco más acariciando mi cabello.
-Mmm un viaje a Alemania eh?, me encanta la idea, quiero en 30 minutos mi avión listo y en 10 minutos la limusina, y mis maletas igual-dije más animada ya que sería la primera vez que hablaría alemán con otras personas que no fuera Bruno o mis tutores.
-A sus órdenes bambina, además su avión ya está aquí, Sasha está en el, me parece oportuno que el la cuide en este viaje, dejare a nuestra huésped sin energías para que no se entrometa en lo que no le conviene- dejó Bruno para retirarse, yo solté una leve risa, es perfecto para relajarme un viaje a Alemania
*POV Bruno *
Será mejor que le mande el mensaje a Richard para estar seguros en ese país, está casi igual de lleno de mafias que Italia, será mejor ser precavidos.
(Mensaje de texto)
Bruno: Hola Mister Richard Wolf. Quizás se acuerde de mi soy Bruno Rusheriger, doctor personal de la mafia Coppola, seré breve la nueva cabeza de la familia necesita armas y quiere seleccionarlas personalmente, quisiera que lo solo te encargarás de la mercancía sino también de nuestra seguridad, Samantha Coppola es una mujer realmente de negocios, puede ser que tiene a todaLa zona asiática a su favor y gran parte de América e Europa, así que necesitamos lo mejor de tu parte, serás bien recompensado por ello. Respecto nuestra llegada será en 12 horas pero no estar avisando muy contra tiempo, gracias por su comprensión.
Pd: Si, leíste bien, Samantha Coppola es la nueva cabeza de la familia."Es más que obvio que Richard lo leerá pronto así que alistare mis cosas y mandare a alistar lo de los sirvientes y más vale que Sasha no esté agotado.
*POV Samantha *
Estaba tomando municiones y cartuchos para mi revólver y me cercioré de que mi bastón estuviera impecable, Bruno me llamo por lo visto mis maletas y la limusina estaba lista y mi querido amigo Sasha estaba ya en el avión aguardando a verme, era un chico muy peculiar cuando lo vi, de gran corazón y no tartamudeo al jurarme lealtad, el más que un peón él realmente era familia. Entre a la limusina y fuimos a una gran velocidad a lo que tardamos poco tiempo al llegar a mi avión privado, iba un poco emocionada no me dejarán mentir, y Bruno estaba feliz de verme así una vez entramos al avión Sasha se arrodilló al verme y beso mi mano los 3 nos acomodamos en los asientos y estuvimos conversando alegremente y Sasha es un hombre muy simpático realmente podía ver su gran entrenamiento tenía cicatrices por todas partes pero la seriedad se lo quitaba su cabello pero lo hacía ver inocente de cierta manera, estuvimos alegres conversando con unas copas de vino hasta que el vuelo que era de 10 horas nos dejó exhaustos a todos menos Sasha.Desperté gracias a Bruno que me agito levemente para que abriera los ojos, Sasha tenía mi revólver y mi bastón, al entregar mi revólver lo oculte en la parte trasera de mi falda y mi chaqueta negra ayudaba a ocultarla, note que mi cabello estaba más rizado de lo normal, así que solo peine un poco mi fleco cubriendo mi parche y arregle mi corbata color negra y mi camisa manga larga color roja, al parecer mis botas con tacón estaban perfecto y obviamente mi bastón terminaba de dar el toque de elegancia que tanto me gustaba.
Sasha como siempre tenía el pecho llena de vendas y tenía su chaqueta de cuero color café y su amigo en su hombro, Bruno tenía un traje deportivo color blanco al igual que su sombrero, una camisa mañana larga de color morado y una corbata color vino, Sasha fue el primero en descender del avión reviso rápidamente el lugar y avanzó, seguidamente íbamos Bruno y yo juntos tomados de los brazos en gancho, cuando terminamos de descender doy un último vistazo, luego una chica alta he de decir, con músculos muy definidos y cabello negro hasta los hombros con unos cuantos tatuajes, de camisa desmangada color negra, pantalones militares y unas botas negras también militares, se dirigió a nosotros.
- Bienvenidos a Berlín – dijo con una media sonrisa que desapareció de manera muy instantánea – soy Karina Wolf, en donde esta ... Samantha Coppola? – preguntó una vez leyó el nombre en la palma de su mano a lo que me solté de Bruno para dar un paso hacia ella.
-soy yo, yo soy Samantha Coppola-le dedique una sonrisa y levante mi mano para que está la estrechase, a lo que recibí una mirada de incrédula y alzó una ceja reflejando cierto asombro y soltó como una risa tratando de ser suprimida.
- ammm tu eres Samantha? – con una mano intento tapar su boca cosa que no logró.
-En efecto y considerara oportuno que ya saliéramos de este lugar-dije alzando una ceja y Bruno se acercó para tomarme nuevamente el brazo de gancho mientras
- amm como usted guste señorita – dijo sin quitar su sonrisa, tome con más fuerza mi bastón – nuestra limusina esta estacionada afuera, si gustan pueden seguirnos.
-por favor- habló Bruno esperando para poder ir en dirección a la limusina y el hablo en italiano para mí -"non ti preoccupare sono fidato" (no te preocupes son personas de confianza)-yo asentí y me relaje un poco más.
- en efecto, somos de extrema confianza señorita Coppola – md miro dándome una media sonrisa y conteste de la misma manera .
-Gracias señorita Wolf-mientras Bruno, Sasha y yo la seguíamos hacia la limusina, una vez ella entró yo la seguí y Sasha le dio indicaciones a lorprei de seguir la limusina por los aires.
-Gracias señorita Wolf – Agradeció Coppola antes de entrar a la limusina seguida de los dos hombres que la acompañaban para luego entrar yo junto con mis soldados
- se les ofrece algo de beber? – hablo uno de los soldados mostrando el mini bar.
-Si no es molestia quisiera vino-dije poniendo el baston entre mis piernas.
-Agua con gas por favor-dijo Sasha mientras se ponía unas vendas negras en sus manos.
-lo mismo que el punki-dijo Bruno a lo que yo solte una leve risa mientras acomodaba mi bastón pues quería cruzar las piernas y al parecer a Sasha le causó gracia.
El soldado rápidamente se acercó a las bebidas para darle a cada quien lo que pedía para luego ofrecerle a Lady Wolf un poco de vino en un vaso pero ella lo rechazó y tomo la botella entera para luego de darle un largo trago
- les sugiero que se pongan cómodos, estaremos aquí unas horas antes de llegar a la mansión – le dio otro trago a la botella – por cierto...lindo bastón.
-muchas gracias -dije tomando nuevamente el bastón acariciando la parte del pelaje del lobo -los lobos me parecen... fascinantes -dije mientras peino mi fleco.
- pues son criaturas fieles y poderosas...no me extraña que se sienta fascinada por ellas – dijo con la voz un poco grave para luego cruzar sus piernas y mirarme con una sonrisa.
-No solo eso, son unos grandes estrategas y ellos -me detuve un momento para ver mi bastón de manera más detenida- Siempre están avanzando y nunca retroceden-le sonreí de la misma manera.
-en efecto...puedo verlo? – extendió su mano a lo cual le entregue mi bastón.
-por su puesto- tome un poco de mi copa de vino mientras sadha al parecer ya había terminado su agua.
- mmm vaya, realmente es hermoso, quizás mas adelante tenga uno parecido...y hablando ya de negocios – acaricio la cabeza de lobo con una mirada intrigante – tengo entendido de que usted quiere algunas de nuestras armas no?- tome nuevamente otro trago.
-En efecto Lady Wolf, si quieres hablar ya del pago, diré que dependiendo del tipo de armas pagaré con algo más valioso que el dinero-dije con una sonrisa cínica.
- interesante...y dígame, que podría ser eso? – le dio otro trago a su botella de vino.
-si me permite tomar la palabra lady, los negocios se hacen en la mesa y para seguir, creo que no me he presentado formalmente, mi nombre es Bruno Rusheriguer, médico personal y mano derecha de Samantha, el es Sasha Coppola subordinado y ahora protector de Samantha.-tanto Bruno como Sasha le sonrieron a lado Wolf.
- un placer – la chica dio una sonrisa efímera - ... lindo cabello – alzó una ceja a lo que Sasha habló en un tono juguetón.
-Muchas gracias, le echo abono todos los días y lo riego con amor -ante su comentario no pude evitar reírme al igual que Bruno.
- eso puedo ver – dio una sonrisa a Sasha, me devolvió mi bastón y así pasamos hablando de temas sin mucha importancia hasta que note que llegamos al la gran Mansión de los Wolf y algunos soldados abrieron las puertas saliendo de este lady wolf seguido de nosotros
- bien...ustedes dos ineptos lárguense a hacer algo útil – dijo una vez afuera, dandole órdenes a sus soldados – en cuanto a ustedes si gustan pueden seguirme – dijo con una media sonrisa y luego caminamos en dirección a la mansión siguiendo a la chica, en todo eso se escuchó una trompetea por parte de lorprei el cual descendió y se posó en el hombro de Sasha entregándole una rosa blanca.
-Mi señora- llamó Sasha a lo que yo me volví a verlo y el en el bolsillo de mi pecho colocó la rosa blanca- le da un poco más de clase mi señora-yo simplemente le sonreí y extendí mi mano y este la beso, y seguimos caminando detrás de la chica.
- vaya, lindo pollo – dijo para ver por encima de su hombro y seguir caminando a lo que Sasha no tardó en contestar.
-Gracias, le doy concentrado-dijo con una sonrisa de lado a lado.
- perfecto, ya tenemos cena para esta noche – dijo burlona tocando el timbre q lo cual nos atendieron rápidamente – siéntanse como en casa...tu ve a llamar a mi padre – tal y como ella indicó entramos apreciando la bella estructura del lugar y en poco tiempo el gran Richard Wolf hizo presencia un hombre alto de ojos negros, realmente musculoso y piel blanca con la barba un poco crecida.
- señorita Wolf, un placer conocerla al fin – camine hacia el estrechando mi mano con la suya.
-Es un placer Mister Wolf, me presentó formalmente, Mi nombre es Samantha Coppola, puede llamarme Samantha sin problemas, ya conoce a mi mano derecha, Bruno y mi protector, Sasha-le dedique una sonrisa.
- si los conozco, es un placer tenerlos en la mansión Wolf, espero que hayan disfrutado su viaje y que mi hija no les haya dado problemas – giró los ojos hacia su hija.
-Para nada señor, tiene a una hija muy cortés e de decir, ahora si no es molestia quisiera que empezáramos a hablar de negocios-dije poniendo amabas manos en mi bastón mientras noto como trataron de aguantar una carcajada.
- por supuesto Señorita Coppola, si le parece vamos a mi oficina, ahí podremos hablar cómodamente – su mirada se dirigió a su hija después de que yo asintiera con la cabeza- vienes?
- no tengo nada más que hacer – dijo adelantándose mientras que con mister Wolf caminamos pacientes hasta llegar a su oficina en la cual podía sentirme cómoda por sus lujos, al entrar nos indicó que tomáramos asiento a lo cual no tarde en sentarme enfrente del escritorio mientras Sasha se queda en la puerta como buen guardián y Bruno como siempre a mi derecha.
-Admito que tiene su toque Mister-dije dando una leve sonrisa mientras me acomodaba en mi silla cruzándome de piernas y peine mi fleco.
- muchas gracias señorita Samantha, y ahora digame...en qué clase de arma está interesada? – entrelazo sus dedos.
-vera, tenía pensado en 5 Beretta 92 F, unas 2 A-k47, una famas(G2), quisiera 5 G36, una tec 9 y por último quiero 3 MK-1S-dije con una sonrisa de lado a lado
- de acuerdo, permítame unos minutos y...
- realmente podrás manejar esas armas niña? –preguntó la chica interrumpiendo al Mister Wolf a lo cual yo la volví a ver.
-Si no me crees pruébame- dije soltando una pequeña risa- además suficientes municiones para cada una.
- de acuerdo – miro a su hija- Karina ya que tú misma dijiste no tener nada que hacer, puedes llevar a la señorita Samantha a la bodega para que ella elija sus armas personalmente – entrecerró los ojos, al parecer en parte estaba fastidiada cosa que me pareció divertido.
- ya que – dijo poniéndose de pie y una vez en la puerta ya que sad ha se había apartado ella hablo-las llaves – pidió el cual atrapó sin ningún problema yo me levante dispuesta a seguirla – sígueme – me dijo antes de adelantarse yo después de unos momentos comencé a caminar, siempre tratando de ver cada detalle del lugar.
-ustedes quédense -dije a cierta distancia de ellos elevando mi tono de voz, comencé a caminar más rápido para llegar cerca de ella.
- la bodega está en el sótano – me dijo sin verme – estará un poco oscuro, así que espero que no le temas a la oscuridad- me guiñó el ojo a lo que lo que me causo media sonrisa mientras ella giraba las llaves con su mirada cínica.
-yo creé la oscuridad para muchos y nadie la creará para mi- dije con una sonrisa satisfactoria.
- eso me agrada – seguimos caminando y unos de sus sirvientes se le acercó
- señorita Wolf –la llamó con un tono respetuoso.
- qué ocurre? – le dio una mirada fruncida por entretenerla imagino.
- una de sus...compañías acaba de llegar – me dio curiosidad que dijera compañías era más que obvio de lo que se trataba.
- sea quien sea, dile que no tengo tiempo ahora y que regrese hasta mañana de acuerdo? – el sirviente asintió antes de retirarse del lugar.
-Una chica muy ocupada por lo visto -dije en un tono divertido.
- como no tienes ni idea niña – dicho esto apresuramos la marcha hasta el sótano en donde se apresuró a usar las llaves y encender una débil lámpara de mano entramos avanzando unos metros para después dar con una trampilla donde apresuramos el paso y ella comenzó a levantar para dar con la bodega en la cual ingreso ella primero , para después darte el paso.- bien – apago la lámpara de manos y encender unas débiles bombillas en el lugar – las MK-1S están por aquellas cajas – dijo señalando un estrecho pasillo – sígueme y ten cuidado, no vayas a ser torpe de tropezar con algo...sin ofender – sonrio de lado antes de comenzar a avanzar en dirección a las cajas, amabas teniendo cuidado por donde pisábamos, en unos momentos vi la MK-1S la cual la tome sin ningún problema y aún la gire y revise dentro de lo que pude y se encontraban en un muy buen estado.
-se ven a la perfección que no habrá ningún problema- dije sonriendo de lado a lado
- están en perfecto estado y son de excelente calidad al igual que las demás – me resumió la chica - el resto están en los estantes de al lado – lo señaló a lo cual rápidamente fui a revisar y le especifique cuales quería y todo lo necesario nos dirigimos a mucha prisa nuevamente a la oficina de su padre donde y me esperaba Sasha y Bruno, Bruno fue el primero en hablar.
-Bambina con el señor Richard estuvimos hablando y el se encargará de llevarte al mejor hotel de sus aliados y te dará toda la protección necesaria.
ante esa última frase mire a mi padre
- Con toda la protección necesaria te refieres a...
- A ti, Black – cerró los ojos un poco molesta.
- ya que...al menos será un hotel de lujo – se encogió de hombros para seguir desparramada en el sofá.
-Muy bien y hablando de pagos- Sasha puso en el escritorio día lingotes de oro puro- y además creo que para un hombre de negocios le será útil tanto como a mí esto, Bruno-lo llame y el rápidamente saco 3 sueros- los 2 de tapa blanca ponen a la persona que lo inhala en un estado mental considerado como un trance que lo deja en una navegación en contacto de su subconsciente, permitiendo que este conteste con toda la verdad las preguntas que se le haga y La Roja, es el líquido que más ocupo, hágalo beber de la persona que quiera torturar y simplemente siéntese a ver el espectáculo que solo la familia Coppola puede brindar en un frasco -Sasha, Bruno y yo soltamos una pequeña risa cínica.
- vaya, vaya, realmente esto nos viene mejor que el dinero...Karina quieres probarlo?– le dio una mirada maliciosa
- si – la chica muto sus uñas despreocupada – pero no puedo hacerlo con las personas que deseo.
- algún día mocosa, y bien, a sido un placer hacer negocios con usted señorita Coppola – extendió su mano para estrecharla a lo cual no tarde en hacerlo ambos con una sonrisa- si gusta podríamos ir a dejarla ya al hotel
-Por favor, estoy un poco cansada y me gustaría ir ya al hotel-después de unos minutos nos dejaron en la limusina en el gran hotel al que a entrar ya se podía notar que era 5 estrellas, obviamente pedimos el pent hause que incluía toda la piscina de arriba, los soldados de la familia wolf ayudaron con las maletas mientras que yo solo me preocupaba por ir a mi habitación y Karina distribuía a los soldados, al subir mi cama era realmente extensa por lo que me sentí muy feliz y al acostarme podía sentir su suavidad pero la verdad quería otro tipo de sensaciones así que ya con mis maletas en mi habitación busque mi salida de baño y lo puse en mi cama mientras me quitaba mi ropa totalmente y me puse mi salida de baño y fui subiendo hasta llegar a la piscina, una vez ahí me quite la salida de baño quedando desnuda en el lugar, la piscina estaba iluminada por luces en el agua que se veían realmente llamativo, me lancé sintiendo como la deliciosa agua hacia que la temperatura de mi cuerpo me relajara y me deslicé entre el agua llegando hasta el otro extremo de la inmensa piscina realmente se sentía bien y mi cabello se sentía ligeramente pesado por el agua pero no importaba, me sumergía por momentos y pasaba mis manos por mi rostro para aclarar mi visión, me sentía tan relajada y libre en ese momento, no podía evitar acariciar por momentos mi abdomen y mi cintura.
- vaya...así que por eso no contestabas - dijo viéndome con media sonrisa a lo que yo me giré a verla un poco molesta.
-Cazzo...-dije en tono molesto cubriendo mis pechos con mis brazos- que necesitabas Lady Karina? -pregunté desviando la mirada tratando de concentrarme mejor en la bella noche.
- simplemente vine a decirte que los soldados ya están distribuidos por el hotel, es imposible que alguien entre aquí si no lo queremos, estarás segura aquí mocosa – dijo de una vez mientras se sentaba en una silla reclinable que se encontraba cerca – y más conmigo cerca
-mi nombre es Samantha y solo llámame de esa manera -me sumerjo un poco en el agua- entiendo, solo será por hoy mañana solo exploraré un poco y me iré -dije acariciando mi fleco
- de acuerdo mocosa – me dio una sonrisa muy arrogante e – y pues me parece bien, entre más rápido te vayas, mejor, no creas que disfruto ser escolta de... - se detuvo en silencio cambiando su mirada – sabes? ... hay algo que me a encantado de este hotel...lo clara y cristalina que es el agua de la piscina – soltó una carcajada a esto último a lo que me hizo resignarme de una vez y me puse pie ya un poco más molesta.
-Bueno, ya me entregaste el reporte así que ya puedes retirarte-me cruce de brazos para luego darle la espalda.
- no gracias, estoy bien aquí – me dedico una sonrisa – además por motivos de seguridad, tengo que dormir en la misma habitación que tu
-en ese caso deberías de esperar en la habitación -me sumergí un poco para poder nadar y volver a ascender de forma rápida haciendo que mis pechos rebotasen.
- debería...pero no quiero...además, no tengo porque obedecerte, no eres ni mi superior, ni nada por el estilo – dijo ella a lo que decidí mejor ignorarla y seguir el las piscina y flotando por momento logrando que yo me relajara.
- puedo hacerte compañía? – Preguntó la chica cambiando el tono de voz – la verdad, me a entrado un poco de calor – yo solo la mire de reojo.
-si quieres, solo no molestes-comencé a acariciar mi cabello y un poco mis pechos pues mis pezones estaban muy exaltados.
en unos segundos se quitó su ropa quedando únicamente con su ropa interior y se adentro en la piscina
- tranquila...no hare nada que te moleste – ronroneo antes de sumergirse por completo, yo simplemente seguí nadando hasta llegar a la otra orilla en donde me di un tiempo para descansar ahí y retomar el aliento.
-se siente muy placentero -comente en voz baja mientras aún mantenía los ojos cerrados.
- yo podría hacer que se sintiera mejor sabes? – dijo con tono de malicia mientras nadaba cerca de mi a lo que yo solté un suspiro resignada.
-solo me quiero sentir en contacto con el agua en estos momentos -restregué mis ojos para poder ver y me giré a verla mientras me deslizaba por la orilla quedando casi sentada con el agua hasta mi boca.
- vaya, vaya...así que por eso cubres tu ojo? –se acercó más a mi para observarlo más de cerca mientras tomaba mi mentón sin delicadeza lo que hizo ponerme de pie – interesante – susurro mientras se acercó más a mi.
-Es por eso que me llaman Demonio de ojo blanco, Karina... estás muy cerca -dije poniendo mi mano en su pecho para que retrocediera un poco.
- cierto...pero no tanto como quisiera estarlo – junto mi cuerpo completamente con el suyo sin quitar la mirada, en parte me hizo sentir molesta así que no pude evitar sentir esa presión en mi pecho.
-Karina, ya!-hable en un tono firme haciendo que mi ojo gris se dilatará, la empuje con la fuerza suficiente para poder quedar a una buena distancia de ella- no, soy una de tus "compañías"-dije en un tono de enfado.
- no he dicho que lo sea mocosa...únicamente...siento curiosidad por ti, además te digo...no soy para nada una mala amante – soltó orgullosa como si se tratara de un gran título.
-Estoy aquí por negocios, nada más, tú lo dijiste entre más pronto me vaya mejor-salí de la piscina caminando lentamente hacia mi bata.
En menos de lo que esperaba Karina se había puesto detrás de mi empujándome dejándome contra la pared y dejándome inmovilizada viendo a la pared.
- eso lo dije antes de que me llamaras por completo la atención – ronroneo en mi oído – te diré algo...si temes que esto salga de aquí, tranquila no lo hará, además estamos solas en la habitación, y admitámoslo mocosa...no soy para nada, mal parecida – aparto mi cabello de mi cuello antes de darme un ligero mordisco en esa zona a lo que no pude evitar soltar un suspiro.
-Karina...-me sentía realmente extraña - yo quiero más que un trato especial y- la verdad no estaba segura de esto pero... creo que lo necesito- está es la primera vez que estaré con una mujer.
- entonces aceptas? – junto más nuestro cuerpo a lo que sentía en mi trasero su parte-no te preocupes niña...no pudiste tener tu primera vez con alguien mejor – al finalizar la frase y sin darme tiempo de decir algo me volteo para comerme la boca en un beso lleno de deseo y lujuria mientras que sus manos que ya estaban demasiado inquietas recorrían mi cuerpo entero deteniéndose en mi trasero el cual apreto con fuerza mientras me juntaba más a mí su cuerpo, yo correspondía a su beso jugando con su lengua y el piercing que está tenía lo mordía un poco y dando una que otra mordida, mientras mi manos recorrían su cabello negro y su espalda, sentía como mi respiración se agitaba más y mi cuerpo aumentaba su temperatura.
- aquí no tenemos lugar, vamos a la cama – nos separamos solo para decir esto, empezó a devorar mi cuello mientras mis manos pasaban de mi trasero a mis pechos los cuales apreto y masajeo como ella quería pellizcando un poco mis pezones a lo cual no pude evitar gemir, mientras que yo desabroche su sostén y con mis uñas me empecé a aferrar a su espalda dejándole marcas.
-Karina... vamos a la cama-dije más en un tono de mando más que uno suplicante, pero en un tono de lujuria que no se podía medir en el momento. Me cargo en sis brazos sin dejar de lamer y morder mi cuello lo que provocó que sugiera dando gemidos, para tras entrar en la habitación me arrojó en la cama y se posó encima del para que ahora en lugar de sus manos fuera su boca quien le prestara atención a los efectos pezones, lo cual no pude evitar gemir un poco más fuerte -Karina...! Aaa! -mientras que con su mano libre bajaba lentamente hasta mi vientre bajo para masturbarme en un movimiento lento y desesperante, el que hacía que mis líquidos escurrieran y yo arañaba con fuerza su espalda conforme fueron apareciendo mis gemidos pero yo no quería quedarme con eso así que en un movimiento rápido la separe un poco y la voltee, quedando encima de ella sentándome en su intimidad haciendo que mis líquidos cayeran en su zona mientras besaba desesperaba sus labios y mis manos apretaban sus pechos y luego mi boca pasaba por su cuello al cual no pude resistir en dejarle un chupeton y fui descendiendo poco a poco hasta llegar a su intimidad arrancando su ropa interior y separando sus piernas comencé a devorar su intimidad lamiendo por breves momentos de una manera lenta hasta que no podía controlarlo más y movía mi lengua por su clitoris y mis labios devoraban sus labios mayores.
- j-joder Samantha – su voz estaba temblorosa por la luciría y sentía como su intimidad se calentaba más llegando al orgasmo haciendo que mi lengua y mis labios se llenarán de sus fluidos a lo que yo no dude en ningún momento en tragarlos mientras ella me jalaba el cabello ligeramente mientras el orgasmo la hacía tocar el cielo, segundos después eleve sus piernas haciendo que quedarán en mis hombros y mi intimidad hiciera contacto con la suya haciendo que nuestros líquidos se mezclarán y yo comenzará con embestidas lentas pero un poco fuertes.
-Karina... ah.. -la sujete fuerte de sus piernas mientras mis embestidas se hacían un poco más rápidas por la excitación- siente como me tienes... -decía mientras mis embestidas se hacían más fuertes.
- joder, realmente lo haces bien mocosa – dijo mordiéndose el labio mientras la embestía más y sentía como se calentaba más su intimidad pero justo cuando sentía que me iba a correr sobre ella me detuvo y con ayuda de sus fuertes piernas me obligó a estar en la posición inicial, yo abajo de ella solo que ahora una de sus manos tenia a las mias sujetadas por encima de mi cabeza sin dejarme la oportunidad de escapar
- bien mocosa...ya te divertiste – sonrió a la vez que dirigió sus dedos de su mano libre a mi entrada - ... ahora me toca mi – sin aviso metió el primer dedo con fuerza enmienda interior lo cual hizo que soltara un gemido de placer hace tiempo que no sentía ese ardor incontrolable sintiendo lo mojada que estaba lo cual no dudó en meter el segundo con igual fuerza que el anterior – vamos Coppola...sé que quieres hacerlo...gime mi nombre – ronroneo mientras movía sus dedos dentro.
-ahh Karina!-semi su nombre mientras movía mi cintura pidiendo más profundo sus dedos- no me tengas piedad Karina! -la tome del cabello para que me viera a los ojos- rómpeme por completo -le ordene sintiendo como ya estaba cerca del orgasmo
- con mucho gusto – gruñó antes de insertar el tercer dedo con fuerza moviéndose con violencia lo que hizo que mi cuerpo se estremeciera más, a la vez que devoraba mi boca y yo la de ella en nuevo y voraz beso quee dejaba y me libera del agarre únicamente para apretar mis pechos pero ya no podía soportarlo, abrí más las piernas y ahogue en el beso el gemido pues mi cuerpo entero se había tensado llegando al argasmo.
- al parecer no te arrepientes eh? – preguntó burlona la chica sacando sus dedos de mi interior y los saboreo gustosa y yo me tire sobre ella a besarla nuevamente quedando sobre ella y llevo sus manos a mi trasero -
-solo cállate -lamí sus labios ella solo se rió a la vez que me quitaba de encima y se ponía de pie estirándose
- bien, bien, no negare que me la pase excelente niñata – me guiño el ojo – pero estoy cansada y debo volver a mi habitación-me quede pensativa por algo que me había mencionado antes
-Creí que dormirías en mi habitación-alce una ceja.
-- amm nop, no es necesario, mi habitación esta justo al lado- dijo burlona – realmente te creíste lo de las razones de seguridad? Aun después de que te dije que el lugar era impenetrable? Jaja-tome unas sábanas y me tape el cuerpo entero, no le dije nada solo quería que se fuera.
- así no se le agradece a nadie por una gran noche mocosa – sonrió arrogante la chica después de haber ido por su ropa – y por cierto – habló antes de irse – me debes mi ropa interior-en ese momento mi enojo apenas lo podía controlar.
-solo lárgate-dije sin verla aún.
- como sea – se encogió de hombros - feliz noche señorita Coppola – ni si quiera me inmuté me quede acostada boca abajo.
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Atraves De Mi Miopia
Roman pour AdolescentsNuestra protagonista Samantha por primera vez conoce a su madre y su hermana, pero esa familia tiene un oscuro secreto oculto que le podía costar demasiado como su libertad y su misma humanidad tornándola como un ser que jamás se ha conocido, ponien...